Este jueves, el intendente capitalino Juan Pablo Poletti se reunirá en Buenos Aires con funcionarios del área del Transporte de la Nación, junto a otros primeros mandatarios de otras ciudades del interior del país.
Estará junto a intendentes de otras ciudades del interior del país. El encuentro con funcionarios de Nación sería en el Congreso.
Este jueves, el intendente capitalino Juan Pablo Poletti se reunirá en Buenos Aires con funcionarios del área del Transporte de la Nación, junto a otros primeros mandatarios de otras ciudades del interior del país.
El motivo: se reclamará por subsidios para el sostenimiento del sistema de transporte público de pasajeros por colectivos, tras la eliminación del Fondo Compensador para el interior argentino, excepto para el AMBA.
“(El intendente) viajará sólo, sin sus secretarios más cercanos”, deslizaron altas fuentes municipales consultadas por El Litoral. La reunión sería a las 11, y en el Congreso de la Nación. Aún es duda si estará presente el secretario de Transporte de la Nación, Franco Mogetta. Tampoco trascendió cuántos intendentes estarán presentes: en principio, serían 10 mandatarios jurisdiccionales.
Como es de público conocimiento, la eliminación del Fondo Compensador del transporte generó una alta preocupación respecto del sostenimiento de un servicio esencial para la ciudadanía santafesina. Sin los fondos nacionales, “es imposible sostener el sistema de colectivos”, le había dicho a este medio el secretario de Gobierno, Movilidad y Control, Sebastián Mastropaolo.
El conflicto de la semana pasada, que derivó en tres días consecutivos de paro de los choferes de la UTA Seccional Santa Fe, se destrabó por la transferencia de fondos provinciales a la ciudad, de una deuda de las anteriores gestiones (de Provincia y Municipio).
Asimismo, el Ejecutivo “inyectó” 200 millones de pesos de fondos municipales propios: “Otórguese un aporte para el sostenimiento del Sistema de Transporte Urbano de Pasajeros por Colectivos de $ 200.000.000”, dice la resolución Nº 063 del 9 de febrero pasado, firmada por Poletti.
Esto fue a pedido de tres prestatarias del servicio: Recreo SRL, Autobuses Santa Fe SRL y ERSA Urbano S.A. Se hizo lugar a la solicitud en virtud de adoptar “medidas de asistencia económica con el objetivo de solventar los costos e insumos mínimos de operación del sistema”, puntualmente el gasoil.
Se computaron las cantidades de kilómetros realizados por cada prestataria y, así, esos 200 millones de pesos se distribuyeron de la siguiente manera: para Recreo SRL, 94.692.830 millones de pesos; ERSA Urbano, 71.688.271 millones de pesos, y para Autobuses SRL, 33.618.898 millones de pesos.
Esto es un “paliativo” que, a su vez, es un monto muy oneroso para el Gobierno local, pues esos dineros se imputaron de las arcas municipales.
En un duro comunicado de prensa, los concejales del interbloque oficialista “Unidos para Cambiar Santa Fe, sostuvieron que el presidente Javier Milei “repite las practicas kirchneristas, perjudicando al interior para beneficiar al AMBA”, fustigaron.
Al desaparecer este mecanismo de subsidios (Fondo Compensador) sólo para el interior del país, porque los previstos para el AMBA siguen vigentes, “la tarifa ya no solamente tendrá que absorber los costos operativos (que se dispararon al calor de una inflación del 211% anual) sino también la paritaria que en las próximas semanas firmarán los choferes de la UTA”, cuestionaron los ediles del oficialismo.
“Una vez más, vemos cómo un gobierno que se mostró como lo nuevo, repite cuestionables prácticas políticas, que tienden a fortalecer el centralismo de Buenos Aires en desmedro de un federalismo que refleje la igualdad de los ciudadanos. Esta decisión claramente expresa que, para el gobierno nacional, hay ciudadanos de primera que se merecen tener transporte público, y otros de segunda que no se lo merecen”, dispararon.
En otro comunicado, la Federación Argentina de Transportadores de Automotor de Pasajeros (FATAP), que nuclea a los empresarios del rubro, advirtieron que el sistema de transporte público del interior “se encuentra en una crisis económica y financiera que no admite indefiniciones en ningún aspecto. Es imprescindible generar de modo muy urgente un marco legal y económico previsible, sostenible y duradero”.
“No existe capacidad empresarial para absorber ningún costo operativo adicional, antes bien, se requieren imperiosamente aportes que permitan la recuperación del capital perdido”. Además, “los recursos deben ser generados en el momento en que el usuario consume el servicio, ya que las empresas del sistema han perdido el crédito comercial con sus proveedores, y las obligaciones asumidas a causa de la crisis”.
Se necesita, “de modo inmediato”, un “plan de financiamiento a largo plazo de las obligaciones devengadas, impositivas y de adquisición de capital de trabajo e infraestructura, con cargo de los intereses a los responsables del sistema de transporte”, concluyó la Fatap.