Los vecinos del barrio Colastiné Sur celebran hoy la posibilidad de abrir la canilla de sus hogares y poder tomar agua potable de red. Es que la Municipalidad de Santa Fe inauguró el servicio que le cambiará la vida al barrio más antiguo de la ciudad. Y que tiene una rica historia en la costa santafesina. Tan rica ahora como su agua.
La idea de concretar un servicio de agua potable para Colastiné Sur tuvo idas y vueltas durante las últimas décadas. El reclamo por el servicio en el barrio tiene la misma edad que la vecinal. “Cada gestión que pasó lo reclamó”. Así lo recordó este viernes por la mañana la actual presidenta de la vecinal, Marcela Fernández, en sus palabras de agradecimiento por la obra.
Mientras la obra no se concretaba, con el paso de los años los vecinos se seguían abasteciendo a través del servicio de un camión cisterna que recorría las calles de arena y volcaba el agua potable en tanques dispuestos al frente de cada hogar. El aguatero. “La gente siempre nos está esperando y nos lleva muchas horas recorrer todas las casas, desde temprano”, dice Zeballos, uno de los aguateros.
En algunas ocasiones, sobre todo cuando ocurrían temporales y las calles se tornaban intransitables, el camión no pasaba, y los vecinos se quedaban sin el suministro de agua, algo vital. Ahora el aguatero va a seguir pasando para dejarle agua a las casas que todavía no se conectaron a la red. “Les explicamos a cada uno de los vecinos cómo deben conectarse, para evitar pérdidas que afecten el servicio”, dice la secretaria de Gestión Hídrica, Silvina Serra.
La decisión
Fue en ese contexto de postergación y luego de analizar las alternativas posibles para dotar de agua potable a Colastiné Sur que la Municipalidad tomó la decisión de encarar una obra monumental. Y construyó una planta potabilizadora de agua con un tanque de 80 metros cúbicos, más el tendido de la red domiciliaria de 5.200 metros.
La planta se ve al ingreso al barrio. Está ubicada junto a la cabecera del puente que atraviesa el río Colastiné, desde el que se extrae el agua para su tratamiento. Fue construida por la empresa Pilatti, adjudicataria de la obra, con una inversión municipal ajustada por la inflación de casi $ 63 millones.
El río Colastiné es un afluente del Paraná, es de agua dulce y está sano. De ese mismo río se abastecen -aguas arriba- otras dos plantas potabilizadoras más. Una toma abastece a la planta potabilizadora de la ciudad de Santa Fe, en barrio Candioti Sur, y la otra, a San José del Rincón, en esa ciudad costera.
Mirá tambiénPruebas técnicas para dotar de agua potable a Colastiné SurAlgo tan simple -para algunos- como abrir la canilla y servirse un vaso de agua para tomar, era hasta hoy para los vecinos de Colastiné Sur un problema. Porque dependían de que haya pasado el camión aguatero. En cambio ahora los 337 domicilios que ya se conectaron a la nueva red pueden abastecerse. Este beneficio alcanza hasta ahora a unos 1.500 vecinos. Pero además la planta tiene capacidad para nuevas conexiones. “Está proyectada para soportar un crecimiento demográfico por los próximos 20 años”, explica Sierra. También cuenta que será el Municipio quien se ocupe de su funcionamiento y mantenimiento.
Desde el Municipio primero habían pensado en realizar una extracción de agua subterránea. “Pero la presencia de hierro y manganeso lo imposibilitó”, recordó Sierra, en diálogo con El Litoral. “Estos dos minerales dotan de un feo aspecto y mal olor al agua”, explicó la funcionaria, “por ello se descartó la primera posibilidad”. Y se avanzó con la obra de la planta potabilizadora.
Mirá tambiénInstalaron el tanque en Colastiné Sur y el agua potable está cada vez más cercaPalabras de agradecimiento fueron las del director de la escuela República de Italia, Reinaldo Alessio, quien, para dimensionar lo que significa esta obra, contó que todos los días viaja desde el centro de Santa Fe hasta Colastiné Sur “durante 15 minutos en auto, en una capital provincial, para llegar al barrio más antiguo de Santa Fe, que es patrimonio histórico cultural y está a orillas del río, y que no tenía agua potable”, dijo. “Hablar del aguatero a los alumnos era como hablarles del Virreinato de 1810; así estábamos en Colastiné Sur. Así que simplemente gracias”.
Un barrio rico en historia
Colastiné Sur está ubicado a orillas del río homónimo, en la zona de la Costa de Santa Fe. Se accede al barrio desde la ruta nacional 168, a la altura del puente que atraviesa el río. El barrio se divide en dos por la ruta. Al sur está la zona de viviendas defendida por un anillo de defensa costera. Al norte, una calle de arena que serpentea la orilla del río y se llama Puerto Obligado, de la que nacen a un lado y al otro las pintorescas viviendas ribereñas, muchas de ellas en palafito. Allí está también el Club de Caza y Pesca, una reconocida institución de la ciudad. Y allí funcionó además el primer puerto de la ciudad, del que sólo quedan algunos rastros que se asomaron al sol en los últimos años, con la bajante histórica del río Paraná.
La nueva red de agua potable abastece al sector sur y a casi la totalidad del norte. Llega unos 100 metros al norte del Club de Caza y Pesca. “Mientras se realizaba la obra se construyeron nuevas viviendas que quedaron afuera del servicio, pero a futuro se puede ampliar para alcanzarlos”, aclara Sierra.
Colastiné Sur celebrará el próximo 31 de diciembre 360 años de vida. Esa fecha, en 1662, el Virrey lo declaró Puerto Preciso y le dio nacimiento. Por ello es el barrio más antiguo de Santa Fe. Parece mentira que haya tenido que pasar tanto tiempo para que los vecinos cuenten con un derecho humano esencial, como es el agua potable. Y el intendente Jatón así lo destacó. “La inflación también golpeó en esta obra”, dijo al cierre de su discurso inaugural, en relación al ajuste de inversión que debieron realizar por más de $7 millones. “Pero el objetivo estaba claro: teníamos que llegar con el servicio. ¿Nos demoramos más de la cuenta? Sí. Pero habían pasado 360 años. Un mes más no era un problema. Y hoy Colastiné Sur tiene agua potable de red”.