Mi amigo Carlos Flamenco y la amorosa Eva me explicaban que a pesar de que hoy sólo quedan unas pocas puertas monumentales de las decenas que llegó a haber en Madrid, las mismas forman parte de la identidad de la capital hasta tal punto que una de ellas, la puerta de Alcalá, se ha convertido en símbolo de toda la ciudad.
"Hoy día", como dicen ellos, de las cinco "reales puertas" que existían en Madrid en el siglo XVIII sólo quedan dos en pie: la de Alcalá y la de Toledo. La de San Vicente fue reconstruida en 1995 como una réplica exacta de la original. Y la puerta monumental más antigua de la capital, la de Felipe IV, data del siglo XVII y hoy comunica el parque del Retiro con el Casón y el barrio de los Jerónimos.
Todas esas puertas, las de la ciudad nueva y las del pueblo viejo, se les abrieron de golpe a un tal Mariano Gómez, un chico que a los 12 años decidió dejar Esperanza para probar suerte en Unión con sus sueños de fútbol. Hace apenas algunas horas firmó su contrato por cuatro años en el Wanda Metropolitano, así se llama el actual estadio que, por decisión del grupo inmobiliario chino, viene a reemplazar al mítico Vicente Calderón que cerró sus gradas en mayo de 2017. Ese legendario estadio al cual Joaquín Sabina, el hincha "colchonero" más famoso decidió cantarle: "Paseo de los Melancólicos, Manzanares, ¡cuánto te quiero!".
Desde una "asustada" Madrid (hay rebrotes de Covid-19), Mariano Gómez concede a El Litoral la primera entrevista exclusiva como futbolista "Colchonero". No hay demasiado tiempo para notas: sobran hisopados y se viene la pretemporada en las montañas.
-Hace algunas horas firmaste por cuatro años con el Atlético de Madrid. ¿De quién te acordaste cuando salías del Wanda Metropolitano?
-Al firmar sentí que era una sensación única, de mucha felicidad. Me puse a pensar en los que me bancaron siempre a mi lado. Los que estuvieron en las malas, siempre hablando...apoyando...preguntando.
-¿Quiénes son? Me gustaría que los nombres...
-Mi familia, mis amigos, mi amigo "Yiyo" (hace referencia a Luis Coria, su representante acá en Santa Fe, quien trabaja para la empresa Prostars de Ricardo Schlieper), son los que estuvieron siempre. Yo vengo de abajo y ellos vienen conmigo empujando para que me vaya de la mejor manera.
-¿En Esperanza quiénes quedaron?
-Toda mi familia, mis padres y mi hermana, además de mis primos, tíos y grupo de amigos. Siempre apoyaron y mandaron mensajes. Te generan apoyo, felicitaciones, siempre preguntando cómo estás. Cuando te toca estar lejos de tu lugar, todo éso suma un montón.
-Y en el medio de todo, esta maldita pandemia...
-La verdad que la pandemia fue dura. Yo tenía organizado que mi familia viniera y justo arrancó todo. Llevo más de un año sin poder ver a mi familia. En el medio, por ejemplo, durante la pandemia en Ibiza estuve compartiendo el piso con dos compañeros sin hablar el mismo idioma y estando encerrado. No se podía salir ni a la calle. Fue duro en serio.
"De Unión no me llamó nunca nadie"
Hace algunas pocas horas llegó el entendimiento final de Unión con el Atlético de Madrid por Mariano Gómez: contrato a cuatro años, venta parcial de un porcentaje, opciones de compra a futuro y hasta una plusvalía.
-¿Hablaste con el presidente Spahn o con algún directivo de Unión?
-De Unión no me llamó nadie desde el momento que me fui. Ni el presidente, ni el director deportivo, ni nadie. Soy solo yo, mi familia y mi amigo "Yiyo".
-¿Es algo que te sorprendió?
-La verdad que sí, porque Unión como club siempre quiere lo mejor. La verdad que es un poco chocante.
-Además lo que significa, gracias a este fichaje, abrir las puertas para un club como Unión con el Atlético de Madrid en todo sentido...
