Lunes 3.7.2023
/Última actualización 22:27
El hombre clavó la pala en el medio del monte y al sacarla notó que tenía restos de cal. Era la mañana del 4 de junio de 2010. Sorprendido, Pablo Mielnik, un trabajador contratado por la Municipalidad de Laguna Paiva, volvió a clavar la pala en el mismo lugar y sintió un crujido. Era un hueso humano. Así fue como se encontró el lugar en el que al menos 8 personas habían sido exterminadas y enterradas de forma clandestina durante la última dictadura cívico militar, en las afueras de Santa Fe.
A poco menos de una hora en auto desde el centro de la ciudad de Santa Fe se llega al Campo Militar San Pedro. Se trata de un centro de enterramiento clandestino de detenidos desaparecidos que funcionó en la zona durante la última dictadura cívico militar argentina. Al lugar se llega desde la Capital primero por la ruta 2 y luego por la ruta 82s. Tiene más de 2 mil hectáreas y está ubicado en la zona rural de la localidad de Campo Andino, a 12 km. de Laguna Paiva, y a 18 km. del centro de Santa Fe. Está lleno de pastizales, lagunas y mucho monte con pájaros y distintas especies de fauna silvestre. Debajo de esa naturaleza llena de vida hay muerte. Muerte y espanto.
El Campo San Pedro sigue perteneciendo hoy al Comando de Artillería 121 del Ejercito. Está en manos del Estado Nacional. En 2012 fue declarado Sitio de Memoria santafesino, como lo es el antaño centro clandestino de detención Ex Comisaría Cuarta. Un espacio para no olvidar la peor página de la historia argentina.
“Queremos que haya una verdadera investigación con un equipo de antropólogos trabajando de forma permanente”, reclamó Hugo Kofman. Guillermo Di Salvatore.Aprender la memoria
El Centro Cultural Provincial Francisco «Paco» Urondo, dependiente del ministerio de Cultura de la Provincia, realizó este lunes una jornada de memoria y reflexión sobre el Campo San Pedro. La iniciativa fue dirigida a estudiantes de nivel secundario y terciario. La propuesta estuvo coordinada por organizaciones de lucha por los Derechos Humanos de la ciudad y alrededores, como el Foro en Contra de la Impunidad y por la Justicia de Santa Fe, y Familiares de Desaparecidos y Detenidos por razones políticas de Santa Fe.
La actividad consistió en dos funciones gratuitas, con proyección del documental del Campo Militar de exterminio y enterramiento San Pedro y un conversatorio posterior. Las mismas se llevaron a cabo a las 10 hs. y a las 14 hs., en la Sala Mayor.
“Para los chicos de hoy esta historia es un hecho muy lejano”, admite Hugo Kofman, uno de los integrantes de los organismos de Derechos Humanos que participó del intercambio con los alumnos. “Es algo de los libros de historia, de lo que no tuvieron ni la mínima noción -agregó-. Pero han aprendido algo cada año durante los 24 de marzo, día De la Memoria en Argentina. Aprendieron sobre lo que fue el genocidio, la represión y el terrorismo de Estado”.
“Entendemos que la cercanía del Campo San Pedro -que es un centro de exterminio- a la ciudad de Santa Fe es un hecho singular, y es impactante para ellos (los alumnos) saber que estas atrocidades no sólo ocurrieron en Buenos Aires sino también acá y en el resto del país”, dijo Kofman.
En el medio de la charla los alumnos y alumnas hicieron preguntas y se sacaron todas las dudas. Conocieron lo que fueron los vuelos de la muerte, la represión ilegal y los hechos ocurridos en ese sentido en Santa Fe.
“La escuela Normal viene trabajando el tema desde hace años”, dijo la docente Micaela Piccini, a cargo de la Biblioteca escolar. “Es un eje transversal que atraviesa todas las áreas de aprendizaje”, agregó. Además de alumnos y alumnas de la escuela Normal participaron sus pares de la República Argentina, el Almirante Brown, y la Nicolás Avellaneda, entre otros.
Sitio de Memoria
El Campo San Pedro fue originalmente un predio de entrenamiento y maniobras del Ejército Argentino. A partir de trabajos de investigación llevados a cabo por Organismos Gubernamentales y no Gubernamentales de Derechos Humanos y al aporte testimonial de un antiguo encargado civil del campo, de vecinos de la zona y de un ex Personal Civil de Inteligencia del Ejercito, se pudo establecer que este lugar se utilizó como un centro de enterramientos clandestinos durante la ultima Dictadura.
Fue el encargado civil del campo, Carlos Castellano, quien en 2010 aportó los datos de mayor significación para el primer hallazgo. Gracias a este dato, los miembros del Equipo Argentino de Antropología Forense (EAAF) hallaron la primera fosa con 8 cuerpos humanos. Cinco varones y tres mujeres desaparecidas desde septiembre de 1977. Jóvenes militantes del denominado Peronismo Revolucionario de Santa Fe que habían sido secuestrados en Rosario y trasladados con vida a su ciudad natal. Eran buscados con desesperación por sus familiares.
Urondo. El Centro Cultural Provincial fue el espacio en el que se desarrolló el encuentro. Guillermo Di Salvatore.Hasta el momento los peritos forenses lograron restituir las identidades de seis de esos ocho primeros cuerpos hallados en San Pedro: María Esther Ravelo, Gustavo Pon, Carlos Bosso, María Isabel Salinas, Oscar Winkelmann y Miguel Ángel D’Andrea. Quedan por identificar una mujer y un varón. Y quedan por descubrir otras fosas comunes con más cuerpos en el lugar. Hay familias que esperan por sus seres queridos.
La búsqueda continúa
En este momento los miembros del EAAF están realizando una nueva búsqueda de restos de desaparecidos en el Campo San Pedro. “Estuvieron una semana, hicieron un parate y tienen que volver”, mencionó otro de los oradores de la jornada, el militante de Derechos Humanos Marcelo Villar.
“Se van renovando los testimonios de los vecinos de la zona, de peones de los campos, de cazadores. En base a estos relatos intentamos delimitar las áreas de búsqueda. Es un campo muy grande, de más de 2 mil hectáreas, por lo que es muy difícil”, dijo Villar. Hay que recordar además que los asesinatos y enterramientos clandestinos ocurrieron hace ya más de 40 años, por lo que la naturaleza lo invadió todo y modificó el paisaje.
El momento más emotivo de la charla fue el cierre. Milagros Almirón tenía 14 años cuando fue detenida durante la dictadura y padeció vejaciones, siendo además una menor de edad. La mujer tomó el micrófono y les narró aquel horror a los alumnos y alumnas. Les contó sobre la gran cantidad de familiares y amigos desaparecidos. Hasta que la invadió la emoción y todo terminó con aplausos y abrazos.
Todavía queda mucho por hacer en San Pedro. Por más memoria, verdad y justicia.
-¿Cuentan hoy con el apoyo político y económico para realizar las tareas que se necesitan y descubrir el resto de las fosas comunes que se presume hay en el campo de San Pedro?
-Eso es relativo -dijo Kofman-. Queremos que haya una verdadera investigación con un equipo de antropólogos trabajando de forma permanente. Hoy viene un antropólogo cada tanto -se lamentó-. Tenemos el apoyo del gobierno provincial y el lugar está resguardado bajo custodia judicial. Queremos que las cosas se hagan a otro ritmo.