Kily González: "Con Spahn tuve una charla dura y contundente"
El entrenador calificó de “positiva” la reunión con el presidente y también aclaró que no renunció en el vestuario cuando terminó el encuentro con Racing, aunque aclaró que tuvo una larga charla con el plantel al día siguiente en Casasol. Hubo insultos a la dirigencia.
Kily González: "Con Spahn tuve una charla dura y contundente"
Unión está segundo, ganó todos los partidos como local, la campaña es muy buena, está clasificado para Sudamericana y a tres de la Libertadores. Después de haber sufrido tanto el año pasado y de poner en riesgo extremo la permanencia en Primera, Unión disfruta por fin de un momento de alegría, pero apenas terminada la ovación para los jugadores por la victoria, llegó la reacción generalizada de la gente contra la comisión directiva desde los cuatro costados del estadio.
El Kily González habló luego del encuentro. Sobre lo futbolístico y la reacción de la gente, insultando a la comisión, Cristian González dijo que “no quiero hablar más de este tema, ya hablé con el presidente, fue positiva la reunión y el apoyo de la gente estuvo. Sobre la reacción de la gente no puedo opinar, yo tengo que pensar en lo deportivo, jugamos un partido recontra difícil, tres días después de jugar con Racing, nos costó por momentos, sumamos gente en ataque y fuimos justos vencedores”.
En cuanto a las declaraciones de Corvalán, que dijo que “el Kily nos dijo que se quería ir luego del partido con Racing”, señaló que “el compromiso que tengo con mis jugadores y ellos conmigo, me dan las fuerzas para seguir. Tuvimos una muy buena charla el lunes con el plantel, una vez que volvimos de Racing, me conocen demasiado, saben de mis reacciones, intercambiamos opiniones y tengo el equipo a muerte conmigo. Eso me deja a pleno y estoy orgulloso de los jugadores que tengo. Este equipo se va a entregar hasta el final y ojalá se pueda solucionar el tema del club y tuvimos una charla contundente de mi parte. Le dije que Unión está por encima de todos los nombres y tenemos que estar a la altura de esta ilusión que generamos”.
Continuó diciendo el Kily que “yo tengo un cariño muy particular y para toda la vida por Central. Yo vivo y disfruté de esta victoria por mis jugadores. Ellos lo saben. Cada partido, para nosotros, es una final. Y buscamos superar al rival asumiendo riesgos, jugando mano a mano, presionamos arriba y vamos por todo”.
Luego elogió a Pardo y dijo que “tiene hambre de gloria” y rescató el hecho de que no jugó en la posición habitual, al igual que Paz, “que le tocó jugar por izquierda y lo hizo muy bien, como también Lautaro Vargas, que parece que tuviera 100 partidos y no seis o siete”.
En cuanto a la inhibición, dijo que “seguimos con esa palabra que me da bronca decirla. Tengo fe que se va a solucionar, más allá de que no hay muchos jugadores en el mercado. A mi no me gusta traer por traer, insisto en querer jerarquizar el plantel, pero el que venga sabe que tiene que ponerse el overol y nadie tiene el puesto asegurado. Esta mañana los comprometí a todos, les pregunté si estaban preparados para la ‘guerra deportiva’, nos miramos a los ojos y fue muy buena la respuesta”.
Respecto de los refuerzos, habló de que “lo de Fragapane está complicado porque el tema de la moneda es un obstáculo. Con el presidente tuve una charla muy dura, nos miramos a los ojos y ojalá que podamos solucionar todo”.
En cuanto al rival que se viene, dijo que “sea River, Boca o el que venga, jugaremos a lo que jugamos nosotros. Con todo el respeto que River me merece, no me quita la forma de jugar. Intentaremos superarlo con nuestras armas y ganar el partido”.
“Yo no renuncié en el vestuario en ningún momento, el día posterior hablé con los chicos y recibí el honor y el orgullo de ellos de respaldarme a muerte. ¿El cambio de Del Blanco?, fue porque Bruno Pittón estaba cansado y busqué frescura por ese lado con Mateo”, señaló el técnico.
Sobre el penal atajado por Cardozo, dijo que “estaba convencido de que Tiago lo iba a atajar, como creo que todo el estadio lo estaba”.
Sobre el cartelito que apareció pegado este miércoles por la mañana en la puerta de su domicilio, de una niña que le escribió “Kily no te vayas”, el técnico rojiblanco dijo que “eso me genera emoción y felicidad. Este momento quiero disfrutarlo, en algún momento la gente estuvo enojada conmigo y la entiendo. Hoy creo que la situación es muy diferente. Mi equipo es valiente, se atreve, se anima a jugar, no tiene miedo al error y tiene una fortaleza que contagia”.
No le escapó a admitir que “soy hincha de Central y lo llevo en el corazón… Mi viejo seguramente me estará puteando… Y mis amigos también… Respecto de Russo, tengo admiración por él, tendré un cariño eterno hacia él, me habla, me aconseja y esas son cosas que no olvido. Y aparte, que los jugadores que pasaron por nosotros vengan a saludarnos, me llena de afecto. Como que Marco Ruben me salude cuando salió reemplazado. Hoy quería ganarle, pero a partir de ahora le deseo lo mejor”.