Hubo bajas a granel, dos debutantes, un blooper, gol anulado por VAR, un tiro libre magistral en el caño y un gol agónico en Santa Fe para alegrarle la noche a la gente. Tres puntos de oro para arrancar.
Había que ganar como sea, de la manera que saliera y regalarle una alegría a esa multitud tatengue que otra vez dijo sí un lunes a la noche, con poca plata en los bolsillos y mucho frío en el cemento pintado del 15 de Abril. Esta vez la gente, que una vez más dijo sí, se llevó su premio. Sobre el final, como más se sufre y más se goza.
Era necesario arrancar así. Porque había que borrar (justamente) ese "borrón" de la Copa Argentina, quedando eliminado con un equipo del ascenso que le ganó corriendo al Tate. Porque había que borrar esos regalos en los últimos minutos que lo privaron de entrar a un mata-mata en la Copa de la Liga. Había que ganar, a pesar de las muchas bajas: Vera, Mosqueira, Roldán, Tanda, Gamba (sin contar a Del Blanco y Gerometta). Había que ganar para bancar a los dos debutantes: el sorpresivo Vargas (llegó con edad de cuarta libre de Defensa) y el prometido Simón Rivero de Boca. Y, aunque pocos lo digan, había que ganar desde los jugadores para bancar a un DT que vive bancando a los jugadores. Es más, muchas veces, parece "Kily" más jugador de Unión que entrenador desde lo pasional y por la motivación para sus players.
En una postura impropia y olvidada para lo que es el parejo fútbol moderno, Unión terminó jugando casi 25 minutos con cuatro delanteros juntos en el campo de juego. Fue la gran apuesta del "Kily": querer ganarlo y ganar. Con prepotencia de ataque. Y con un esquema ofensivo en blanco y negro de los años '70.
El grito de Jero Dómina generó justicia, estallido, desahogo y carnaval para la multitud en el 15 de Abril. En un torneo "raro", donde el mercado se abre en la fecha 3, el torneo se corta en la fecha 5, se cierra un mes por la Copa América en Estados Unidos y abre ventana de refuerzos que se extenderá tres meses (increíble: cierra en agosto), el Tate dio firme el primer paso.
Fue toda del DT esta vez: el "Kily" se la jugó, bancó cuatro delanteros, le cascoteó el rancho por todos lados a Banfield y Unión fue el gran "Dómina"-dor en el 15 de Abril. Esta vez sí, la gente se llevó el premio a su casa.