La tranquilidad casi residencial del barrio Colastiné Norte se encuentra por estas semanas alterada por los “amigos de lo ajeno”. Vecinos que viven en ese distrito costero advierten que se van acumulando robos y, particularmente, entraderas a las viviendas particulares.
Incluso se ve mucha gente desconocida, que no es residente de ese barrio, con lo cual infieren que los delincuentes hacen “inteligencia delictiva”.
Claro: como muchos vecinos viven allí pero durante el día vienen a la zona urbana de la capital a trabajar, entran a los patios cuando los moradores no están, y se llevan lo que encuentran: desde los equipos de las piletas (bombas), garrafas, sillones y hasta ropa colgada.
“En la madrugada del domingo 21, a las cuatro de la mañana, ingresaron dos ladrones a una peluquería, creyendo que la dueña y su hija no estaban. El susto fue mayúsculo; pero, por suerte, al ver la presencia de la titular del local, los delincuentes salieron corriendo”, contó a El Litoral una vecina de ese barrio costero, que prefirió no dar su nombre.
Últimos casos
De acuerdo a un rastreo de datos oficiales de la Policía Provincial, El Litoral detectó al menos una decena de casos delictivos “positivos” (es decir, con intervención de efectivos) en las últimas semanas en Colastiné Norte.
Hubo un herido de arma blanca en el tórax (zona posterior izquierdo) en un intento de robo en un local comercial (la víctima fue un joven de 21 años). Y este lunes, personal policial detuvo a una persona de 28 años en la Colectora de la Ruta Nº 1 y calle Guinuanes, a las 2.20 de la madrugada.
Mientras efectivos de la seccional patrullaban el sector, detectaron a un hombre vestido con campera de color negra, pantalón de jeans y gorra de color negra.
Esta persona, “al notar el acercamiento de la unidad policial, emprendió en veloz carrera su marcha. Fue alcanzado, se le realiza el chequeo palpareo y se le extrajo de entre sus prendas un objeto corto punzante tipo cuchillo de cocina envainado con cinta de papel. Sin poder justificar su portación, fue aprehendido y se lo trasladó a sede policial”, indica el reporte policial.
Un último episodio: días atrás, personal de la Comisaría 28va. aprehendió a un joven de 18 años quien había intentado robar utensilios de cocina de un domicilio particular. Fue dentro de una vivienda de calle Guinuanes 5000 de Colastiné Norte, y la alerta se dio por la activación de la alarma domiciliaria.
El propietario del inmueble, de 66 años, estaba en su casa. La policía realizó una revisión exhaustiva por el predio, y constató la ruptura del tejido lateral.
“Esta jurisdicción tiene casi 4 kilómetros y medio por más de dos kilómetros de extensión. Es un sector muy amplio para hacer patrullaje todo el día. Hay muchos lugares de escape”, advirtieron desde la comisión. Crédito: Crédito: Archivo El Litoral / Guillermo Di Salvatore
Los efectivos realizaron una recorrida por las zonas aledañas. En un terreno baldío lindante encontraron a un individuo acostado entre la maleza. Al ser consultado sobre por qué estaba allí, “el hombre respondió con evasivas. Se procedió a una requisa de su persona y pertenencias, y se halló entre sus cosas los cubiertos, vasos y un mate que había robado”, dice el relato policial.
La mirada vecinal
“Lo que sabemos (por comentarios barriales) es que hay personas desconocidas, que no pertenecen al barrio y que están haciendo daño. Entran y salen todo el tiempo; creemos que hacen inteligencia criminal, que están atentos a los movimientos de los frentistas”, comentaron a El Litoral referentes de la Comisión de seguridad de la Vecinal Pro Adelanto Colastiné Norte.
También desde la comisión manifestaron que “hay muchas deficiencias en materia de iluminación, falta de mantenimiento de calles y desmalezamiento, ocupaciones ilegales”, entre los más notorios: “Son cuestiones que propician el delito”. Funcionarios municipales se comprometieron a dar soluciones de luminarias a partir de mayo, aseguraron.
De los archivos. El registro gráfico es de 2014. Esa esquina que señala la foto fue noticia por los robos que acaecían en es entonces por el sector aludido. Crédito: Archivo El Litoral / Flavio Raina
La comisión hizo mención que la Comisaría 28va. (que tiene jurisdicción en Colastine Norte) “trabaja muy bien, pues los oficiales están siempre predispuestos”, a pesar de las cuestiones propias de la zona, sumado a la dimensión geográfica del barrio.
“Esta jurisdicción tiene casi 4 kilómetros y medio por más de dos kilómetros de extensión. Es un sector muy amplio para hacer patrullaje todo el día, y eso lo entendemos. Hay muchos lugares de escape”, advirtieron.
“Lo que pedimos a los vecinos es que siempre llamen al 911 y hagan la denuncia para que quede el registro de incidencia, como también que se dé aviso a la comisaría 28va.”, concluyeron desde la comisión.