Kily González: "Pasé de ser Guardiola contra Racing a ser el peor entrenador del mundo"
“Hay que animarse a jugar, sacar a flote la rebeldía y el orgullo. Si lo hacemos, vamos a ganar el partido y a eso la gente lo va a reconocer”, señaló el entrenador tatengue.
Kily González: "Pasé de ser Guardiola contra Racing a ser el peor entrenador del mundo"
El entrenador de Unión, Cristian González, señaló que “ante Racing parecía Guardiola y ahora el peor técnico del mundo”, admitió lo mal que se jugó con Platense, “hicimos una fuerte autocrítica con los jugadores” y pidió “calma y paciencia el sábado, que saldremos a recuperar la agresividad y la confianza que hemos perdido y vamos a ganar el partido”.
“Tanta ansiedad de resultados hace que muchos técnicos se hayan tenido que ir en este campeonato en sólo seis partidos. No miro eso, no miro lo que puede pasar conmigo, sólo quiero ganar y borrar la mala imagen del otro día. Hace menos de un mes que empezó el torneo, en el primer partido parecíamos los mejores y ahora nos quieren hacer creer que somos los peores”, agregó.
“En lo único que pienso es en mejorar al equipo, en armar algo bueno para ganar y no pienso qué puede pasar si no ganamos. Soy optimista. Hicimos una autocrítica muy fuerte con los jugadores y ellos son los primeros en saber que no estamos bien”, señaló el entrenador rojiblanco en su encuentro con la prensa.
Consultado sobre lo ocurrido el lunes con Platense y la reacción de la gente, el Kily dijo que “me sorprende la ansiedad que hay, el nerviosismo y la exigencia que hay para que a los cinco minutos se vaya ganando 1 o 2 a 0. Hay una cosa que siempre dije: la gente debe entender que así como se transmite lo bueno, también se transmite lo malo adentro de la cancha. Hay gente joven y a algunos les pesa más que a otros”, agregó.
Unión empató con Platense.
“En este fútbol nadie te espera. Se dejó la vara muy alta en ese partido con Racing y estamos ilusionados en repetir el partido con Racing o el mismo partido con Estudiantes, más allá de que lo perdimos. Pero fíjate que esta fecha es tremenda, la de los clásicos, porque los comentarios son que si tal o cual equipo pierde, el técnico se va. Y eso es una locura”, reflexionó en relación a que el fútbol argentino cada vez se convierte más en una “picadora de carne” para los entrenadores.
“En el semestre anterior peleábamos el descenso y la gente se iba ovacionando al equpo. Y eso que tampoco ganábamos. Por eso, debemos recuperar nuestras formas. Hay que estar a la altura de lo que jugamos, quedan 24 puntos por delante y esto va cambiando contínuamente. Le pido calma a la gente, el sábado saldremos a ganar como siempre”, continuó el técnico tatengue.
“Jugamos 6 partidos en 25 días, hicimos un esfuerzo muy grande, tuvimos sobrecarga, lesiones y nosotros queremos prevalecer por la intensidad. Veo que hemos perdido la confianza en nosotros mismos y hay que recuperar el atrevimiento. Voy a defender siempre a este plantel. Pero repito, somos los primeros en hacer autocrítica, pero también sé lo que este plantel puede brindarme”, agregó, remarcando que tiene confianza en que se pueda marcar un punto bisagra que, indudablemente, debería llegar a partir de una victoria que retemple los ánimos.
Sobre lo que le falta al equipo, señaló que “yo necesito jugadores que se animen a jugar, que tomen decisiones en la cancha. Hay que soltarse, sacar la rebeldía, el orgullo y esos atributos que la gente nos va a reconocer”.
En cuanto a la situación de algunos jugadores, dijo que “en el caso de Torren, vamos a analizar con el paso de las horas si está para jugar, tiene una sobrecarga en el isquiotibial. Lo de Roldán es más difícil porque el problema está en la rodilla”.
Preguntado sobre los objetivos, dejó en claro que “los objetivos son el día a día y cada partido. Uno puede ilusionarse de entrar entre los cuatro pero hay que ir partido a partido. Más de eso no puedo focalizar. Hay que retomar esa energía y hacerle sentir el rigor a los que vienen a Santa Fe y que la pasen mal, como era antes. Yo quiero jugar todos los partidos de local, con mi gente. Y eso es lo que hay que hacerles entender a los jugadores. El desafío personal es ganar el partido. Lo anímico es clave, no todo el mundo gana siempre y no todo el mundo pierde siempre”.
En relación al equipo que jugará el sábado, dijo que “busco a los mejores que estén en lo físico y a los que anímicamente mejor respondan. Hace tres o cuatro meses atrás estábamos en una situación dificilísima y salimos a flote con Domina de extremo por derecha y Pardo de volante central”.
También se lo consultó por la situación interna del club y la asamblea que fue suspendida: “No me gusta hablar de lo político, sé que Unión está politizado y hay gente afuera que no quiere que las cosas salgan bien o intentan desestabilizar. No conozco tanto de la interna de Unión. Lo que digo es que la gente va a pasar pero el club siempre va a estar. Lo más importante es Unión. Sólo quisiera que la gente apoye”.
Luego retomó la parte futbolística y dijo que “hay que volver a los orígenes, a trabajar más, a hacer lo que hicimos cuando llegamos, a animarse. Le pido un poco de paciencia a la gente. Sé que la gente nos va a ovacionar si logramos volver a conectar con ellos. Vamos a ganar el sábado, estoy totalmente confiado de que así será”.
Para el partido del sábado el Kily busca "a los mejores que estén en lo físico y a los que anímicamente mejor respondan".
Respecto del mercado de pases, dijo que “cuando las cosas no salen bien, se cuestiona todo. La gente que se encargó del tema de los fichajes, analizó más de 150 jugadores en relación a qué era potable para el club y para nuestro estilo. No todos los jugadores quieren venir a Unión, esa es una realidad que hay que entender. Por eso digo que es un gran desafío cambiar el chip y entrar a torneos internacionales. Eso hará más factible la llegada de los jugadores. En lo económico, sé del esfuerzo del club. Pero estábamos a punto de ficharlos y salió algo mejor para ellos y se fueron”.
Luego afirmó que “yo pasé de ser Guardiola contra Racing a ser el peor técnico del mundo. Nosotros somos capaces de jugar mucho mejor de lo que actualmente lo estamos haciendo. Por eso digo que hay que callarse la boca y hablar en la cancha”.
“Volviendo al mercado de pases, que recién me preguntaron, los que quisieron venir, vinieron. Los que vendieron humo diciendo que querían venir y no vinieron, no los voy a juzgar. Nosotros, con muchísimos pibes del club, jugamos el partido más importante y defendimos la categoría contra Tiogre. Se fueron 4 técnicos en 6 fechas, en menos de un mes. Esto es el fútbol argentino, una locura. Con la gente grande le estamos poniendo el pecho a la situación”, señaló.
Respecto de lo que está viviendo desde que llegó a Unión, en estos 26 partidos que ha dirigido, dijo que “en Unión he vuelto a ser feliz, me hizo ser importante nuevamente, me dio el aprendizaje de jugar a defender la categoría como lo hicimos y bien el año pasado. Estoy en Unión y Unión, para mí, hoy es el mejor equipo del mundo. Hay que pasar este momento, asumir el reto, soltarse, ir para adelante, animarse a pedir la pelota, ser agresivo y ganar el partido del sábado. Lo del otro día fue un golpe muy duro para nosotros, lo sentimos y sabemos que el sábado tendremos un rival que también necesita ganar”, concluyó el Kily.