(Enviado Especial a Rosario)
Ganaba merecidamente y sin jugar bien, pero no lo liquidó. Se lo empataron en el final y se desató la lluvia torrencial en la definición por penales. Como en el clásico, necesitó de Mele, otra vez gran figura. Fue 1 a 1 en los 90 minutos y 4 a 3 en la definición por penales. Mele atajó dos y otro pegó en el travesaño.
(Enviado Especial a Rosario)
¿Fue Sportivo Las Parejas más de lo que el propio Unión pensaba o fue Unión menos de lo que se esperaba?. Es la gran pregunta que se instaló cuando finalizó el primer tiempo. Porque a no ser por un arranque en el que marcó algunas diferencias de velocidad que fueron rápidamente emparejadas, Unión no pudo hacer notar la mayor jerarquía. Raggio planteó bien el partido, porque le cedió la iniciativa a Unión. Y Unión es un equipo que se siente más cómodo cuando el rival tiene más la pelota, lo deja venir y lo ataca con espacios, que cuando dispone del terreno y la pelota. Le pasó en el primer tiempo del partido con Atlético Tucumán, ¿recuerdan?. Con una diferencia: aquella vez, el equipo de Azconzábal no lo atacó nunca. Y esta vez, el de Raggio le ocasionó problemas. No se marcó bien atrás, como tampoco hubo contención en el medio. Las ausencias de Nardoni y Portillo se hicieron demasiado evidentes. Roldán tuvo un primer tiempo flojo y junto a Jaurena no tuvieron contención ni tampoco aportaron fútbol.
El negocio de Unión, como casi siempre, estaba por los costados. Gastón González arrancó bien y Esquivel lo apoyaba por izquierda, pero entre Vaschetto y Lucas Calderón se encargaron de cerrar y tapar ese lateral. Mientras tanto, se jugó poco por derecha. La dupla Machuca-Vera incidió poco, porque generalmente se inclinó el juego por el otro costado.
Lencina, el arquero de Sportivo Las Parejas fue una de las figuras. Le sacó un remate a Machuca y otro a Ramos. También le tapó un mano a mano a Gastón González después de un pase “bochinesco” de Polenta. Pero Sportivo Las Parejas tuvo varias que le dieron los mismos merecimientos que Unión, sobre todo luego de ese remate de Lucas Calderón en el final de la primera parte, que se estrelló en el poste derecho de Mele, en el arco en el que, luego, el arquero tatengue iba a completar el segundo capítulo de esta semana para el recuerdo, con el gran partido que jugó en el clásico y la importancia que adquirió en la definición por penales.
Unión derrotó a Sportivo Las Parejas por la Copa Argentina
El gol de penal que convirtió Ramos abrió el camino para que la tarde-noche no fuese tan traumática. Iban apenas 6 minutos. Y desde allí, Unión manejó el partido. Le faltó algo esencial: definición, contundencia. En síntesis, le faltó gol. No lo liquidó y lo dejó con chances a Sportivo Las Parejas, que tuvo en los jugadores que Raggio metió en el segundo tiempo, esa cuota de peligrosidad y hasta jerarquía (con Sperdutti y Boschetti, sobre todo) que puso en vilo el resultado del partido.
Gastón González desbordó varias veces por izquierda, Vera también lo hacía por derecha pero por el medio no se terminaban las jugadas. Un mano a mano de Gastón González luego de una buena combinación entre Machuc a y Ramos, fue tapado por Lencina en lo que fue un último aporte de una de las grandes figuras que tuvo el partido. Y no sólo se desperdició esa, sino una del Pajarito Juárez de cabeza, que pegó en el travesaño, más otras insinuaciones de peligro que no se concretaban. Pero había algo a favor de Unión: más espacios para atacar. Y eso lo favorecía en los planes previos, porque en la realidad no fue así porque falló a la hora de la definición.
Pero el fútbol es así. Lo que se perdona o se pierde en el arco rival, se sufre en el propio. Y en el final del partido llegó el gol del empate de Sportivo Las Parejas, casi al mismo tiempo que el diluvio que cayó sobre el Parque Independencia. Una pena y un riesgo. Unión asumió una situación absolutamente innecesaria, inútil, injusta y peligrosa. Al partido lo debió ganar e inclusive sin sufrir. Pero a este equipo le cuesta convertir goles, todavía no “pega” la materia de la contundencia. Y ahí quedó, a merced de una definición por penales en la que se aglutinan un montón de factores extraños. Y donde los merecimientos futbolísticos a lo largo de los 90 minutos, caen en saco roto.
La lluvia esta vez fue bendita para Unión. Sobre todo para este arquero uruguayo que impacta con sus actuaciones y empieza a meterse a la gente de Unión en el bolsillo. El “u-ru-gua-yo”, atronó bajo la lluvia torrencial en el Parque Independencia. No era necesario llegar a esa instancia, no era necesario el sufrimiento y la lotería de los penales. Sportivo Las Parejas mostró su dignidad, pero se aprovechó de las dudas de Unión. Más que de las dudas, de las propias complicaciones de Unión.
Munúa elogió a Sportivo Las Parejas
“No teníamos muchas referencias del rival, estos partidos no dejan de ser un aprendizaje, obviamente que analizaremos las cosas que no hicimos bien, pero quiero destacar lo bueno que hizo el rival. Fue muy digno lo de Sportivo Las Parejas”, dijo el entrenador de Unión, Gustavo Munúa, quien al término del partido dialogó durante varios minutos con los integrantes de la secretaría técnica.
“Se viene una linda serie de partidos, con muchos viajes y poco descanso”, señaló el entrenador rojiblanco.
Los jugadores que vienen de lesiones todavía no están en las mejores condiciones, caso Roldán, Vera y Machuca. A propósito, Cañete estuvo presente en el estadio y se cree que a fines de abril estaría en condiciones de ser tenido en cuenta por Munúa.