En el último partido de la temporada 2022/23 de la Liga Nacional de Básquet (LNB), Unión cayó ante Riachuelo de La Rioja por 80 a 78 y se despidió ante su gente con la defensa de la plaza para la próxima temporada con méritos deportivos.
Repitiendo las falencias para cerrar partidos a lo largo de la temporada, el “Tatengue” cayó por 80 a 78 ante Riachuelo de La Rioja.
En el último partido de la temporada 2022/23 de la Liga Nacional de Básquet (LNB), Unión cayó ante Riachuelo de La Rioja por 80 a 78 y se despidió ante su gente con la defensa de la plaza para la próxima temporada con méritos deportivos.
El “Tatengue” ya había asegurado su permanencia tras superar a San Lorenzo el pasado sábado en el Roberto Pando. Dicho triunfo le permitió sacar diferencias con el rival directo y condenarlo a jugar el playout ante Atenas de Córdoba.
A pesar de llegar con el envión, este miércoles por la noche no pudo sacarle provecho e incluso repitió uno de los males que aquejó al equipo durante el año: la imprecisión en el cierre de los partidos.
Unión dominó gran parte del juego, principalmente con un arranque frenético que le dio ventajas desde el primer cuarto (12 puntos) para el desarrollo de casi todo el encuentro.
La acumulación de faltas, la rotación y la falta de efectividad colaboraron para que Riachuelo se mantuviera siempre en juego a pesar de no presentar un juego ordenado ni un referente claro en la ofensiva. Los dirigidos por Sebastián Puñet no lograron retomar la ventaja de 10 puntos.
Con un encuentro parejo hasta el final, el rojiblanco llegó con ventaja de un punto al último minuto y el marcador en 78 a 79.
Allí, se dio una secuencia insólita. Tras la pérdida de balón en ataque por parte de Riachuelo, Unión gestó un contraataque 4 vs 0, que insólitamente finalizó con una volcada fallida del cubano Pedro Bombino y desencadenó el doble de Simpson para la visita.
Luego de una nueva pérdida de la pelota al regreso del minuto pedido por Puñet, los de La Rioja convirtieron un simple y Unión nuevamente tuvo la posesión. De poco sirvió ya que falló los dos lanzamientos de campo que tuvo.
En medio de los reconocimientos a jugadores rojiblancos y en una noche dónde la institución de la avenida presentó en mayor sociedad su bar y diversas disciplinas, Riachuelo logró acceder a la próxima fase de la Liga con este triunfo.
El único representante de la provincia de Santa Fe en la LNB se despide con una leve mejora respecto a la temporada pasada ya que evita la serie de permanencia, pero lejos de los objetivos planteados a principio de temporada.
Pasaron tres entrenadores durante un sólo torneo y se renovó casi la mitad del plantel. Simples reflejos de un año en el que Unión no encontró el rumbo. Se deberá trabajar de cara a la próxima temporada dentro y fuera de la cancha.