Jueves 19.11.2020
/Última actualización 19:02
Científicos del Conicet lograron confirmar el efecto sobre la carga viral de un tratamiento contra el Covid-19 con un fármaco antiparasitario conocido como ivermectina. La droga que nació para uso veterinario fue elaborada luego para seres humanos y se encuentra aprobada y vende en farmacias. Pese a ello, en Santa Fe hasta el momento el gobierno no la utiliza, debido a la falta de un protocolo aprobado por los entes regulatorios a nivel nacional.
Adrián Lifschitz, que nada tiene que ver con el ex gobernador provincial, es Investigador Principal de Conicet y ha participado en los estudios de la ivermectina contra el Covid-19 en nuestro país. Lo hace desde el Centro de Investigación Veterinaria de Tandil (CIVETAN), donde además es profesor de la Facultad de Veterinaria de la Universidad Nacional del Centro de la Provincia de Buenos Aires (UNCPBA).
En diálogo con El Litoral, el especialista en el tratamiento con la ivermectina en animales detalló los avances científicos que se realizaron en Argentina desde el comienzo de la pandemia para tratar de brindar una solución al problema que generó el Covid-19. Se trata de ensayos con seres humanos contagiados por el virus. "El conocimiento sobre la ivermectina está dado por su uso antiparasitario. Primero fue en animales, hace más de 30 años, y al poco tiempo fue aprobado y comenzó a usarse en personas, para combatir diferentes tipos de parasitosis", comenzó su explicación el científico. "Hoy son millones las personas que realizaron su tratamiento con ivermectina".
Ante la consulta respecto de si se puede afirmar que es efectivo el tratamiento con ivermectina contra el coronavirus, Lifschitz mencionó que "hay investigadores en el resto del mundo que han comprobado un efecto antiviral de la ivermectina contra virus como el del zica y el sida". Y en el mes de abril pasado investigadores australianos publicaron un paper en el que se informó que, de acuerdo a ensayos realizados in vitro, se pudo constatar que el fármaco antiparasitario logró al menos frenar la multiplicación del virus Sars-cov-2. Esta novedad permitió considerar al medicamento como una alternativa posible para aplicar a pacientes contagiados de coronavirus y mitigar el avance de la enfermedad.
"A partir de entonces, nosotros nos conectamos con centros de investigación médica para comenzar a investigar si esos resultados logrados in vitro se podían llegar a dar in vivo, es decir, en las personas -dijo Lifschitz-. Es una investigación que demandaría años, porque habría que comenzar in vitro, luego en ratones de laboratorios y finalmente se aplicaría a las personas, por fases, al igual que las vacunas. Pero atentos a la urgencia que impone la pandemia, se fueron saltando esas etapas", continuó su explicación el científico. Entonces, "hicimos una prueba que se denomina 'de concepto'. La terminamos hace poco más de un mes atrás. Así pudimos comprobar en 45 pacientes que la ivermectina produce un descenso de la carga viral en pacientes afectados. Esa fue nuestra evidencia", dijo el investigador.
A esa conclusión logró arribar el equipo de investigadores avalado por el Ministerio de Ciencia, Tecnología e Innovación. El mismo fue conformado por un consorcio de científicos integrado por el Centro de Investigación Veterinaria de Tandil, la Universidad de Salta y la de Quilmes, el Hospital Garraham, la Fundación Mundo Sano, y el Laboratorio Elea.
"Fue un proceso exitoso por los tiempos que manejamos y por la evidencia obtenida", dijo Lifschitz, "ya que el tratamiento fue eficiente, debido a que hubo una disminución en la carga viral". Aunque aclaró luego que debido a ese corto período de tiempo y la cantidad de pacientes (45) el estudio no tuvo objetivos clínicos".
En paralelo, otros grupos de investigación fueron generando evidencia científica al respecto, tanto en nuestro país como en el resto del mundo. "Toda esa evidencia nos va indicando que la ivermectina tiene un efecto positivo en los pacientes afectados por Covid-19", aseveró el investigador. "Y ese efecto positivo sería más beneficioso cuanto antes se aplique, es decir, en los estadios iniciales de la enfermedad", dijo. Esto se debe a sus mecanismos.
En Buenos Aires, el Dr. Héctor Carvallo también realizó un importante estudio de profilaxis en personal de riesgo, en su equipo de médicos, y a través de un esquema de tratamiento pudo observar un "muy buen resultado, ya que los médicos que utilizaron dicha profilaxis no se contagiaron del virus ", mencionó Lifschitz. Lo mismo se hizo en Corrientes. Es decir que "existe un cúmulo de evidencia científica que demuestra que la ivermectina tiene un efecto positivo en el tratamiento contra el Covid-19".
Gentileza Adrián Lifschitz. Es el investigador del Conicet que lleva adelante en Tandil las investigaciones con ivermectina.Adrián Lifschitz. Es el investigador del Conicet que lleva adelante en Tandil las investigaciones con ivermectina.Foto: Gentileza
-¿Cómo es un tratamiento con ivermectina contra el Covid-19?
-Lo que hoy está aprobado son formulaciones que vienen en comprimidos para administración oral en personas para su uso como antiparasitario. Hay varias marcas comerciales. Y, en general, estos tratamientos antiparasitarios requieren en general que se ingiera una sola dosis, y en otros casos como en la sarna en humanos, semanalmente. En el caso contra el Covid-19 ,de acuerdo a nuestras evidencias se requieren dosis altas y sostenidas en varios días.
