Con goles de Cabrera y Márquez, el elenco rojiblanco venció 2 a 1 a Emelec en Guayaquil, dando vuelta el resultado en contra (0-1) del partido de ida en el 15 de Abril. Cabrera, Carabajal y Cañete fueron las figuras de Unión, que buscó la clasificación desde el principio y la encontró en los últimos 15 minutos.
En la previa del partido jugado anoche en el George Capwell de Guayaquil, estadio en el que Emelec de Ecuador y Unión se enfrentaron para dirimir cuál de los dos pasaba a octavos de final de la Copa Sudamericana, se publicó en estas páginas que al equipo del "Vasco" Azconzábal, después de los 180 minutos jugados oficialmente (el de ida contra Emelec y el 0-0 ante Arsenal debutando en la LPF), se pudo observar claramente que lo que le hacía falta al Tate era fútbol.
¿Y qué vislumbrábamos con respecto a la formación que el entrenador unionista podía presentar para dar vuelta la serie? La entrada de Gabriel Carabajal era casi una fija, para que la figura del empate frente a Arsenal pueda "juntarse" con Javier Cabrera y generar lo que Unión estaba necesitando.
Pero además, el DT tatengue arriesgó un poco más. Se "la jugó" con la entrada de Ezequiel Cañete de movida, un jugador que si bien no ha tenido muchas oportunidades, en los amistosos jugados demostró que, aparte de dinámica, movilidad y sacrificio, no es ningún negado con la pelota en los pies, aportando mucho y bien ofensivamente.
No fue casualidad que el "Cangrejo" Cabrera haya marcado (luego de rozar la pelota en un defensor local) el primer gol de Unión, a los 22 minutos del primer tiempo, luego de una buena jugada iniciada por Carabajal por izquierda, pero que terminó con un centro atrás de Corvalán que cayó en los pies de Cabrera para abrir el marcador.
No fue casualidad que a los 42 minutos, Unión casi mete el segundo. Tras la asistencia de Carabajal, Troyansky "abrió" su pie zurdo para definir con un suave toque al segundo palo, pero la pelota rozó en la canillera del arquero Ortiz y luego pegó en el año derecho, tomando el rebote un defensor local para despejar.
No fue casualidad que apenas iniciado el segundo período, Carabajal deje en posición inmejorable a Cañete para que rematara al arco en un "penal largo", lástima que el disparo del ex Boca se fue muy cerca del vertical derecho de Ortiz, que sólo atinó a mirar el desenlace de la jugada.
No fue casualidad que a los 12 minutos del segundo período, Carabajal ceda el balón magistralmente a Cabrera dentro del área pero de espaldas al arco, el "Cangrejo" inteligentemente habilitó a García que venía de frente, y el delantero, sin egoísmo, abrió hacia su derecha para Cañete, quien de derecha a "tres dedos" remató al arco y en la línea un zaguero de Emelec la despejó de cabeza.
Unión ganaba 1-0 y estaba controlando las acciones en defensa gracias a un tibio Emelec, que parecía desorientado frente a un Unión que no se conformaba con empatar el resultado global de la serie. Pero el fútbol tiene ciertos accidentes. Uno de ellos fue el gol del conjunto ecuatoriano, que llegó luego de una gran atajada de Moyano que terminó en los pies de Barceló (quien había marcado el tanto en el 15 de Abril), y su remate de zurda rozó en Blasi para descolocar al portero rojiblanco.
De todos modos, no obstante unos minutos de lógica desorientación por parte de Unión, el objetivo seguía en pie y solamente restaba desnivelar el marcador una vez más. Y llegó a los 74 minutos, mediante un (¿dudoso?) penal sancionado por el chileno Ángelo Hermosilla, del cual de hizo cargo el ahora "experimentado" "Cuqui" Márquez, con un sutil toque de su pie derecho para batir a Ortiz y decretar el 2-1 que le dio a Unión, la clasificación a los octavos de final de la Copa Sudamericana, un paso más tras su primera participación, el año pasado, cuando fue eliminado por otro equipo ecuatoriano, el a la postre campeón del certamen, Independiente del Valle.
Sin dudas, la llave resultó más complicada de lo que se pensaba, sobre todo por el resultado negativo de la semana pasada en la avenida. A eso se debe adosar el preocupante rendimiento del equipo en los dos primeros partidos (Sudamericana y LPF); y no hay que dejar de lado que Emelec no es un "cuco".
Pero también es cierto que hay que tener en cuenta (como atenuantes) que en Unión está trabajando un nuevo cuerpo técnico con una gran cantidad de jugadores "nuevos".
Igualmente, a esta altura no importan demasiado las razones y los fundamentos por los cuales Unión está entre los 16 equipos que definirán la Copa Sudamericana. Lo que tuvo el Tate anoche en el George Capwell de Guayaquil fue la suficiente vitamina "C" que la hacía falta: Cabrera, Carabajal y Cañete (y el orden no es casual).