El equipo del Kily González derrotó a Tigre 1 a 0 en Victoria y se despidió del campeonato con tres puntos importantes para sumar en el promedio, cuando el objetivo era totalmente distinto. El DT decidió el ingreso de Gamba en el segundo tiempo en lugar de Orsini y el experimentado delantero fue quien le cambió la cara al tatengue.
Si bien Cristian González realizó algunas variantes en Unión para visitar a Tigre en la última fecha de la Copa de la Liga, tampoco se puede decir que sorprendió con el once titular, ya que presentó de entrada lo que venía probando: Cardozo en el arco; Mauro Pittón ocupando el lugar del sancionado Vera; la vuelta de Paz por Torrén a la zaga de tres centrales junto a Pardo y Corvalán, con Bruno Pittón en el carril izquierdo.
En el mediocampo otra de las variantes, en realidad, la entrada de Roldán después de varios partidos para ocupar la posición de Mauro Pittón por derecha, con Mosqueira y Luna Diale completando la línea de mediocampistas. Y arriba los dos tanques, Orsini y Balboa, en una decisión del DT que podría tomarse como para darle un descanso a Gamba o para probar algo diferente.
"¡Vamos a jugar...!" Le gritaba el Kily González a sus dirigidos promediando el primer tiempo, como si hasta él mismo se hubiera cansado de ver un partido tan malo hasta ese momento. Pero no era responsabilidad de Unión solamente que el encuentro sea tan ordinario, Tigre tampoco aportaba nada como para que el nuevo cuerpo técnico de los de Victoria, liderado por Sebastián Domínguez, se mostrara conforme, nada más lejos de la realidad.
El primero que le puso algo de emoción al cotejo fue el zaguero unionista Franco Pardo, que a los 27 minutos, al intentar abrir el juego hacia la derecha de su defensa para habilitar a Mauro Pittón, su entrega fue interceptada por Esquivel, quien encaró en soledad a Thiago Cardozo, pero su control fue un poco largo, y el arquero rojiblanco pudo anticiparlo y quedarse con la pelota.
Y como para emparejar las cosas en un partido que, aunque parezca mentira e imposible imaginar, se caía cada vez más, a los 39 minutos, Nicolás Orsini se disfrazó de Roldán y desde la derecha envió un centro "llovido" (como todo el día en Buenos Aires) que le cayó en la cabeza a Enzo Roldán, que se disfrazó de Orsini entrando solo por el medio y pisando el área chica, pero su cabezazo, muy débil, fue direccionado a las manos de Zenobio, el guardavalla local.
De ahí hasta el final de la primera parte, todo volvió a la normalidad, la que dominó a casi la totalidad de esos primeros 46 minutos, ya que Acita nos regaló, innecesariamente, un minuto de adición.
El partido tuvo varias jugadas con entradas fuertes por parte de ambos equipos. Crédito: Santiago Viana
En el complemento todo se sucedía de igual manera que en la primera etapa. Lo único que cambió fue que la lluvia era cada vez más intensa.
Hasta que llegó la primera sorpresa del encuentro, cuando a los 10 minutos se pudo observar la primera jugada bien elaborada de la noche, el ex Colón Tomás Galván encaró de izquierda a derecha, habilitó a Armoa como puntero derecho y tras controlarla, remató cruzado y su derechazo se fue muy cerca del segundo palo de Cardozo.
Luego de esa acción, el Kily González tomó la mejor decisión, fue la del ingreso de Lucas Gamba por Orsini. Y la entrada del experimentado delantero fue fundamental para el cambio de juego de Unión.
Algo que se vio reflejado a los 21 minutos, cuando tras el centro desde la derecha de Lucas, Balboa la bajó dentro del área mayor y de espaldas al arco "aguantó" a un defensor para que de frente, Mosqueira rematara violentamente con su derecha para luego de rozar en la pierna de un adversario, la pelota, que muy posiblemente se metía junto al caño derecho de Zenobio, terminara incrustándose en el ángulo superior izquierdo del arquero local.
De ahí en más Tigre buscó por todos los medios intentar llegar a la igualdad, pero como dice el dicho: "el que se quema con leche cuando ve una vaca llora", Unión ya tiene la experiencia de dos partidos en los cuales se le fue el triunfo en el último minuto, entonces esta vez lo aguantó muy bien y así pudo sumar tres puntos vitales para el objetivo que se planteó hace un par de fechas, el de engrosar el promedio, un propósito totalmente diferente al que se tenía al empezar el campeonato, pero las cosas se sucedieron de una manera distinta.
Lo que viene ahora es el enfrentamiento del miércoles a las 21.15 por Copa Argentina contra Gimnasia y Esgrima de Mendoza en la cancha de Sarmiento de Junín. Otra meta, la de 32avos de final del certamen que habría que sortear para finalizar esta primera parte del año con un sabor no tan amargo.