99 patos crestones fueron víctimas de una cacería ilegal
Cuatro personas a bordo de una camioneta fueron interceptadas in fraganti en un operativo de Gendarmería Nacional en Los Amores. También decomisaron dos patos mecánicos, silbatos y armas con municiones utilizadas para la caza. Intervino Ambiente y labró actas de infracción.
99 patos crestones fueron víctimas de una cacería ilegal
En un operativo realizado por Gendarmería Nacional Argentina, en colaboración con la Dirección General de Manejo Sustentable de Fauna del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático, se logró decomisar un total de 99 patos crestones (lophonetta specularioides) así como también el secuestro de 2 patos mecánicos y 2 silbatos llamadores.
El crestón es un pato distintivo, bastante grande, que es común en humedales, lagos, ciénagas, ríos lentos y a lo largo de las costas. Los sexos se parecen: mayormente de color marrón grisáceo con un moteado pálido contrastante en los lados del cuerpo, una cara más oscura y una cresta corta y tupida (a menudo difícil de ver); pico y patas gris oscuro. En vuelo, se observa el gran panel blanco en el borde posterior del ala.
El pato crestón. José Vittori.
Operativo
El procedimiento se llevó a cabo en las cercanías de la localidad Los Amores, cuando Gendarmería realizaba un control vehicular. Allí, detuvieron una camioneta que transportaba a cuatro personas y en la parte trasera del vehículo se hallaron los 99 patos crestones sin vida. Además, las autoridades se percataron de la existencia de 2 patos mecánicos utilizados como señuelo y 2 silbatos llamadores. Adicionalmente, se descubrió que los individuos poseían armas de fuego y cartuchos de plomo, lo cual constituye una infracción a la Ley 4830 por lo cual se labró acta de infracción correspondiente.
Prohibido cazar patos
Tras el hecho, el Ministerio de Ambiente recordó que la cacería de patos está absolutamente prohibida en toda la provincia. Cazar en zonas de bañados y con munición de plomo está totalmente prohibido.
El plomo contenido en el ambiente acuático se acumula en los cuerpos de agua y en los animales que lo habitan, lo que podría ser perjudicial para aquellos que los consuman. Por ello, “es fundamental cuidar nuestra fauna y la salud de los habitantes de la zona”, indican desde Ambiente.
El uso de señuelos y elementos llamadores tampoco está permitido. Realizar la actividad sin la licencia correspondiente y en zonas no habilitadas es motivo de infracción a la normativa provincial.
Denuncias
La extracción desmedida de patos debido a la cacería puede causar desequilibrios en nuestros ecosistemas. “Cuidemos entre todos nuestra fauna silvestre y denunciemos la caza ilegal al teléfono 911”, solicitan desde el organismo provincial, para “ser parte de la protección de nuestros recursos naturales”.