En la provincia de Santa Fe hay 55 niñas, niños y adolescentes mayores de 10 años que esperan tener una familia. El Gobierno Provincial lanzó una campaña a través de convocatorias públicas para tratar de vincularlos con familias que estén en condiciones de adoptarlos. "Quiero ser parte de tu historia" es el nombre de la misma y en ella se sostiene que la adopción es su derecho a crecer, vivir y desarrollarse en una familia.
La novedad es que para concretar este tipo de adopciones no hace falta estar inscriptos en el Registro Único Provincial de Aspirantes a Guarda con fines Adoptivos (Ruaga). Tampoco hace falta ser una pareja. También puede adoptar una persona mayor de 25 años que esté sola. Las personas interesadas tienen que comunicarse con el organismo provincial a través de este correo electrónico: registros@santafe.gov.ar
Estas niñas, niños y adolescentes mayores de 10 años ya agotaron todas las instancias anteriores a la espera de ser adoptados. Por ese motivo se encuentran hoy en convocatoria pública. Y no pierden la esperanza de conformar una familia.
Azul (16) y Gianfranco (10) son los protagonistas de una de las historias que el Ruaga difundió en los últimos días a través de sus redes sociales. Estos hermanitos fueron adoptados por Lorena y Sebastián, una familia que reside en la ciudad de Esperanza. Así lograron tener una oportunidad para cambiar su destino.
Lorena y Sebastián no habían podido tener hijos biológicos. Entonces comenzaron a pensar en la idea de adoptar. "Como no habíamos podido tener hijos y todo nuestro entorno ya venía con familias, veníamos desfasados con la edad", dice Sebastián. "Esto nos llevó a determinar la edad de los hijos que buscábamos".
Una familia
"Fue así como un día en el Ruaga nos informaron sobre la posibilidad de adoptar adolescentes. Nos sacaron los prejuicios y miedos, hasta que nos decidimos", recuerda Sebastián. Y Lorena agrega: "Los miedos los tenemos todos. Es pensar que no vamos a poder, que ya vienen formados, con su historia, sus hábitos y costumbres. Son miedos y prejuicios que tenemos todos. Hasta que me relajé y me dije 'que fluya'. Porque el miedo paraliza. Así fue como se fue dando todo con naturalidad".
"Otro prejuicio es pensar que por adoptar chicos más grandes te perdés etapas", confiesa Sebastián. "Hoy, viéndolo del otro lado, te aseguro que no te perdés ninguna etapa. No le llevarás una mamadera, pero le llevás la taza de leche a la cama. Y los abrazos y besos están igual. Hasta corrés con la ventaja de poder hablar sobre las cosas que les pasan y que vivieron, y es mucho más fácil".
Sueños cumplidos
Durante el año pasado, el Ruaga acompañó 22 adopciones de niñas, niños y adolescentes mayores de 10 años. 15 de estos casos son niñas y niños de entre 10 y 12 años. Y los 7 restantes, mayores de 13. Chicas y chicos como Azul y Gianfranco. Historias reales.
Los 22 casos concretados el año pasado representan casi el 40 por ciento del total de las adopciones llevadas a cabo en toda la provincia, que fueron 56. El 60 por ciento restante son 34 niñas y niños menores de 10 años. También lograron tener una familia.
La espera
"Hoy lo urgente es dar respuesta a estos más de 50 chicas y chicos que aun esperan una familia", dice Magdalena Galli Fiant, al frente del Ruaga. "Para ello no es necesario que las personas estén inscriptos en el registro", insiste. "Es simple, que escriban al correo (registros@santafe.gov.ar) y les daremos más información".
Con la campaña "Quiero ser parte de tu historia" desde el Ruaga "apelamos a los testimonios de quienes ya transitaron este proceso", dice Galli Fiant. "Los testimonios son todos de familias santafesinas", destaca.
"Cuando me enteré que ellos querían formar una familia conmigo, quedé impactada", confiesa Azul. "Dije sí, porque era mi oportunidad y me hacía muy feliz".