La Municipalidad de Santa Fe convocó, a través del decreto Nº 00085/2024, a la licitación pública para la obra de refuncionalización y mantenimiento integral del alumbrado público de la ciudad de Santa Fe, Zona 1 y Zona 2. La apertura de sobres será el 22 de octubre de 2024 a las 11 horas, en la sala de la Intendencia Municipal.
Dentro de los 20 días hábiles administrativos posteriores al acto de apertura de sobres, la Comisión se expedirá sobre cuál es la propuesta más conveniente, de acuerdo a los requerimientos y posibilidades municipales, en consideración a los precios cotizados, establece el pliego. En la ciudad hay actualmente unas 35 mil luminarias.
Para la Zona 1 (Norte de la ciudad), el presupuesto será de $11.253.391.795,69; en tanto que para la Zona 2 (Sur), el presupuesto está estipulado en $11.433.694.763,68. A la división de zonas la establece el corte de la la Av. Estanislao Zeballos. El área de la Costa estará servida por la Dirección de Alumbrado Público y Electromecánica (DAPE).
Esto hace un total de $22.687.086.558, que saldrán de las arcas municipales durante 60 meses -es decir, cinco años-, período de duración de la relación contractual con quien logre la concesión del servicio. A su vez, la Municipalidad tendrá a su favor una opción de prórroga por un plazo máximo de 24 meses.
Estiman que en más del 45% de todo del ejido urbano de esta capital, el servicio de alumbrado público es “deficiente”, cuando no inexistente. Crédito: Fernando Nicola
La futura adjudicataria deberá, dentro de los diez días hábiles de la firma del contrato, comenzar los trabajos.
Pasaron 27 días luego de que el Concejo de Santa Fe aprobara el mensaje para esta obra y los pliegos de bases y condiciones, luego de una sesión tensa y polémica, donde no faltaron votos en contra ni críticas por el proyecto de “privatización” de un servicio público. Fue aprobado con la mayoría oficialista de los votos más los “independientes”.
Qué dice el pliego
Como informó oportunamente El Litoral, el pliego establece un plan de trabajo que tiene un elemento central. La empresa que resulte adjudicada deberá presentar una programación detallada del cronograma de las labores a ejecutarse para la fase de “mantenimiento inicial preventivo y correctivo” de las instalaciones.
Aquí, se deberá indicar el plazo de dicha puesta a cero, que no podrá superar los 180 días (seis meses), con indicación precisa de la cantidad y competencia del personal afectado, así como la cantidad y calidad de maquinaria a afectar.
El mantenimiento de los sistemas lumínicos a cargo de la futura concesionaria deberá ser “permanente”. Crédito: Manuel Fabatía
Los trabajos incluyen, luego de esa primera fase preventiva, la “reparación, conservación y el mantenimiento de todas las redes propias del parque lumínico, tanto subterráneas como aéreas, a partir de los puntos de toma de energía eléctrica hasta los tableros y desde éstos hasta los finales de línea, además de los conductores de derivación”.
Lo mismo con las luminarias provistas de lámparas de descarga o tecnología LED (cuerpo, refractor o vidrio, reflector, cierre, junta hermética), y con todos los elementos que la componen y sus respectivos sistemas de soportes, cualquiera sea el tipo de éstos (transversales, postes, columnas y accesorios), sus equipos auxiliares, drivers y elementos componentes del sistema de telegestión.
Reposiciones
Las labores incluyen además la reposición de lámparas de descarga y LED “el número de veces que sea necesario”, cualquiera fuese la causa que la motive; la reparación y conservación, limpieza y mantenimiento de todos los tableros de comando con sus elementos componentes (maniobra y protección) y puesta a tierra propia del mismo; y el control del encendido y apagado de los circuitos.
Finalmente, la conservación, mantenimiento, reparación “de cualquier elemento componente de la instalación que resultare dañado por acción de terceros, por causa de accidentes o por cualquier otra causa inherente a la instalación que haga a su correcto funcionamiento, tomando así también medidas antivandálicas”.
Por último, se deberá asegurar la inspección propia, “rutinaria y sistemática” de todas las instalaciones del alumbrado público para su correcto funcionamiento. “La empresa confeccionará un diagrama de recorridos diurnos y/o nocturnos, que permita recorrer la totalidad de los barrios de la ciudad, en un plazo no mayor a siete días corridos”, especifica el pliego de bases y condiciones.