Faro de Santa Fe: un punto turístico deteriorado que necesita intervención
Fue inaugurado a mediados de la década de 1990 y es uno de los símbolos de la Costanera. Suciedad, graffitis y mal estado son las características que hoy muestra a quienes lo visitan. En el presupuesto 2021 no están incluidas obras de refacción para este espacio.
“Estamos en el Faro de la Costanera. Al contrario de los que muchos creen, fue inaugurado en 1996. A pesar de que siempre tuvo un rol ornamental, la primera vez que se encendieron las luces, se ajustaron para que sean intermitentes. La idea era guiar a los veleros que volvían de navegar en el norte de la Laguna Setúbal. Es un tradicional punto de encuentro de jóvenes y familias, sobre todo los fines de semana. Además, funciona como lugar de eventos y actividades al aire libre”, así se describe este punto de la ciudad de Santa Fe en las flamantes audioguías que el municipio impulsa como actividad turística en la capital provincial.
Pero la realidad es otra.
Cualquiera que se acerque al lugar podrá notar el evidente deterioro, un olor nauseabundo y la falta de cuidado en todo el entorno de la zona de la Avenida 7 Jefes y la intersección con el bulevar Muttis.
Graffitis por toda la base y de distintos tenores (aerosol, liquid paper, birome), descascaramiento de la estructura, falta de losetas y roturas de todo tipo muestran al faro de la ciudad en su peor estado. Ni siquiera quedó la placa con el escudo de la provincia de Santa Fe.
Faro de Santa Fe: un punto turístico deteriorado que necesita intervención
Un faro a la nada
Tampoco tiene luces. Desaparecieron los reflectores que tenía instalados por fuera y mucho menos se enciende la lámpara de la punta. En esa parte, faltan algunos vidrios y la estructura luce despintada. Osea, un faro que no cumple ni su función ornamental ni su trabajo de guiar a los navegantes en la noche. Una guía a la nada. Todo un mensaje.
Manuel Alberto Fabatía ¿La esquina encendida? La imagen corresponde a octubre de 2020. El faro apagado y su entorno casi a oscuras.
¿La esquina encendida? La imagen corresponde a octubre de 2020. El faro apagado y su entorno casi a oscuras. Foto: Manuel Alberto Fabatía
La gota que rebasa este desgastado vaso es el olor nauseabundo que se siente en cercanías a la torre lumínica. Basura de todo tipo, restos de orina y heces humanas y de animales terminan de opacar este punto (poco) turístico de la ciudad capital.
No solo el faro
El deterioro no es exclusivo del faro. En un radio de 300 metros, también se puede apreciar la falta de cuidado y abandono en la Costanera. A simple vista, faltan losetas y se ven rajaduras en el piso. No muy lejos de la lámpara guía, parte del paredón del paseo se derrumbó y quedó descolocado, lo que se presenta como un peligro para los visitantes.
Unos metros para abajo, en lo que se conoce como el Paseo de los Pescadores, reina la mugre. Residuos de todo tipo y de todos los años se acumulan entre la maleza que ganó el lugar a partir de la poca agua que presenta la Laguna Setúbal.
No es nuevo
Los problemas en el faro son de vieja data. Ya en 2017 El Litoral daba cuenta de la falta de mantenimiento del lugar. Incluso, se describieron inconvenientes en el viejo pilar del puente ferroviario reconvertido en lugar para la pesca.
Parecería ser que esos metros cuadrados de la ciudad quedaron frenados en el tiempo y se van deteriorando a medida que pasan los días.
En un repaso por la historia reciente, se puede decir que en 2014 se repuso el sistema lumínico del faro, luego de varios años a oscuras. “Los trabajos se concentraron en la reparación del sistema eléctrico que, a causa de diversos y reiterados actos de vandalismo, había quedado fuera de servicio”, se explicó desde el municipio de aquel entonces.
Archivo El Litoral En el 2014 se repuso toda la luminaria exterior y la luz del faro propiamente dicha.
