Se deshoja la margarita para elegir el coordinador
Pait y Bernay gustaban, pero se fueron al exterior. Radaelli, Regenhardt, Desio y Primo, siguen en carrera. Por ahora se juega un torneo de cuarta y quinta regionalizado (habrá clásico). Después dicen que arrancan con todas las divisiones. Esa incertidumbre ha postergado la decisión para un puesto vital.
Se deshoja la margarita para elegir el coordinador
Hay datos que son elocuentes y revelan hacia dónde se conducen los proyectos deportivos de los clubes, a veces tan difíciles de sostenerse en el tiempo y tan dependientes de los vaivenes de los resultados. Un dato claro es que si tomamos el partido con Atlético Tucumán, en Unión firmaron planilla 12 jugadores que surgieron de sus inferiores sobre 23 convocados entre titulares y suplentes. Y si repasamos el listado de los 24 jugadores que Azconzábal llevó a Buenos Aires para jugar ante Huracán, también son 12 sobre 24. Si a esa lista le quitamos los de más experiencia y que forman parte de otros procesos, como Fernando Márquez y Mauro Pittón, son 10 jugadores que aparecieron en los últimos tiempos. Una buena cifra.
El convencimiento y la confianza son clave en este proceso. Los jugadores llegan, pero después también hay que contar con la otra pata fundamental que es la del entrenador. El Vasco ha puesto en escena a varios; algunos lo aprovecharon al máximo (Vera y Gastón González), otros mostraron que tienen buenas condiciones por más que no se hayan ganado el lugar (Nardoni) y otros "fueron" y "vinieron" en la consideración.
En esa estructura y en ese proyecto, le está faltando lo más importante que es la infraestructura, el predio. Pero también ahora falta el coordinador. "Es cierto que Leonardo Aguilar lo está haciendo de manera interina, pero lo está haciendo muy bien", dicen en el club. Hablan bien de su trabajo y de su organización, que es uno de los aspectos que identifican al coordinador. Pero su función es otra, más vinculada a la parte física. El proyecto deportivo lo define la institución, pero lo realiza y lo moldea el que se pone al frente de ese trabajo. Y en los últimos tiempos, Unión fue cambiando de coordinador porque varios de ellos eligieron otro destino cuando recibieron alguna propuesta.
Antes se decía que había que buscar un coordinador que llegue al club sin la ambición ni la esperanza de quedarse con el equipo de Primera cuando el técnico se vaya; ahora hay que decir que, además, hay que buscar un coordinador que llegue para quedarse, porque lo procesos no duran seis meses y ni siquiera un año. Deben ser más perdurables en el tiempo para que rinda sus frutos.
Fabio Radaelli parece contar con algún nivel importante de aceptación. En su momento hubo charlas concretas con Sebastián Pait, quien tuvo varios ciclos como captador en Vélez, institución en la que trabajó más de quince años en total. Pero Pait les aclaró que tenía una oferta del fútbol chileno, que se concretó. Algo similar ocurrió con Bernay, que se fue a trabajar a México y dicen que su proyecto había convencido mucho a los dirigentes, sobre todo porque está muy adaptado a técnicas y mecanismos modernos de entrenamiento. Luego surgió el nombre de Radaelli, quien desempeñó el cargo de coordinador de inferiores en Racing durante tres años, no sin antes haber cumplido la misma función en Tigre. Vino a Santa Fe, conversó con varios dirigentes (entre ellos Fabián Brasca, Tito Mernes y Marcelo Piazza), vio los predios en los que se entrena y se juega, presentó su proyecto de trabajo y los dirigentes continuaron con la ronda de conversaciones con otros candidatos.
Así también apareció otro nombre, que fue el de Hermes Desio (todavía no descartado), quien llegó a cumplir funciones en las juveniles de Afa. Y el de Daniel Primo, un hombre que desde su lugar en Belgrano, también adquirió un nombre y ha sido otro de los que se anotó en la imaginaria libreta de candidatos.
El nombre de Oscar Sabino Regenhardt estuvo siempre sobre "tirado sobre la mesa. El "Choclo" desempeñó ese cargo -también otros desde el rol de entrenador- en Boca y también en Patronato. Hubo una charla con él hace un tiempo y tenía contrato vigente con Boca, pero también hubo otro encuentro hace poco. ¿Es candidato?, sí, pero no parece que sea el principal ni el que reúne el mejor consenso. Algo no termina de cerrarles, a los dirigentes, en relación a este hombre totalmente identificado con Unión a través de la historia y al que alguna vez le llegó la versión de que no lo buscaban "porque era caro". Y la realidad, es que jamás se habló de dinero con él. Y hace poco se lo dijo al propio presidente en una charla radial.
Fernando Nicola Oscar Sabino Regenhardt es uno de los nombres principales que hay en carpeta. Creen que puede ser un muy buen captador de talentos.
Oscar Sabino Regenhardt es uno de los nombres principales que hay en carpeta. Creen que puede ser un muy buen captador de talentos.Foto: Fernando Nicola
Regenhardt y Bottaniz han trabajado mucho en fútbol amateur, tienen un ojo especial para detectar talentos, experiencia les sobra y son de Unión. Hoy, el fútbol argentino requiere de la aceptación de una realidad muy complicada desde lo económico y deportivo. La reducción de ingresos que provoca la pandemia, la restricción del mercado internacional porque nadie le escapa al tiempo de crisis que se vive, torna muy complicada la situación económica y hace necesaria la elaboración de proyectos internos bien cuidados y jerarquizados.
Si se toma a Lanús -Vélez también puede ser un buen ejemplo- como un modelo a seguir, más del 60 por ciento de los futbolistas que estuvieron inscriptos en la lista de buena fe de la Sudamericana (fue subcampeón), fueron jugadores que surgieron de sus canteras. Por eso, la decisión que Unión va a tomar en estos días respecto del coordinador, es clave para el futuro y para continuar en esta senda que hoy, más que nunca, está condicionada por los tiempos que se viven.