Martes 15.6.2021
/Última actualización 18:09
Una de las tantas imágenes tristes que está dejando la pandemia, es la de países que cavan fosas a contrarreloj en sectores aislados para que "descansen" sus fallecidos, debido a la falta de espacio en cementerios como consecuencia del incremento de muertos con coronavirus. Si bien esas escenas aún no se vieron en nuestro país, lo que efectivamente sí se ha notado es un cambio en el movimiento habitual de las necrópolis locales.
En menor escala, esto se puede observar en Santo Tomé, donde el crecimiento de ingresos de fallecidos al Cementerio Municipal aumentó en los últimos dos meses en un 50 %, en coincidencia con la virulenta segunda ola de contagios que atravesamos. Hasta el sábado 12 de junio, eran 87 los fallecidos por Covid 19 en la ciudad desde el principio de la pandemia.
Desde la Secretaría de Salud de la Municipalidad, confirmaron a El Litoral que los números muestran que el mayor incremento de muertos enfermos con coronavirus se produjo en la actual instancia sanitaria. "En la primera etapa tuvimos unos 5 casos y después pasaron muchos meses sin fallecidos. Pero ahora el número ha subido en poco tiempo. Son muchos más los internados y los que terminan muriendo, incluso con edades menores. Tenemos casos emblemáticos de personas con menos de 50 años muertos por Covid", indicaron desde la dependencia.
En efecto, esto se refleja en el número general de fallecidos que ingresa al cementerio santotomesino, ubicado en calle Pueyrredón al 1600, enclavado en Vecinal Oeste, en la zona oeste del distrito. Autoridades del lugar confiaron a este medio que la cifra de nuevos residentes saltó de forma sorpresiva durante los meses de abril y mayo, alcanzando subas de alrededores del 50 por ciento. Los responsables se alarmaron porque "hace años que no se veía algo así", y clarificaron el panorama con datos duros. "De aproximadamente 20 muertos que tenemos mensualmente desde hace años, la cifra se fue a 30 y hasta 35 en los últimos dos meses. La nueva diferencia son justamente los fallecidos con coronavirus", precisaron. "En junio, la situación no bajó pero sí se amesetó", completaron.
El LitoralSi bien el Cementerio Municipal tiene su capacidad relativamente colmada, eso no quiere decir que esté saturado como se desprendió de algunos rumores que corren en la comunidad. Lo cierto es que hoy no hay disponibilidad plena de nichos definitivos, aunque sí hay algunos temporales utilizados para esperar a que los otros se desocupen o bien la familia del fallecido encuentre otro espacio para su ser querido. En este orden, la administración del Cementerio trabaja en avanzar en las cremaciones o reducciones. La inhumación en tierra es otra de las opciones.
Mientras tanto, el Municipio local continúa con las tareas de mantenimiento y ampliaciones, las que desde hace años no cesan. "La expansión del Cementerio nunca para, es algo que sucede en todas las ciudades del mundo. No es algo que hacemos ahora porque estemos saturados por un aumento de los muertos a causa del Covid, desmiento totalmente eso", aclaró el secretario de Servicios Públicos, Ricardo Méndez.
El funcionario remarcó que los trabajos tienen que ser permanentes porque "una necrópolis tiene que crecer a la par del incremento de la población". "Dos o tres años atrás construirnos una morgue para tener mayor disponibilidad como depósito. Estamos reparando cubiertas y reponiendo lugares donde había humedad. Arreglamos el sistema eléctrico y ahora estamos levantando una serie de nichos nuevos para ampliar la cantidad ya que hoy, Santo Tomé tiene unos 80 mil habitantes y tenemos que dar respuesta", explicó Méndez. Siendo más específico, el secretario señaló que previamente, se habían hecho dos paños de galerías y ahora se cierra la secuencia para concretar el completamiento. "Había una tira separada de la otra, entonces procedimos a concluir la unidad. Tenemos previsto continuar con otro módulo más", agregó.
El Litoral"Es imposible quedarse sin lugar"
Seguidamente, Ricardo Méndez mencionó la "tira importante" de panteones construida hace dos años, con alrededor de 60 catres que reforzaron la disponibilidad del Cementerio Municipal. En el presente, también se avanza en unos 50 más. "Reitero, no debería sorprender porque son obras normales dentro del Cementerio. Está claro que nunca hay que dejar de construir porque de no hacerlo, sí se puede llegar a quedar sin lugar. Desmentimos que las construcciones actuales tengan algo que ver estrictamente con el crecimiento de fallecidos con Covid", insistió. "Además hay panteones privados libres; se puede inhumar en tierra; los nichos todo el tiempo se van renovando. Es imposible quedarse sin lugar", reiteró para cerrar.