Pasado el mediodía de este martes, el servicio de colectivos urbanos de la ciudad de Santa Fe volvió paulatinamente a la normalidad. La ciudad capital se quedó sin servicio de algunas líneas por la mañana debido a la decisión de los choferes de realizar una asamblea sorpresiva en la cabecera de cada empresa. La medida fue decidida por los representantes del gremio, la Unión Tranviaria Automotor (UTA) y comenzó pasadas las 10 horas.
“Hay deudas salariales”, explicó Sebastián Alen, vocero del sindicato de choferes. “El sector empresarial no ofreció ninguna propuesta de pago”, agregó, antes de ingresar a una audiencia que se llevó a cabo en el Ministerio de Trabajo de la Provincia. “Vamos a hablar con los empresarios sobre este problema”.
Hasta el momento “no hay ninguna propuesta de pago que nosotros podamos entregarle a los delegados y que luego sea discutida en las bases (de los trabajadores), para que la puedan analizar”, se quejó Alen durante la mañana. “Esa es la cuestión, la deuda salarial”.
Cabe recordar que el 1 de agosto pasado los empresarios firmaron un acta acuerdo con los choferes de colectivos representados por la UTA para solucionar el problema, “pero pasaron más de 50 días y todavía no nos dan respuesta”, dijo el vocero sindical.
La gente
Así las cosas, miles de usuarios del servicio de transporte por colectivos de la ciudad de Santa Fe se sorprendieron a media mañana sin poder viajar de un lado a otro. Muchos buscaban medios alternativos para llegar a destino.
La medida de fuerza impactó de manera directa en muchos trabajadores y estudiantes de los distintos niveles que salieron de sus hogares a primera hora de la mañana para cumplir con sus obligaciones.
Las líneas de colectivos que dejaron de prestar servicio alrededor de las 10 de la mañana fueron la 1, 3, 5, 8, 10, 11, 18 y C de la ciudad de Santa Fe.
Anticipado
Anoche la UTA emitió un comunicado de prensa en el que había advertido que no habían recibido “ninguna propuesta de pago de parte del sector empresarial”, indica el mismo. “Por lo tanto, hasta no recibir, considerar y aprobar una propuesta empresaria continuaremos profundizando las asambleas, hasta llegar a la retención total de las prestaciones, si es necesario”, advirtieron desde la UTA, que se declararon en estado de alerta y movilización.
El sistema de transporte por colectivos en la ciudad de Santa Fe, al igual que en otras ciudades del país, está sostenido “entre alfileres”. Es que el recorte de subsidios por parte del Gobierno Nacional impactó de forma directa. Los empresarios reclaman el aumento en el costo del boleto y advierten que, de seguir así, la cosa es insostenible. Y los choferes pagan las consecuencias, al no contar con la remuneración correspondiente y, en la mayoría de los casos, acordada. Por su parte, el Municipio realiza permanentes gestiones ante el Gobierno y los empresarios en un intento de soluciones y parches en pos de tratar de mantener el servicio. Sin embargo por momentos ocurren este tipo de protestas que dejan a la ciudad sin servicio de colectivos. Y los que pagan las consecuencias son los usuarios.
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