El defensor Dylan Gissi, de último paso por Patronato de Paraná, se convirtió en la cuarta cara nueva que tendrá el plantel de Azconzábal. A los 30 años, este zaguero central que ya había sonado en el mercado de pases rojiblanco antes de la contratación de Brítez, se sumar al mencionado Brítez, Cordero y Blandi (también fue oficializada su incorporación).
Nacido en Ginebra, vivió allí hasta los 15 años, pero aprendió a hablar mucho antes en castellano que en el francés que domina a esa región. En sus 30 años de vida tuvo un andar nómade típico del fútbol que lo paseó por Basilea en su país natal, pero también por Madrid, Montpellier, Rosario, Paraná, Tucumán o Bahía Blanca. Es hijo de Oscar, un volante de buen pie que jugó en Quilmes, Vélez y Estudiantes de La Plata, para luego emigrar a Alemania con la promesa de jugar en esas tierras, pero finalmente lo hizo para el CS Chenois de Suiza, donde nacieron sus hijos.
Dylan hizo inferiores en Basel –el equipo más popular de Suiza– y a los 15 años pasó a las juveniles de Quilmes, cuando sus padres regresaron a la Argentina. Su primera estadía en Argentina no duró mucho y Dylan pegó la vuelta a Suiza para firmar su primer contrato profesional con el Neuchatel Xamax que tenía al ex Independiente Néstor Clausen como DT.
Ese primer salto al fútbol profesional le permitió desembarcar en el Atlético de Madrid. "Un muchacho español vio videos y se dio la prueba. Me llevaron a jugar un torneo y salimos campeones. Ellos llevan el equipo y cuatro o cinco pibes que quieren ver. Me quedé un año en el Atlético, en la cuarta, pero cuando me tocó renovar no quería, porque me bajaban un poco de plata y la gente que estaba metida en el medio no era muy franca que digamos. Así que corté el vínculo y me vine de vacaciones a Argentina", cuenta en una entrevista reciente en Infobae.
Tenés que leerEl extravío de afuera que se transmite a los de adentro"Mi viejo estaba en Estudiantes y yo conocía al coordinador de inferiores. Me permitieron entrenar ahí y en un momento tuve la suerte de practicar con Primera porque faltaba gente. Me habían visto bien, entrené con primera, con el equipo de Sabella que venía de ser campeón de la Libertadores y al cuarto entrenamiento Sabella me dio el visto bueno para firmar contrato. Yo, encantado, firmé con los ojos cerrados", cuenta Gissi, quien debutó en Estudiantes en 2011.
Entrenó con el Sub 20 de Walter Perazzo para el Panamericano, pero no quedó en la convocatoria final. También fue citado por su país de origen para entrenar con la Sub 21 que jugaría la Eurocopa de la categoría y luego para la Sub 20, donde fue parte del primer triunfo ante Portugal de esa divisional en el único amistoso que jugó. "No sé cómo me rastrearon, la verdad. Me dijeron que me estaban siguiendo y me pidieron que mandara uno o dos partidos completos. Jugué y fue la primera vez que se le ganaba a Portugal. Una linda experiencia, de la nada, una locura", recrea.
Luego saltó al Montpellier de Francia, donde estuvo tres años hasta que el Chacho Coudet lo llamó para que juegue en Rosario Central. De allí pasó a Defensa y Justicia, luego a Atlético Tucumán y por último a Patronato. "El fútbol argentino te tira, lo que más me gusta es el ambiente que tiene, cómo lo vive la gente. Me atrae eso. Hoy en día con la pandemia que se está estirando tanto, se extraña la gente y más la doble hinchada. Yo jugué poco con las dos tribunas, porque estaban tratando de sacarlas cuando empecé a jugar. A mí me gusta jugar acá. La carrera del futbolista es corta y va dependiendo de los cuidados. Me gustaría seguir acá, pero siempre está la deuda pendiente de volver a probar en Europa", concluyó en aquella entrevista.
Gissi rescindió su contrato el miércoles con Patronato y se dice que el principal motivo es que Iván Delfino no lo tuvo en cuenta desde el momento en que hizo declaraciones que no cayeron bien. En la previa del partido entre Patronato y Aldosivi, del torneo pasado, Dylan Gissi realizó declaraciones con una radio de Mar del Plata: "El cuerpo técnico nos soltó la mano cuando nos estamos ahogando", disparó el defensor, después de una conferencia que dio Delfino.
"Me toca ir al banco, creo que será por rendimiento y no pensar otra cosa porque la semana fue bastante movida en relación a las declaraciones del cuerpo técnico la semana pasada. Según lo que se dio a entender en la conferencia de prensa iba a jugar quien más sentía al club, cuando yo hice mucho sacrificio para estar y me siento muy identificado con el club. Las personas que me conocen saben lo que siento por Patronato, por qué vine, lo que dejé por venir. Quiero creer que es por rendimiento, pero más allá de eso, yo sentía que vengo cumpliendo. Si bien somos un desastre, pero todos lo somos. La conferencia fue brusca, fue dura para el nivel grupal, porque medio que nos soltaron la mano. Nos suelta la mano el cuerpo técnico y por lo que se dijo, somos los únicos culpables, cuando los que salimos a defender la camiseta somos los 11 que arrancamos más los cambios, el grupo en general. La culpa es compartida, para esos somos un grupo. Fue desilusionante a nivel grupal. Lo que pienso, me lo guardo, pero nos soltaron la mano cuando nos estamos ahogando. Que los mayores responsables somos los jugadores, porque es lo que hay. La categoría nos pesa a nivel jugadores y a nivel cuerpo técnico. Cuando te falta jerarquía, hay que trabajar", fueron las declaraciones de Gissi que motivaron la decisión de rescindir el contrato con Patronato, pese a que los directivos pretendían que continuara.
El defensor firmará por 18 meses, hasta diciembre del año que viene y se sumará de inmediato al plantel que dirige el Vasco Azconzábal. Su nombre se mencionó hace algunas semanas, antes de comenzar el torneo, pero se esperó hasta el final porque todavía tenía contrato vigente con Patronato, más allá de la situación particular y ese enfrentamiento con el actual entrenador, que más allá de haberse suavizado, de acuerdo a lo que se pudo saber, quedaron reminiscencias y por eso se decidió su alejamiento de Patronato.
Si bien se sabe desde hace un tiempo que Nicolás Blandi tiene todo arreglado para jugar en Unión y que no se incorporó al plantel pues le ha costado el regreso desde Chile, por las restricciones sanitarias, ahora la contratación se hizo oficial por parte del club.
Blandi fue contratado a préstamo hasta diciembre de 2022, con cláusula de salida en diciembre de 2021. Está realizando un trabajo de acondicionamiento físico en Chile, cuando llegue a la Argentina hará cuarentena durante siete días y luego podrá sumarse al plantel rojiblanco.