En el 2014 se repuso toda la luminaria exterior y la luz del faro propiamente dicha. Foto: Archivo El Litoral
En este sentido, se procedió a la renovación de las lámparas mediante la colocación de nuevas luminarias con tecnología LED, que ofrecen un mayor rendimiento lumínico a la vez que ahorran energía eléctrica. También se colocó un nuevo destellador, que imita la típica intermitencia de los faros ubicados sobre las costas marítimas.
Unos meses más adelante, ya en el verano de 2015, el gobierno local encaró trabajos para dejar en mejores condiciones el paseo de la Costanera, desde el Puente Colgante hasta el faro. “Se hizo un profundo hidrolavado para el retiro de la suciedad y material deteriorado, para luego aplicar pintura de látex para exteriores con el fin de dejar el corredor urbano en óptimas condiciones. La pintura que se aplica es gris cemento, el color original que llevaba en su inauguración, en 1997”, recuerda una nota de El Litoral de febrero de 2015.
Un año más tarde, luego de una importante crecida del Río Paraná, que afectó el nivel de la Laguna Setúbal, la Municipalidad realizó una serie de refacciones en el Paseo de los Pescadores y en la propia Costanera. “Las tareas se llevan a cabo entre el Puente Colgante y el Faro, y desde este punto hacia el norte en el Espigón I y II. Estas obras se llevan a cabo tras la emergencia hídrica que sufrió la ciudad”, detalló El Litoral en octubre de 2016. En esa publicación se explicó que confeccionaron nuevas barandas para la berma de la costanera, y como ocurrió anteriormente se pusieron en condiciones las lajas y mampostería.
Pero la oscuridad al faro y su zona volvió con el correr de los meses, producto del vandalismo y la falta de cuidado del patrimonio público.
Qué opinan los santafesinos
El Litoral se apostó en el lugar y dialogó con quienes habitualmente recorren ese sector de la ciudad. “Un desastre, cada vez está peor. Justo estábamos hablando de eso, de lo descuidado que está todo. Muy roto y la gente que no cuida nada. Se ve sucio”, comentó un vecino.
Otra mujer que hacía actividad física fue consultada por la condición de las veredas y expresó: “Para caminar se hace un poco complicado, faltarían algunos ‘parchesitos’; estaría mejor si limpiarían mejor los sectores de la playa, retirar un poco la vegetación, creo que se disfrutaría un poco más”.
“Hace mucho que no se ven cambios o que haya obreros trabajando. Está como siempre, hace bastante como cinco años que venimos a caminar y siempre está más o menos igual”, fue la opinión de un tercer entrevistado. A otro caminante se le preguntó por la presencia de cestos de basura y contestó: “Tuve que caminar un par de cuadras para tirar un papel”, contó.
No está en los planes
De acuerdo a la información que se desprende del Presupuesto 2021, la Municipalidad de Santa Fe no tiene planeado refaccionar este punto emblemático de la ciudad. Pese a considerarlo un punto turístico, no está dentro de las obras prioritarias de la “ley de leyes” local.
Como lo contó El Litoral, el municipio recibió el aval del Concejo para emitir deuda y poder encarar trabajos en Av. Galicia, dotar de nueva iluminación a diversos barrios (Guadalupe, Fomento 9 de Julio, Roma) y en las cercanías de los hospitales (Cullen, Iturraspe, Sayago, Alassia y Mira y López).
Dentro del plan para el 2021, la Municipalidad se propone llevar agua potable a Colastiné sur, abrir la calle Pedro Díaz Colodrero al 3300 por donde pasa la vía del tren; entre otras obras como la puesta en valor de la ex estación de trenes “Mitre”, ubicada en el sur de la ciudad.
El faro fue inaugurado en 1996 por el entonces gobernador de la provincia, Jorge Obeid, y el intendente de la ciudad de Santa Fe de aquellos tiempos, Horacio Rosatti. Esta novedad para el paseo ribereño se realizó en el marco de obras de defensa y remodelación que la Costanera tuvo a mediados de la década de 1990.