Empresas de colectivos piden unificar criterios en la distribución de subsidios
La Fatap envió una nota al Ministerio de Transporte de Nación. Dice que el actual sistema de reparto tiene una “fuerte impronta política que genera distorsiones” para “costos iguales”. Busca “certidumbre para evitar la paralización de los servicios”. Solicita un refuerzo de aportes y créditos blandos para renovar la flota.
Empresas de colectivos piden unificar criterios en la distribución de subsidios
Mientras en Santa Fe los empresarios aún no han llegado a un acuerdo con el intendente Emilio Jatón sobre la nueva tarifa de colectivos, la Federación Argentina de Transportadores por Automotor de Pasajeros (Fatap) presentó una nota al Ministerio de Transporte de Nación. Quieren que unifique los criterios de distribución de subsidios en todo el país, ante la inequidad que existe en la actualidad. Allí están nucleadas las principales empresas de colectivos que prestan servicio en las ciudades del interior.
El problema que advierten radica en esta premisa: si los costos en su mayoría son iguales para todo el país, sus tarifas son diversas y los aportes al sistema contienen diferentes criterios, se genera en la actualidad situaciones graves de desigualdad.
Es por eso que solicitan una serie de medidas que clarifiquen la ecuación económica que sostiene al servicio, a la vez que la Nación y las provincias otorguen más fondos e instrumenten créditos blandos para renovar la flota de colectivos.
Nuevo método de reparto
En primer lugar proponen que el gobierno nacional asuma la responsabilidad de las asignaciones totales que se destinan al sector, estableciendo uniformidad de criterios con las provincias y municipios, que también hacen sus aportes.
Piden que, a los efectos de un trato igualitario en todas las jurisdicciones, se conforme un método de cálculo de las variaciones de costos, que establezca formas concretas de determinaciones de tarifas y se aplique un sistema único de cuantificación de los parámetros básicos -cantidad de kilómetros, de pasajeros, recaudación recibida, valor promedio de la tarifa, porcentajes de bonificaciones locales de las tarifas- que permitan determinar cuál es la asignación destinada por el Estado Nacional para usuarios de los sistemas del interior y cuál es el aporte provincial y/o municipal a los beneficios sociales de cada jurisdicción.
También solicitan que se establezca el costo por kilómetro nacional uniforme, como base para el financiamiento del sistema de transporte del interior, estableciendo cuáles serán los aportes de la Nación, de las provincias, de los municipios y de los usuarios a través de las tarifas.
Al no haberse aprobado el presupuesto nacional 2022, quedó afuera un importante incremento de recursos para este sector. Es por eso, que en la nota enviada al Ministerio de Transporte, Fatap pide un aporte de $ 12.000 millones a distribuir en el primer trimestre del año, hasta tanto se resuelva el presupuesto final; que se comprometa a las provincias a otorga el 50% de esa suma durante el mismo período, es decir, $ 2.000 millones mensuales; y que se establezcan mecanismos de créditos blandos que les permita renovar la flota de colectivos.
Sobre este último punto detallan que “los años de pandemia han dejado el sistema diezmado en el sostenimiento del mateńal rodante, los recursos no alcanzaron para su reposición, en el medio de una fuerte caída de la oferta de repuestos por la falta de importación, sin stock de insumos básicos de la actividad y con variaciones de precios que superan el 100% de aumento en el año, que distorsionan cualquier posibilidad de gestión de transporte previsibles, determinantes de la ruptura de los contratos de concesión. En ese marco, las tarifas no han sido actualizadas conforme a los procesos vigentes en la mayoría de las concesiones”.
Cifras
En el contexto actual, las variables que ofrecían alguna expectativa de mejora se han desmoronado. La falta de sanción del presupuesto 2022, los dejó sin los mayores recursos que allí se habían previsto; las tarifas no se han actualizado; no se logra recuperar la cantidad de pasajeros transportados previo a la pandemia y las provincias no han mejorado sus aportes. A esto suman que la inflación proyectada por el BCRA es del 55% y que la cantidad de infectados y aislados superan cualquier número esperado.
En el año 2018, el sistema realizaba aproximadamente 67 millones de kilómetros por mes, lo que requería 33 mil trabajadores y un consumo de 25 millones de litros de gasoil por mes y un consumo de insumos y fluidos de aproximadamente de $ 1.100 millones por mes. Esta ecuación era financiada por el Estado Nacional en un 50%; los estados provinciales en un 15 % y los usuarios en un 35%.
En la actualidad ya no es así, generando los desequilibrios actuales. Sin embargo, este escenario “generaba la movilidad necesaria, segura y económica de las ciudades del interior del país”, por la cual instan a las autoridades a implementar soluciones similares “para brindar al interior mejores condiciones de igualdad y apertura de oportunidades en la reconstrucción de la actividad”, sostienen en la nota entregada.