Por Enrique Cruz (h)
(Enviado Especial a Buenos Aires)
El tema fue así. Tiro libre para Unión. Ejecuta Matías Donnet al corazón del área, Guerra clava un cabezazo impecable y Armani ataja sin retener la pelota; le cae a Renzo Vera y éste la envía al fondo del arco. Algunos piensan que la pelota estaba adentro cuando Armani la manoteó. El juez de línea se quedó parado y en el vestuario dejó en claro que el gol se lo dio al segundo jugador que interviene adentro del área. O sea, a Renzo Gonzalo Vera.
—¿Fue tuyo o no Renzo?
—Ja, ja... ¡Es lindo hacer un gol...! Soy sincero, cabecea Claudio, veo que el línea se queda parado y la meto yo, pero es 50 por ciento de Guerra y 50 por ciento mío... Pero déjenme la felicidad a mí... Sean buenos, ¡dénmelo a mí!
—No sea que Guerra se lo adjudique...
—No, Claudio se pasó porque el línea preguntó el número del que había hecho el gol y Guerra dijo que fue el “2”, o sea que fui yo. ¡Bien por Guerra!, ja ja...
—¿Por qué se jugó bien en el segundo tiempo y mal en el primero?
—Pasa por la cabeza, no pudimos acomodarnos en el primer tiempo. Lo hicimos en el segundo y empatamos bien. La cancha estaba fea, pero pudimos adaptarnos en el segundo tiempo.
—¿Complicaron los delanteros en el primer tiempo?
—Bajaban mucho Barreiro y Aldave a buscar la pelota cerca de los dos volantes centrales, entonces tomamos la decisión con el uruguayo Correa de esperarlos y no salir tan arriba para marcarlos.
—¿Y el gol de Merlo?
—Fue un golazo el de ellos. La clavó desde afuera del área en el ángulo. Inatajable y con poco para hacer de parte nuestra.
“En otra cancha era otro partido”
—¿Qué podés decir de la cancha, Diego Calgaro?
—La verdad es que el piso es lamentable. Los chicos de Merlo no tienen la culpa pero es lamentable venir acá a regalar dos puntos. Si la cancha no habría sido ésta, quizás el partido era otro. El nuestro es un equipo que juega al fútbol, queremos pelear el campeonato pero no se puede en una cancha así. A Instituto le pasó lo mismo, vino acá a buscar el partido y no sólo que jugó mal, sino que además perdió. Y nosotros hoy no perdimos de casualidad.
—¿Sirve el punto?
—Sí, claro. Sirve porque estamos ganando de local y empatando de visitante. Así vamos bien. Nos costó encontrarle la vuelta al partido porque siempre intentamos por abajo y en el primer tiempo no dábamos dos pases seguidos. Si la cancha era otra, el partido también hubiese sido otro.
—¿Quién sufrió más el partido?
—El mediocampo, porque nosotros somos un equipo que intentamos jugar la pelota por abajo y eso, en esta cancha, es imposible.
—¿Cuándo se puede hablar de un Unión candidato?
—El torneo es larguísimo, falta más del 70 por ciento por jugarse... Lo que tenemos que hacer en esta primera rueda es un buen colchón de puntos para arrancar bien el año que viene. Protagonistas ya somos, pero para hablar de candidatura falta bastante.
“No busco excusas”
El Turco Alí fue el último de los protagonistas que salió del vestuario visitante y dejó sus impresiones del partido.
—¿Qué podés decir del partido, Turco?
—No busco excusas y creo que lo que hicimos en el segundo tiempo lo podríamos haber hecho tranquilamente en el primero. A los partidos hay que salir a ganarlos y eso los muchachos lo saben muy bien.
—¿Viste algún penal a favor de Unión en el segundo tiempo?
—Hubo una jugada dudosa del Coqui Torres, pero como el césped estaba alto no se veía la línea y no sé si fue o no foul y si fue adentro o afuera del área. Pero la otra, la de Matías Donnet, creo que fue clara. Matías es desacomodado por el defensor y a pesar de que conecta la pelota, para mí la falta existió.
—¿Hay algo que tenés que hablar con los muchachos respecto de los primeros tiempos?
—Me voy conforme y contento por la forma en que jugamos el segundo tiempo, pero nosotros somos conscientes de que tenemos un bache en el inicio de los partidos. Hoy el bache duró más de media hora y fue peligroso.
—¿Fue eso o la falta de adaptación a una cancha que es mala?
—Sabíamos que era una cancha mala y que el rival era difícil. En ese aspecto, todo se dio de acuerdo a los parámetros que analizamos en la semana. El tema es que se viene dando bastante seguido y es uno de los aspectos a resolver. Pero me voy contento.
—¿Cómo terminaron Torres y Cólzera?
—Cólzera pidió el cambio, no estaba bien, y Coqui estaba dolorido, sintió una molestia en la parte de atrás de la pierna y por eso decidí el cambio. Cuando ví que estaba elongando ese sector, no dudé.
—¿Calgaro?
—No, Calgaro bien. Lo que pasa es que no quería que lo echaran, lo estábamos mirando y veíamos que si protestaba lo podían expulsar y por eso resolví que saliera.