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Se trata de la primera etapa de un masterplan que contempla la demolición de los deteriorados monoblocks y la edificación de 436 unidades habitacionales.
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En barrio Acería ya comenzó la construcción de 102 viviendas que representan la primera etapa de un total de 436 unidades habitacionales proyectadas. Paralelamente, está en marcha la obra del Alero Sportivo Cultural Acería, ubicado a 100 metros de donde se edifican las nuevas casas.
Se trata de un máster plan que tiene como objetivo revalorizar el barrio con obras de infraestructura que incluyen la demolición de los viejos bloques de departamentos con mayor grado de deterioro.
El secretario de Estado del Hábitat, Diego Leone, recorrió este miércoles el avance de las obras que lleva adelante el gobierno de la provincia, en el marco de la transformación urbana de barrio Acería, para el cual se estima una inversión de 500 millones de pesos y se prevé un plazo de ejecución de tres años.
Espacio público
Leone expresó que “Acería es un barrio emblemático de la ciudad de Santa Fe que tiene serias deficiencias estructurales. Tiene 22 módulos donde habitan 356 familias y la transformación que vamos a llevar a cabo consiste en construir nuevas viviendas para que las familias se puedan reubicar en ese lugar”.
“Este barrio necesitaba equipamiento y espacio público así que, junto con el Ministerio de Innovación y Cultura, vamos a construir aquí también ese espacio emblemático que tiene la provincia, que son los Aleros. En la ciudad capital se van a construir cinco, de los cuales uno va a estar acá porque concebimos al hábitat no solo con las viviendas y la infraestructura necesaria, sino también con espacios públicos de calidad”, destacó.
El secretario de Estado indicó que también se “contempla la ejecución de más unidades habitacionales de las que existen en estos momentos en el barrio” y añadió que “vamos a aprovechar mejor los terrenos mediante un sistema urbanístico diferente, construyendo viviendas unifamiliares de planta alta y planta baja, para aprovechar más los terrenos e incluso, contemplando la construcción de cocheras y de toda la infraestructura y servicios”.
Asimismo, recordó que el proyecto incluye “el pavimento definitivo de calle Cafferata. Por eso hablamos de una transformación que va a llevar sus años, porque esta obra está proyectada con fondos provenientes solo de la provincia‘.
En relación al plazo estimado para la entrega de las viviendas, Leone dijo que es “de un año. Acá estamos construyendo 102 viviendas y toda la infraestructura para las 436 unidades habitacionales. La totalidad del proyecto fue planeada a tres años y esperamos que en agosto del año próximo tengamos a las primeras 100 familias habitando su nueva vivienda”, consignó.
Demolición
Respecto del proceso de demolición de la edificación existente, señaló que “demoler edificios construidos por el Estado provincial representa una situación compleja, pero el gobernador tomó la decisión de hacerlo ya que poner en valor esa edificación era tan costo como construir todo de nuevo. Y como no podemos permitirnos que en un futuro ocurra lo mismo, vamos a realizar una construcción de calidad y con todos los servicios necesarios para la gente”, aseguró.
Finalmente, el secretario recordó que “la inversión estimada del proyecto es de $ 500 millones para la construcción de las 436 viviendas, la infraestructura y el espacio público” pero añadió que la cifra seguramente sufrirá modificaciones debido a los índices inflacionarios que registra la economía nacional.
El proyecto
La iniciativa surge como respuesta al relevamiento realizado en noviembre de 2016 por la Secretaría de Estado del Hábitat, que arrojó como resultado diferentes niveles de deterioro en las unidades habitacionales y la necesidad de reparación integral o demolición de los edificios que presentan deficiencias estructurales.
Con este diagnóstico, se delineó un máster plan para poner en valor al barrio con la construcción de 436 unidades habitacionales, en su mayoría de dos dormitorios, la ejecución de obras de infraestructura en el predio, la recuperación de espacios públicos y la puesta en valor de los existentes.
El proyecto se lleva a cabo en las tradicionales manzanas donde están los monoblocks que ya empezaron a demolerse, luego de reubicar a los habitantes que esperan la finalización de las nuevas casas. Este sector está delimitado por las calles Matheu, Cafferata, Azcuénaga, Edmundo Rosas y Viñas, y suma cuatro manzanas contiguas al barrio, comprendidas entre Azcuénaga, Edmundo Rosas, Ayacucho, Grandoli y Cafferata.