Unión tiene la revancha "a la vuelta de la esquina"
Este miércoles a las 14.15 recibe a Banfield en la avenida, luego de la catastrófica derrota frente a un River que lo pasó por arriba en el Monumental. La mejoría debe ser generalizada, en lo individual, en lo colectivo y en la planificación desde afuera.
Unión tiene la revancha "a la vuelta de la esquina"
Unión se enfrentó a los dos grandes y cosechó un punto. A Santa Fe llegaron los suplentes de Boca y luego de un arranque errático, el equipo se acomodó, mejoró en el complemento y llegó a un justo empate. El domingo, en el Monumental, la falla fue generalizada y un River dominante y abrumador, le propinó una goleada que hasta pudo ser más catastrófica que el 4 a 0 final.
El fútbol ofrece lecturas variadas y es fácil hablar con el "diario del lunes", pero se caída de maduro que Unión debía hacer un partido casi perfecto para traerse algo de la cancha de River. Superado en todos los aspectos, sin poder sostener la tenencia de la pelota en ningún momento del partido, sin marca para la subida de Angileri -sobre todo- y Montiel por los laterales y con quite nulo en el medio como para impedir que River le toquetee el balón en las inmediaciones del área, los goles fueron sellando un resultado que en ningún momento estuvo en discusión.
Azconzábal, un técnico propenso a las contínuas variantes de hombres y de esquema, no supo o no quiso adaptar al equipo a las exigencias del rival. Y le fue muy mal. Unión sufrió el partido, no tuvo reacción ni rebeldía ante la adversidad. La derrota no admite ningún cuestionamiento, ni siquiera aquéllos detalles de la labor arbitral, como el offside ignorado en el primer gol o el penal no cobrado a Calderón cuando el partido estaba 1 a 0. En otras circunstancias, se podría mencionar -a esos errores- como decisivos en el resultado del partido. Fue tan clara y rotunda la superioridad de River, que ni siquiera vale como atenuante o justificativo de nada.
En este derrotero de tres partidos en seis días, se viene Banfield, un equipo que no pudo con la reserva de Boca (ni siquiera fueron los suplentes). De todos modos, Banfield será un rival difícil. Es un equipo que ya viene con tiempo de trabajo, que estuvo peleando el título de campeón de la Copa Maradona (perdió la final con Boca en San Juan) y Unión deberá reaccionar para que la paliza recibida el domingo en el Monumental se convierta en una simple y superada anécdota. Para ello, influirá no sólo el resultado, sino la actuación del equipo, porque será necesario que la confianza perdida y las dudas que despertaron la producción ante River, se reviertan ante Banfield con un rendimiento que vuelva a su cauce, tanto en lo individual como en lo colectivo.
Lo peor que le puede pasar a un equipo es que pierda la confianza. Estos resultados son desmoralizantes y más allá de que el tiempo de trabajo es muy escaso, lo bueno es que el partido siguiente llega con apenas 72 horas de diferencia por lo que es un tiempo ideal para que el tiempo de caras largas sea el mínimo posible.
Apuntando a lo futbolístico, Azconzábal tendrá que rebobinar sobre ciertas cuestiones. ¿Le sirve más Portillo de volante que de marcador central?, ¿tiene la fórmula para que el equipo consiga solidez defensiva a partir de una buena contención en la mitad de la cancha para que la defensa sufra lo menos posible?, ¿debe ser Cañete el único que se encargue de manejar la pelota para que el equipo tenga fútbol?, ¿es Cordero-García una dupla que le pueda asegurar profundidad y capacidad de gol?.
Más allá de cuestiones que tienen que ver con la jerarquía -que a este equipo le falta en algunos sectores y se notó-, el técnico no puede estar ajeno a la crítica. Los dos partidos los planteó mal desde el arranque, con posturas que no salieron, que confundieron y que fueron totalmente ineficaces ante las características del rival de turno. A las dudas las tiene que empezar a despejar él mismo y brindar una imagen y un mensaje más certero y convincente a sus jugadores.
¿El equipo?
De Boca a River, Unión tuvo una sola modificación y fue el ingreso de Gastón González por Nardoni. Primero, habrá que ver cuál será el esquema que pondrá en cancha el técnico. Resulta difícil aventurarse con un entrenador propenso a los cambios, pero seguramente algún retoque habrá. ¿Habrá una chance para que juegue Márquez desde el arranque?.