El Hospital de Niños Orlando Alassia implementó un método ameno para sus pacientes. Los chicos, en lugar de ser llevados en sillas de rueda o camillas, entran al quirófano en un auto eléctrico. La intención es que se reduzca en los niños el estrés pre-operatorio.
“Este auto es un sueño que tuvimos parte del equipo de quirófano. La finalidad es ir hacia la transformación de lo que se llama un ‘quirófano amigable’. Ya hicimos un ploteado con figuritas de superhéroes para que los chicos no sientan el impacto negativo de llegar a cirugía sino que el desprendimiento de sus padres sea placentero y agradable”, comentó Guillermo Ciró, médico cirujano del hospital Alassia, quien detalló que para comprarlo reunieron el dinero entre grupos de amigos de WhatsApp.
El vehículo de juguete, que funciona a control remoto y de forma manual —controlado por los enfermeros en caso de los más chiquitos—, fue destinado al área de cirugía del nosocomio. “Lo que vimos cuando lo estrenamos el lunes fue maravilloso, los chicos se iban saludando a los padres como que entraban a una montaña rusa y en realidad iban al quirófano a operarse”, relató Ciró. Ahora, en los rostros de los pacientes que van rumbo a la sala de cirugía no se observan lágrimas, sino que con una sonrisa disfrutan el camino a bordo del rodado eléctrico.
“Por la repercusión de este primer autito, nos avisaron que hay otros dos disponibles que hay que repararlos. La idea es llevarlos a diferentes sectores del hospital”, señaló el cirujano.
Estos autitos utilizados para que los niños pierdan el temor a enfrentarse a una operación, ya se incorporaron a otros hospitales de niños del país. En Rosario esta idea comenzó a funcionar en febrero en el hospital de niños Zona Norte; también se imitó en el hospital General de Niños Pedro de Elizalde, de Buenos Aires. Mientras que hace un par de semanas, dos autitos a batería funcionan en el hospital materno infantil San Roque de Paraná.
La experiencia en otras partes del mundo
En países como España, Francia, Inglaterra, Estados Unidos e Israel esta modalidad comenzó a utilizarse el año pasado y se comprobó su efectividad al notar que los niños reducían el nivel de ansiedad ante la entrada al quirófano.
Un estudio publicado en agosto de 2018 por la British Journal of Anesthesia, investigadores en China y Estados Unidos compararon el estrés que ocasiona en los pacientes pediátricos llegar a la operación en camilla con otro grupo que lo hizo en autitos.
La investigación reveló que los niños trasladados en los autos “exhibieron niveles mucho más bajos de ansiedad desde el momento en que subieron al auto hasta que ingresaron al quirófano, en comparación con los otros grupos”. El estudio concluyó que el transporte en un auto de juguete puede aliviar la ansiedad pre operatoria en los niños, disminuir el estrés así como subir las defensas y por lo tanto ayuda al éxito de la intervención.