-Siempre voy a estar agradecido a Unión como club. Pero hubiera estado lindo que alguien de Unión me llamara y sentir un poco de interés de lo que me estaba pasando. En un momento, yo no sabía nada. Tenia que volver a Unión y nadie me llamaba. Por lo menos sentir interés, preguntar cómo estaba, cuántos minutos jugaba, si necesitaba algo o hablar por lo menos con mi familia allá en Esperanza. Son cosas que se pueden corregir y ojalá que lo hagan para el próximo chico de Unión que le toque salir al exterior no le pase lo mismo que a mí.
-Con sólo dos partidos de AFA en Unión y la experiencia del Ibiza, llegaste al Atlético de Madrid, uno de los clubes más importantes del mundo. ¿Qué consejo le darías a un pibe que está arrancando?
-¡Qué les voy a aconsejar!. Pasa que ahora todos los jugadores de abajo, los de 13 años, me piden que les pase el número de mi representante (se ríe...). Entonces yo les digo que no tienen que buscarse representante. A esa edad se tienen que dedicar a jugar a la pelota, a divertirse, disfrutar de ésto tan lindo. Les digo que el representante les va a llegar solito después. Yo me pude unir a la empresa y siempre se portaron de diez. Con "Yiyo" a mi lado, hicieron todo para que no me faltara nunca nada. Estoy muy agradecido a la empresa, me ayudaron a crecer.
-¿Te parece increíble lo que estás viviendo? Llegar, firmar, estar en el Atlético de Madrid...
-Llegar al aeropuerto y que haya gente esperando; te llevan al hotel, tenés siempre alguien a tu disposición. Me aplicaron todos los protocolos, los test. Hice el primero, me hicieron esperar los resultados y recién ahí salí del hotel para poder arrancar. Los dos primeros días entrené con el filial, el Equipo B. La primera arrancó ayer y me sumaron ahí con los de Primera. Ahora, arrancamos la pretemporada.
-¿Cómo es estar en Atlético de Madrid con Simeone?... ¿Hubo alguna charla con el "Cholo"?
-Todavía no tuve la chance de hablar con Simeone; nos entrenamos de a diez y no nos podemos acercar. Se hace todo distanciado, se respeta la distancia. La semana que viene, dicen, habrá más libertades para poder entrenar.
-Se habla de rodaje en el equipo filial, de una franquicia del grupo en Canadá, de algo de México y de equipos grandes del ascenso que te quieren. ¿Vos tenés en claro dónde vas a jugar?
-La verdad, no. Al día de hoy estoy esperando y el tiempo dirá. Si me quedo acá o voy a préstamo a algún lado. Llevo acá 4 días de entrenamientos y apenas una semana en Madrid. No tuve tiempo ni para conocer la ciudad por ahora. Además, falta mucho para que cierre el libro de pases.
-Le hacía una entrevista al ex Colón Gustavo Siviero, desde Mallorca, y él me decía que se comentaba de un chico argentino que estaba haciendo las cosas bien en el ascenso. ¿Qué te dio el año en el Ibiza?; ¿por qué te fue tan bien allá?.
-El Ibiza me dio tranquilidad. Allá tuve lo que en Unión no iba a tener: continuidad, poder crecer, sumar minutos, adquirir experiencia y ese roce que sólo te dan los partidos. Eso te falta cuando venís de abajo. Fue, la verdad, un año muy positivo en el Ibiza. Fui muy feliz. Me dieron continuidad y pude crecer un montón.
-Fue muy emotiva tu despedida "virtual" en Unión... Le agradeciste a mucha gente...
-Yo no me voy a olvidar nunca de donde vengo, siempre voy a tener los pies sobre la tierra. Agradecimientos para Alejandro Trionfini y Nicolás Frutos, porque ellos me dieron la posibilidad de crecer en Unión. A Jorge y María, los queridos encargados de la pensión. Ellos fueron mi segunda familia, siempre nos llevamos bien. Vivimos cosas muy lindas. Por eso quiero agradecerles los mensajes, hace poco hablamos. Son charlas lindas, pasamos cosas muy fuertes juntos.
-En los momentos duros, que los hubo, ¿pensaste en largar todo y volverte a Esperanza?
-Nunca. Es que siempre estaba la familia y los amigos. Ellos me llevaron para adelante, con momentos malos y momentos buenos. Siempre me dieron contención.
