Nicolás Loyarte
Son vecinos de la zona de bañados junto a la playa Los Alisos. Algunos se autoevacuaron en ranchos y permanecen en el lugar.
Nicolás Loyarte
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@nicoloyarte
“De golpe se vino el agua”, resumió Marcelo Vega, un albañil que vive en un rancho al que en las últimas horas le llegó la inundación en la zona de bañados, afuera del anillo de defensa de barrio El Pozo, frente al Parque Tecnológico, y se transformó en uno de los primeros evacuados.
Marcelo debió mudar lo que pudo antes de que le llegue el agua a un rancho que levantó junto a la defensa de la playa Los Alisos, al fondo de barrio El Pozo sobre la laguna Setúbal. Pero el agua sigue avanzando —al mediodía el Paraná estaba en 6,14 metros de altura— y cada vez se aproxima más al lugar a donde trasladó a su mujer y a los otros seis ocupantes, entre los que se encuentran sus hijos.
Sobre la playa, otras cerca de 10 familias de este asentamiento irregular también levantaron sus ranchos para intentar resistir ante la emergencia. Mientras tanto, la Municipalidad habilitó en las últimas horas un refugio para los vecinos de El Pozo en el salón del Movimiento Tierra y Liberación que se ubica en el acceso al barrio junto a la ruta nacional 168.
En el refugio municipal esta mañana ya eran tres las familias evacuadas (once personas: cuatro mayores y tres menores de edad). El resto de los autoevacuados decidió quedarse junto al río y Aguas Santafesinas les habilitó un tanque de agua potable y les acercaron baños químicos.
Donde hasta hace pocos días era la playa de El Pozo hoy es una ranchada llena de animales, muebles, caballos y perros, que pertenecen a los vecinos que fueron corridos por el agua. El movimiento era intenso esta mañana en el lugar. Los vecinos intentaban salvar las pertenencias que todavía no habían podido sacar de los ranchos que ya habían sido inundados: camas, ventiladores, televisores, entre sábanas, vajillas y ropa mojada.