A principios de junio comenzó esta entrañable historia: un comerciante de la ciudad de Santa Fe colocó en la puerta de su negocio (dedicado a la venta de indumentaria) un baúl que rescató de sus abuelos y lo convirtió en un guardarropa solidario.
Está ubicado en un comercio de calle 9 de Julio y su intersección con Lisandro de la Torre. “Lo lleno dos veces por día”, reconoció el comerciante que comenzó con esta movida.
A principios de junio comenzó esta entrañable historia: un comerciante de la ciudad de Santa Fe colocó en la puerta de su negocio (dedicado a la venta de indumentaria) un baúl que rescató de sus abuelos y lo convirtió en un guardarropa solidario.
Con el correr de los días, se corrió la voz, la iniciativa llegó a los medios (incluso a nivel nacional) y desde entonces es incesante el desfile de gente que pasa y retira y también aquellos que dejan una prenda en épocas de jornadas heladas.
Así lo reconoció este miércoles el propio comerciante en diálogo con el Litoral. “Sigo recibiendo y también le insisto a todo el mundo para que me busque ropa así lo podemos mantener lleno todo el invierno. Lo lleno dos veces por días todos los días”, comenzó Maximiliano.
Consultado sobre cómo es la recepción de quienes se llevan alguna prenda, contestó: “Hay historias todos los días, es una cosa extraordinaria que te llena el alma; desde gente que viene y me deja ropa en bolsas de comercios conocidos de Santa Fe con etiquetas (osea recién comprada); gente que pasó a felicitarme por la iniciativa hasta poniéndose a llorar aduciendo emocionarse porque son gestos que ya no se ven”.
Otra anécdota que expone Maximiliano es con “una chica con capacidades diferentes que viene casi todos los días a retirar y me llama para que salga afuera, me abraza me dice te quiero y demás”. “Después la gente que realmente necesita siempre que saca del baúl viene, me agradece y me bendice”, agregó.
Multiplicar, es la tarea...
“Todavía me emocionan ciertas voces...todavía creo en mirar a los ojos”, inmortalizó en los ‘80 Juan Carlos Baglietto con “Tratando de crecer”. Tal vez es lo que sienta a diario Maximiliano al recepcionar a quienes dan y a los que reciben.
“Multiplicar, esa es la tarea”, tararea el cantante rosarino en todos los escenarios que recorre. Algo similar le ocurre a este comerciante santafesino. “La verdad que nunca imaginé que iba a ser para tanto, me pareció algo simple, nunca pensé que pudiera tomar tanta magnitud sea en los medios como en la repercusión que tuvo con las personas, hasta me escribieron una chica y un chico que les encantó mi iniciativa y pusieron un baúl más cada uno en sus comercios”, manifestó.
El local
Como contó El Litoral a principios de junio, el local en cuestión está ubicado en la zona de calles 9 de Julio y Lisandro de la Torre, en pleno centro de la ciudad de Santa Fe y, además de vender la mercadería, a partir de entonces presenta esta iniciativa para quienes más lo necesiten. “Abrí hace un año y también tengo como hobbie arreglar y restaurar muebles; hace un tiempo hice un trabajo sobre un baúl antiguo de mi abuelo y se me ocurrió la idea porque hay gente que la está pasando peor que uno, nos quejamos pero siempre hay alguien en una situación peor”, contó en aquel primer contacto Maximiliano.
El baúl, cuya imagen recorrió el país, reza dos frases que engloban la esencia de la iniciativa. “Mucha gente pequeña en lugares pequeños haciendo cosas pequeñas pueden cambiar al mundo...”. “Si estás pasando frío, llevate un abrigo”.