-¿Qué compinches de fierro quedan acá, de la misma categoría?
-Gonzalo Bologna creció conmigo, llegamos a Unión juntos y ahora ya está en el Plantel Profesional. De esa camada, Flores, Gerometta, Nico Andereggen. Una amistad increíble con esos chicos.
-A Nico Andereggen le pasó lo mismo: cuando vos saliste para Ibiza, él se fue a Suiza; sin embargo, ahora volvió a Unión a pelearla una vez más. A veces no es tan simple el caminito para llegar y vos te fuiste solito a pelearla en el Ibiza...
-Mi situación en Unión nunca fue fácil. Cuando estaba en séptima, me sube Jorge Mauri a reserva de AFA; al toque cambian de DT y me bajan; me vuelven a subir...me vuelven a bajar. Pasó así como cuatro o cinco veces. Son cosas que al jugador le molesta, no te hace bien y baja tu rendimiento. Yo empecé e tener continuidad en reserva, sumé minutos en Primera, hice las pretemporadas. Pero llegaban los refuerzos y yo quedaba cada vez más abajo. La verdad, me sentía más afuera que adentro. Entonces, cuando surgió lo del Ibiza dije que sí porque sabía que la iba a pelear.
-Para alguien que llegó a los 12 años al semillero del club y hoy firma con el Atlético de Madrid, ¿qué tiene Unión y qué le falta en inferiores?
-No le falta mucho a Unión, desde que llegás te enseñan a tener los pies sobre la tierra, a no creértela, a crecer, te inculcan ser trabajador, tener humildad y luchar. El club te brinda lo mejor para que estés cómodo. Y de las enseñanzas, siempre te llevás algo adentro de la mochila. Yo me llevé cosas a Ibiza y ahora a Madrid que me inculcaron de chico en Unión.
-¿Sabías que sos el cuarto fichaje directo de Unión a España en toda la historia?. Antes se dio lo de Victorio Cocco a La Coruña, el "Turco" Alí a Valladolid y el "Choclo" al Málaga...
-Es algo muy lindo, porque dejás bien parado a un club como Unión.
-Pensar que cuando jugabas los "torneitos" para San Lorenzo de Esperanza te miraban siempre a vos y a Schurrer, un número "9"...
-Con Schurrer nos hablamos de vez en cuando, fuimos de los primeros en salir de San Lorenzo y dar un paso para adelante.
-¿Cómo sigue la pretemporada con el Atlético de Madrid?
-Arrancamos a doble turno y el lunes nos vamos para Los Ángeles de San Rafael, en la zona de las montañas cerca de Madrid... una semana a full en la parte física.
-Me imagino que cuando tu vuelo bajaba en Barajas, podías ver el Wanda (N. de R.: el estadio nuevo del Atlético está "pegado" al Aeropuerto) desde el avión...
-Fue algo muy lindo, todavía me parece increíble.
-¿Dónde están entrenando? En el Wanda o en la Ciudad Deportiva...
-Por ahora en la Ciudad Deportiva Wanda de Majadahonda.
-Imagino que ni tiempo para turismo en la bella Madrid...
-Nada, encerrado en el hotel. Primero, un test, entrenar, otro test, entrenar y mañana otro test...
-El padre de Messi le llevó milanesas desde Rosario a Barcelona. ¿Qué le pedirías a tu viejo o a "Yiyo" cuando vayan para Madrid?
-También le pedíría las milanesas, algo de carne y los alfajores. Tengo antojos de todo...jajaja
-¿Cómo está hoy la pandemia ahí en Madrid?
-Complicada, con rebrote, distanciamiento y uso de barbijos. Incluso acá, cerca de Madrid, con varias localidades cerradas.
-La última: ¿es verdad que estuviste más de un mes sin poder hablar con nadie allá en Ibiza?; ¿de qué nacionalidad eran los otros dos futbolistas extranjeros?
-Uno de Ghana, otro de Senegal...cero comunicación.
-O sea que si te "bancaste" eso, podés jugar en cualquier lado y con quien sea...
-Sí, soy duro de tumbar. Cuando uno sabe lo que quiere y está convencido en seguir creciendo, el trabajo siempre te vuelve. A eso lo tengo claro.