El Litoral / Juan Raúl Moncada
El Tate derrotó 2 a 0 a Juventud Unida y clasificó a los 16avos de la Copa Argentina.
El Litoral / Juan Raúl Moncada
(jmoncada@ellitoral.com)
El Tate le tiró la chapa encima a Juventud Unidad y se quedó con la victoria ante un rival de menor categoría, pero que en definitiva hizo un más que digno partido, el equipo de Leonardo Madelón golpeó en los momentos justos y luego se encargó de administrar la pelota y hacer “correr el reloj” para conquistar el pase a la siguiente fase de esta Copa.
Tranquilo
El partido fue bastante parejo hasta que Unión llegó al gol por intermedio del penal que convirtió en gol Rodrigo Gómez, de ahí en más llegaron los mejores minutos de Unión que dispuso de varias chances como para poder estirar las ventajas, tuvo una clara Nelson Acevedo con una jugada personal y luego le quedó servida a Franco Fragapane que definió de cabeza, pero el arquero terminó tapando con el pecho.
Yeimar…
El trámite no daba cuentas de la diferencia de categorías entre uno y otro, hasta que un buen avance del equipo entrerriano por el sector derecho terminó en un centro de Juan Sánchez a media altura, donde Gómez Andrade en su afán por rechazar terminó “pifiando” en forma grosera y la pelota de milagro, fue alcanzada a tocar por Nereo Fernández, desviando la misma que rebotó en el palo y se fue al corner.
Un rato mas tarde Unión tuvo una clara desde un tiro libre donde apareció solo Jonnathan Bottinelli para convertir, pero el defensor tatengue estaba fuera de juego y a expensas del línea el gol fue correctamente anulado.
Penal
Llegando a los 17 minutos Franco Soldano recibió en tres cuarto de cancha y avanzó unos metros para habilitar a Mauro Pittón que llegó por izquierda, cuando el volante metió el centro la pelota rebotó en el brazo de un defensor y el árbitro no dudo en sancionar la pena máxima. El “Droopy” Gómez se hizo cargo del penal y con un potente derechazo cruzado y abajo marcó el primero.
El gol le vino muy bien al Tate, que de ahí en más pasó por los mejores momentos del partido, ya que creció el trabajo del “Droopy” y también el de Nelson Acevedo, y fue precisamente este último que protagonizó una bonita jugada, combinó con Soldano y fue a buscar para encarar al arquero Crusat, el volante la tiró por encima del arquero, pero la pelota rebotó en el travesaño y en el rebote un defensor la hizo rebotar nuevamente en el horizontal, pudiendo controlar nuevamente el arquero.
Sobre el cierre de la etapa llegó un avance de Diego Zabala por derecha, donde el uruguayo metió un centro que picó y tras ser pifiado por un defensor, la pelota le quedó a Franco Fragapane, quien se agachó para cabecear, pero una vez más terminó ganando el arquero al cubrir el remate con el pecho.
Por su parte el equipo de Osela tuvo varios avances prometedores, pero todos se terminaron diluyendo cuando llegaron al área defendida por Unión, por lo que el resultado parcial del primer tiempo le hizo justicia a lo que sucedió en la cancha.
El complemento
Los primeros 15 minutos fueron propiedad del equipo de Osela, un poco porque estaba en la necesidad de buscar el empate y otro porque Unión entró por “demás de tranquilo” a completar este segundo tiempo. De todas formas el equipo de Gualeguaychú careció de “punch” y si bien “merodeó” el arco de Nereo, en ningún momento estuvo como para poder empatar el partido.
De a poco Unión fue recuperando el control del juego, nuevamente creció el trabajo de los volantes y llegaron las oportunidades, lo tuvo Diego Zabala dentro del área y ganó el arquero, luego fue la chance de Soldano y también la de Fragapane pero el segundo no llegaba.
La “testa” de Franco
Llegó un corner desde la derecha ejecutado al vértice del área chica, donde Soldano le ganó a su marca y cabeceó limpio para decretar el segundo y sellar el resultado, porque este gol desarmó por completo al equipo entrerriano que de ahí en más solo se limitó a cerrarse para tratar de no recibir más goles y de ahí en más el partido pasó a jugarse en el medio, con llegadas esporádicas y sin mayor trascendencia.
Unión tuvo algunas jugadas como para estirar la ventaja, pero en una gran actuación el arquero Crusat se convirtió en a gran figura del partido, por su parte Nereo Fernández también sacó un par de pelotas y en definitiva le terminaron sobrando más de 20 minutos a un encuentro que ya estaba totalmente definido.
Madelón realizó los cambios en forma paulatina, ingresando Manuel de Iriondo por Nelson Acevedo, luego el pibe Gallegos por el “Droopy” Gómez y finalmente Bracamonte por Fragapane y llegó el final del partido para desatar la alegría de los hinchas tatengues que en gran número coparon el Presbítero Grella en Paraná.