Las ministras de Gobierno, Justicia y DDHH, Celia Arena, y de Igualdad, Género y Diversidad, Florencia Marinaro, junto al secretario de Gestión Cultural, Jorge Pavarín, anunciaron este martes 8 de marzo el envío del proyecto de Ley para la creación del Espacio cultural Museo de las Mujeres Santafesinas en la Casa de Josefa Díaz y Clucellas, ubicada en la esquina de calles La Rioja y San Luis, en una de las últimas encrucijadas de adoquines de la ciudad.
Para hacer efectiva la gesta del nuevo sitio cultural, el gobernador Omar Perotti enviará un mensaje a la Legislatura modificando el objeto del proyecto de Ley planteándolo como un espacio abierto para toda la ciudadanía; un centro de difusión cultural basado en la equidad y respeto a los Derechos Humanos de las Mujeres y las Diversidades.
En la vivienda residió Sor Josefa Díaz y Clucellas (Santa Fe, 13 de abril de 1852 - Villa del Rosario, 24 de septiembre de 1917 -65 años-), quien fue fue considerada la primera pintora con firma del continente latinoamericano -pese a que paradójicamente no firmó muchas de sus obras-.
La antigua casa familiar era modesta, del suburbio, de la periferia de la ciudad. Y junto al resto conformaba un entorno urbano de la época en que la sociedad decidió entrar en la modernidad. Pasaron los años, pasó la modernidad y la arquitectura toda evolucionó. Así, la antigua casa cobró su valor histórico. Pero desde hace décadas, el paso del tiempo la viene degradando y no fue restaurada ni mantenida para su preservación. Ahora asoma una oportunidad para que ello suceda.
En la presentación, la ministra Marinaro destacó la decisión del mandatario provincial en pos de “conmemorar a esta pintora santafesina, la primera, que fue Josefa Díaz y Clucellas y además en conmemoración a todas las mujeres de nuestro territorio, a las inmigrantes, trabajadoras, con una perspectiva de derechos humanos, de diversidad sexual, con una mirada histórica en la construcción de lo que es nuestra provincia y también la sociedad santafesina”.
En la misma línea, Celia Arena ponderó la iniciativa en el marco de “una política de visibilización de las mujeres a lo largo de la historia, específicamente cuando el gobernador nos encomendó diagramar el mensaje para enviar a la Legislatura y cambiar la finalidad, que pase de ser el Museo del Inmigrante, que había sido el origen de todo el proceso de expropiación, a reflejar desde el punto de vista cultural en su aspecto más amplio y más profundo el rol que tuvieron las mismas a través del tiempo”. Por ello, es primordial “unir ese concepto que representa el proceso inmigratorio con esas mujeres trabajando a la par de los hombres, en variadas actividades y con una relevancia muy grande en lo cultural, ya sea con sus labores o en la formación de ese mix que nos fue marcando. Es un orgullo que el gobernador firme y envíe este mensaje dando esta impronta en Santa Fe, una ciudad con mucha historia”.
En tanto, el secretario de Gestión Cultural, Jorge Pavarín, detalló “cómo es el proceso que va a continuar ahora de concreción de la obra. Impulsamos hace un tiempo junto al ministerio de Infraestructura el llamado a licitación para la restauración y puesta en valor del inmueble y ya se encuentra próxima a ser adjudicada".
¿Por qué el cambio de Museo de los Inmigrantes a De las Mujeres?
Quince años después de sancionada en la provincia la Ley Nº 12639, la legislación nacional ha avanzado, propugnando la igualdad entre mujeres y hombres, a partir de una perspectiva de género referida a mecanismos que permiten identificar, cuestionar y valorar la discriminación, la desigualdad.
Considerando que los museos son instituciones al servicio de la sociedad que conservan y difunden el patrimonio material e inmaterial, el ICOM ha planteado que no pueden escindirse de las transformaciones y los cuestionamientos que las sociedades se hagan sobre su pasado.
El tratamiento del género en la museología es todavía una cuestión pendiente y urge plantearla. El enfoque de género debe incorporarse en todos los procesos de la institución museal como herramienta que visibiliza las nuevas construcciones sociales y culturales que caracterizan a la Argentina de hoy.
Cronología de un abandono
En 1998, la vieja casona fue declarada por ley Monumento Histórico Provincial, y en 2002, un decreto municipal la declaró edificio de interés cultural de la ciudad. Ambas normas establecieron que debía ser mantenida por su valor patrimonial.
En 2006, la provincia inició la expropiación del inmueble mediante una ley. La norma había establecido dos pagos a los herederos, pero la operación nunca se concretó. Y la Legislatura debió aprobar una prórroga del pago para que se cumpla con dicha expropiación. Tres años más tarde, en 2009, finalmente la provincia compró la antigua casa por un monto cercano a los $ 600 mil.
Una vez en manos del Estado, la provincia suscribió con el municipio un convenio de uso de la propiedad, y en 2011 se licitaron las obras de restauración y puesta en valor del edificio. Pero las ofertas fueron superiores al presupuesto y la restauración quedó trunca.
Mientras se avanzaba hacia un nuevo proceso licitatorio, la Municipalidad realizó algunas tareas por administración que incluyeron demoliciones de mamposterías y remociones, limpieza e hidrolavado de fachadas y reparación de muros. Los años siguieron pasando y la casa continuaba con su natural deterioro.
En un nuevo capítulo de esta historia, en 2013 todo hacía parecer que llegaría la restauración y puesta en valor definitiva. Pliegos al Concejo y nueva licitación, prevista para febrero de 2014. El nuevo proyecto contemplaba la instalación del Museo del Inmigrante y la concesión de una parte del edificio para la explotación de un emprendimiento privado compatible con ese espacio cultural. Pero la licitación quedó desierta. En paralelo, desde hace tres décadas la Asociación de Amigos de la Casa de Sor Josefa Díaz y Clucellas reclama por la casa.
En mayo de 2018, El Litoral publicó un artículo en el que hizo visible el estado de abandono de la casa. El tema volvió a la agenda pública. Y la Provincia rescindió el comodato con la Municipalidad para volver a tomar posesión del inmueble y restaurarlo.
Pero la restauración nunca llegó. En 2019 se hicieron algunos trabajos de apuntalamiento para evitar desmoronamientos. Luego cambió el gobierno provincial, continuó la crisis, llegó la pandemia y la obra nunca se inició. Mientras tanto la casa fue ocupada por usurpadores que luego fueron retirados del lugar.
Finalmente, este 8 de marzo el gobierno provincial anunció que la vivienda será el Museo de las Mujeres Santafesinas. El gobernador enviará un mensaje a la Legislatura para concretar el proyecto del que hasta el momento se desconocen los detalles.