Lunes 6.1.2020
/Última actualización 20:34
La primera impresión de la ciudad que tienen muchos visitantes que llegan en micros es su Terminal de Ómnibus “Manuel Belgrano”. Miles de personas ingresan y egresan de Santa Fe por la estación, muchas caminan por sus alrededores o hacen tiempo para esperar su colectivo hacia un nuevo destino. El entorno del edificio ubicado muy cerca del microcentro y junto a barrio Candioti Sur, lejos de ser un espacio placentero para “matar la espera” muestra flaquezas de mantenimiento y una evidente necesidad de puesta en valor.
Flavio RainaEl amplio espacio verde, conocido como plaza Francia, es uno de los caminos de acceso peatonal a la terminal Manuel Belgrano. Atravesarlo es una travesía llena de obstáculos. Exactamente dos años atrás —en enero de 2018— El Litoral recorrió este pulmón verde de cuatro cuadras de largo, que se extiende a lo largo de calle Las Heras, entre Crespo y Eva Perón, y las situaciones que se reflejan actualmente son casi las mismas.
En el derrotero rumbo a la terminal, las baldosas del sendero peatonal, en varios tramos levantadas y rotas, harán que el peatón trastabille. Los yuyos y las malezas también son difíciles de esquivar y los mosquitos encuentran terreno fértil para su supervivencia.
Flavio RainaEl mobiliario urbano, en comparación a la recorrida en 2018, mejoró sólo en parte, aunque sigue en abandono, ya que algunos bancos fueron reparados pero quedan otros aún sin intervención, que permanecen partidos. El área de juegos infantiles —ubicados en ambas cabeceras del parque— también está olvidado. Varios juegos están faltos de mantenimiento y lo que antes era un “arenero” ahora es un pastizal. Las paredes bajas que circundan el área tienen faltantes de adoquines, con huecos que son un peligro potencial para los más chicos. Además, los visitantes ocasionales utilizan el adoquinado como banco y dejan montañas de basura, sobre todo restos de comida.
Si de día la plaza Francia muestra una cara pálida, de noche su otra cara es oscura, literalmente. La falta de iluminación hace que el lugar sea inseguro y sea un terreno perfecto para que las personas en situación de calle elijan la plaza para pernoctar.
Flavio Raina
Del otro lado
Aquellos que llegan o se van de la estación de colectivos por el lado oeste, es decir desde o hacia el microcentro santafesino, tampoco quedan con una buena impresión de la ciudad. Las veredas de ambas aceras de calle Belgrano están rotas y los yuyos altos están a la vista.
Encontrarse con basura acumulada es una fija. Hace un tiempo, este medio, alertado por vecinos, publicó que la fachada de una casa, ubicada sobre calle Irigoyen Freyre casi en la esquina de Belgrano, empezó a servir de contenedor de todo tipo de residuos. Hoy la situación persiste y el domicilio, al parecer deshabitado, continúa acumulando basura que no es recolectada por el servicio municipal.
Otro problema se sitúa sobre la calle principal de la terminal. Debido a que los colectivos de diferentes empresas se estacionan en ambas aceras en el sector de salida de los coches, algo que no está permitido.
En una entrevista con El Litoral, en el marco de su campaña para ganar la intendencia, Emilio Jatón opinó sobre la necesidad de poner en condiciones la estación de colectivos: “Debe adecuarse a una terminal de capital de provincia. En nuestro compromiso está previsto reformular el proyecto y trabajaremos fuertemente al respecto. Queremos transformarla en una Terminal Multimodal, con obras de mejoras del entorno urbano, y conformar un Ente de Administración en co-gestión entre ciudad y provincia”.
El compromiso por parte de la nueva gestión municipal está hecho. Resta esperar que se cumpla y que el “lavado de cara” de esta carta de presentación sea cuanto antes.