-¿En cuánto tiempo tiene efectos en la salud?
-Cuanto más temprano en el progreso de la enfermedad se utilice, su efecto comienza a percibirse durante los primeros tres o cuatro días. En nuestros casos de estudio la administración fue durante cinco días en dosis altas. Por su mecanismo de acción, que dificulta al virus su replicación en el organismo, el hecho de que se tome el fármaco durante varios días produce dicho efecto y además le da tiempo al sistema inmune para que actúe; con lo cual en pocos días se ven los efectos de descenso de la carga viral y el paciente desarrolla la enfermedad en forma más leve.
-¿Es un tratamiento económicamente accesible y de fácil acceso? ¿Hay disponibilidad?
-Así es. Se trata de un fármaco económico que hace años que está fuera de patente, y es de fácil fabricación. De hecho las provincias de Corrientes y Misiones están realizando ensayos. Además, existen disponibles marcas comerciales disponibles en farmacias.
-¿Tiene efectos adversos en las personas?
-Es un tratamiento muy seguro. Como todo compuesto tiene algún efecto adverso descripto pero en proporciones bajas y no graves.
-Si es de fácil acceso y segura, ¿por qué no se indica hoy el tratamiento con ivermectina contra el Covid-19?
-Me cuesta contestar esta pregunta. Desde nuestro lugar como científicos generamos herramientas de conocimiento disponibles para que los entes regulatorios decidan si es factible de protocolizar un tratamiento. Esa no es nuestra función. Entendemos que lo que indica la reglamentación es alcanzar una "Fase 3", con evidencia en muchos pacientes. Ello lleva mucho tiempo y tiene un costo muy alto. Entonces, la discusión es si en un momento de emergencia por la pandemia es necesario o no su uso bajo indicación y control médico.
-¿Es factible un tratamiento con ivermectina y la vacuna a la vez?, cuando esté disponible esta última.
-Pueden ir de la mano, porque se complementan. La discusión no debe ser vacuna ó ivermectina o ibuprofeno, u otro tratamiento. Son usos diferentes. La vacuna funcionará para generar inmunidad, pero pasarán varios meses para tener una buena cobertura en toda la población. Todavía tenemos que resolver esta primera ola y tratar de evitar un fuerte rebrote, como está ocurriendo en otros lugares del mundo. Entonces, cuantas más herramientas tengamos disponibles consideramos que es mejor. Hoy no tenemos ni vacuna ni un tratamiento aprobado como único y efectivo contra el Covid-19.
-¿Por qué no se considera hoy a la ivermectina como tratamiento contra el Covid-19?
-Falta un análisis profundo de parte de los entes regulatorios, de la evidencia generada en Argentina y en el resto del mundo. Son ellos los que deben decidir y expedirse. Si hace falta comenzar una Fase 3, que se haga dicho ensayo clínico masivo. Corrientes ya lo inició con 500 pacientes y los resultados se conocerán en febrero o marzo. La discusión es si el análisis profundo no debe hacerse de inmediato, porque la pandemia es hoy. Nosotros aportamos evidencia y son otros los estamentos que deben tomar la decisión.
-¿Ya se utiliza este tratamiento en otros países?
-En algunas regiones ya se comenzó, como por ejemplo en Perú, Bolivia y el norte de Brasil. En EEUU existe un importante consorcio de médicos que pugnan por que la FDA (Administración de Medicamentos y Alimentos) lo analice. Y existe mucha evidencia en Egipto y la India. En todos esos lugares dio efecto positivo. Pero todavía la Organización Mundial de la Salud (OMS) no lo protocolizó.
-Pese a ello, si un médico hoy quiere recetarlo lo puede hacer y el medicamento está disponible en la farmacia...
-Así es. Y eso es una ventaja, porque hoy es un producto aprobado y disponible en farmacias. Si el médico lo considera de utilidad contra el Covid-19 y el paciente le otorga su consentimiento, entiendo que podría hacerlo. No lo hacen porque no existe un protocolo de los entes regulatorios.
El investigador Adrián Lisfschitz (Conicet) insistió en que sólo sería utilizable bajo prescripción médica y la población no se debe automedicar.
En un comunicado dado a conocer hace un mes atrás, la Sociedad Argentina de Infectología (SADI), fijó una clara postura respecto del tratamiento con ivermectina para covid-19. En el mismo, la organización que nuclea a los infectólogos señala: "Recientemente resultados preliminares (sin publicación ni revisión de pares) de un estudio realizado en Argentina evidenció que la administración de ivermectina al triple de dosis habitual en 45 pacientes habría producido mayor eliminación del virus en secreciones respiratorias, pero sin correlación con mejoría clínica. Sin embargo, se necesitan más estudios con mayor número de individuos para determinar este parámetro y otros asociados a eficacia clínica y seguridad".
"Es importante recordar que la ivermectina no es una droga inocua y aún a dosis terapéuticas puede provocar un número frecuente (>10%) y considerable de efectos secundarios adversos, desde leves a graves", continúa el comunicado. "Siguiendo los lineamientos de ANMAT, la utilización de una medicación en carácter de uso compasivo, solo se encuentra autorizada para pacientes debidamente identificados, lo que excluiría la utilización de la ivermectina en forma masiva como actualmente se pretende".
"Por todo lo anteriormente expresado, y mientras no existan evidencias de mayor calidad, SADI recomienda que no se utilice la ivermectina para el tratamiento y/o profilaxis del SARS-CoV2 al margen de estudios bien diseñados, debidamente registrados, y que sean éticamente aceptables".