Redacción El Litoral
El artista santafesino está terminando el proceso creativo de un retrato gigante del ídolo argentino, en medio del Mundial.
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Y un día Niño de Cobre pintó a Lionel Messi en Barcelona, España. Ya habían pasado antes otras celebridades, hasta retrató a Mario Benedetti y a Eduardo Galeano en las calles de Montevideo, Uruguay. Pero el mural del mejor jugador del mundo en la ciudad que lo cobija desde hace casi dos décadas ya da que hablar.
Niño de Cobre comenzó esta semana a pintar el rostro gigante de Messi en el Jardín de las Tres Chimeneas, un espacio público del corazón de la ciudad catalana. Hoy tenía previsto terminar el retrato y mañana va a darle el fondo con los colores celeste y blanco.
Los catalanes y turistas que pasan por ese lugar tan transitado de Barcelona se frenan a mirar la obra de arte del santafesino. Le gritan palabras de apoyo, se asombran y toman fotografías. “Es increíble lo que genera esto acá”, se sorprende Andrés Iglesias, más conocido como Niño de Cobre, o Cobre, a secas.
En el Jardín de las Tres Chimeneas, ubicado en el Distrito de Sants-Montjuic, hay un skate park, donde antiguamente funcionaba la central eléctrica de Barcelona. De aquella usina quedaron sólo las tres chimeneas como un símbolo, el resto es todo parque.
Allí se realiza el Urban Funke, un encuentro de cultura urbana en el que se realizan concursos de skate y graffitis, actuaciones de música electrónica y exhibiciones de hip-hop y break dance. “Lo malo es que este mural creo que no va a durar más de dos o tres días hasta que sea intervenido por otros graffiteros”, se lamenta Cobre.
“Es que acá pasa eso todo el tiempo”, continúa, en la charla telefónica con El Litoral desde el mismo lugar donde pinta a Messi, con un aerosol en la otra mano. El retrato de Lio tiene 9 metros de ancho por 3,5 metros de alto. “Acá hay unos pibes que duermen en la plaza y me lo están cuidando, para que al menos lo pueda terminar antes de que me lo intervengan”, cuenta Cobre. “Pero en unos días, seguro desaparece”, se resigna.
El artista santafesino que tiene previsto viajar a Valencia el domingo (para pintar un Picasso) publicó en sus redes sociales el trabajo en proceso, con la ilusión de que le llegue a Messi. “Sería un sueño que lo vea terminado”, dice. “Al menos que lo vean sus seres queridos”, se ilusiona.