Del desánimo y las dudas por el bajísimo nivel ante River y Banfield, a dos partidos que entusiasmaron como el de Lanús y el de San Lorenzo. ¿Cuáles son las razones del cambio?
Hay que tratar de ser equilibrado dentro del desequilibrio que muestra Unión, valga la paradoja. Esas dos derrotas con un rendimiento pobrísimo ante River y Banfield. Superado, desarticulado, confundido. A este partido con San Lorenzo, que fue ni más ni menos que la continuidad de lo bueno que hizo con Lanús, lo separan "años luz" de la producción opaca de los otros partidos. Entonces, la pregunta es: ¿cuál es el verdadero Unión?.
En este planteo, hay parte de responsabilidad del técnico y parte de los jugadores:
* 1) El técnico, porque más allá de que el esquema no varía demasiado (quizás con River se haya visto algo distinto, cuando paró un 4-3-1-2, con Portillo de "5" y Zenón de enganche) y trata de mantener a los cinco defensores y cuatro volantes para recuperar la pelota, convirtiéndolo en un 3--2-5 para atacar por la subida permanente de los laterales, eligió mejor a partir de Lanús y le dio más claridad al mensaje que, por lo visto, no le llegaba del todo bien a los jugadores.
* 2) Los jugadores, porque se ha dado un crecimiento individual que tuvo directa repercusión en lo colectivo, empezando por la dupla de volantes centrales (Pittón-Cañete) que son decisivos en el equilibrio y el fútbol que necesita el equipo.
También entendió el técnico que en la búsqueda de esa claridad en el mensaje, era importante afirmar conceptos y posiciones en la cancha. Un ejemplo es el de Portillo, más allá de que reconocemos que es un jugador que cumple en el lugar que lo pongan. Otro es el de Cañete, al que se lo nota más participativo y preponderante cuando tiene la libertad de jugar más tiempo en el campo rival, por más que su inclinación sea la de buscar la pelota en el propio terreno por una cuestión natural de ser el encargado, junto a Mauro, de iniciar el juego.
Unión no creó una gran cantidad de situaciones de gol ante San Lorenzo (antes del primer gol, tuvo dos bastante claras), pero fue todo lo eficaz y contundente que no había sido anteriormente, sepultando -ojalá que definitivamente- un viejo vicio del equipo de Azconzábal, sobre todo en la Copa de la Liga Profesional, cuando la falta de gol y la ineficacia lo llevaron a quedarse afuera de la fase final por apenas un punto.
Azconzábal nunca resignó la parte ofensiva, siempre buscó atacar. No es la idea, no es el qué sino el cómo. Y también el con qué llegar al gol. O con quién. Porque le dio continuidad a Juan Manuel García -quizás también priorizando o reconociendo su irrenunciable actitud de darle una mano corriendo defensores cuando el equipo perdía la pelota-, porque apostó por Cordero y recién en este partido logró que después de varios meses (desde el partido con Lanús en marzo) aparezcan dos delanteros para convertir (Márquez e Insaurralde).
El tiempo dirá si el verdadero Unión se acerca al de Lanús o al de San Lorenzo, o vuelve a sembrar interrogantes preocupantes como el de Banfield o el de River. O también el del primer tiempo ante Boca, aunque en el segundo tiempo de ese partido justificó plenamente el empate. La realidad es que el desequilibrio de producciones colectivas e individuales fue muy pronunciado, no achacables a una mala tarde que cualquier equipo la puede tener. De Banfield a Lanús hubo cambios concretos y eso se notó. Unión volvió a ser un equipo con variantes, con actitud y más confianza. Lo confirmó el sábado, con la mejor producción de la era Azconzábal y un primer tiempo realmente muy bueno en el que no faltó nada, superando al rival en todos los aspectos del juego (técnico, táctico y físico), lo cuál le permitió por primera vez en mucho tiempo, transitar un segundo tiempo completo con la convicción de que el resultado final -o sea el triunfo- ya estaba "puesto".
A declarar
Este lunes procedieron a ratificar la acusación ante el MPA los socios denunciantes en la causa que se sigue en Unión por supuesta administración infiel. Son ellos Rodrigo Villarreal, Luis Rodríguez Peragallo y Guillermo Sabena. Además, también fueron citados responsables de IGPJ y el contador Raúl Lovaisa, el socio de Unión firmante del informe de la comisión auditora que se expidió sobre la deuda que el club mantiene con el actual presidente Luis Spahn, quien señaló que va a presentarse ante la justicia y que ese informe no necesita ratificación, pues se trata de un informe final.