El entrenador de Unión, Sebastián Méndez, admitió luego del partido que “me voy recontra caliente” y admitió que Arsenal se lo termina ganando con más ímpetu que con fútbol.
“Estuvimos imprecisos, nos llevaron por delante con ímpetu más que con fútbol”, señaló el entrenador rojiblanco, que se hizo cargo de la derrota y agregó que “no supimos leer el partido”.
El entrenador de Unión, Sebastián Méndez, admitió luego del partido que “me voy recontra caliente” y admitió que Arsenal se lo termina ganando con más ímpetu que con fútbol.
“Nos pusimos rápido en ventaja en el segundo tiempo, en el primero habíamos creado las situaciones más claras pero el segundo tiempo no fue bueno. Y ellos lograron el empate muy rápido. Esto tiene que ser una lección para todos, no supimos leer el partido. Y en esto involucro a todos, inclusive yo. Estuvimos imprecisos, nos llevaron por delante con ímpetu más que con fútbol”, dijo el técnico rojiblanco.
Agregó que “sigo pensando lo mismo, la derrota no me cambia, sigo creyendo en el equipo” y dio su explicación respecto del cambio de arquero: “Ya habíamos acordado de antemano el cambio de arquero. Quería evaluar en los dos partidos y ahora tomaremos la decisión”.
“No me sorprende la endeblez anímica, si estamos donde estamos es por algo. En la última pelota no se puede ir el partido, es donde más atentos hay que estar. Ví al equipo cansado en el final. El partido se rompió, pero ellos lo aprovecharon mejor que nosotros”, continuó el técnico tatengue.
“Por adentro estoy recontra caliente, pero es fútbol y hay que saber perder. Yo creo que han dejado todo, no tengo nada que reclamar en cuanto a la actitud. Lo dije el otro día ante Tigre, cuando señalé que se corrieron todo y se vaciaron. Cuando uno está último, lo que está buscando es salir y para eso hay que ganar de visitante también. Hago hincapié en que los minutos que siguen al gol a favor son claves y no nos pueden sorprender. Pero el responsable soy yo. El fútbol es como la vida: es una cuestión de decisión. Y vamos a salir adelante”, continó.
En cuanto al objetivo con el que se vino a Sarandí, dijo que “a nosotros no nos servía el empate, buscamos los tres puntos. Con el hecho consumado se puede pensar en que se podría haber buscado otra cosa, pero repito que nosotros necesitamos ganar, no podemos especular con cuidar la ventaja que habíamos conseguido. Nadie tiene un puesto asegurado, lo hablé con los muchachos y es así. En Unión no hay titulares, juega el que anda bien”.
“La derrota tiene que doler, pero hay que recuperarse. El lunes empezamos a entrenar para ganarle a Lanús. Esto no puede durar más allá del lunes”, dijo el técnico antes de terminar el encuentro con la prensa señalando que “la situación en la que estamos y el cansancio hizo que nos equivocáramos en el último pase o en la decisión final en el segundo tiempo. Insisto en que dejaron todo, porque acabo de verlos en el vestuario y puedo asegurar que se vaciaron”, concluyó.