En materia social, la ciudad de Santa Fe tiene -como la gran metrópoli que es- los mismos desafíos que atraviesan a todas las ciudades latinoamericanas grandes. Si nos enfocamos en estudiar sectorialmente la problemática social, el primer desafío concreto sigue siendo, como a principios del milenio, la situación de los jóvenes en el mundo del trabajo. Por lo tanto, debería profundizarse una política pública, como se hizo en Santa Fe con las Escuelas de Trabajo, porque están actuando como ámbito de contención y orientación para grupos de jóvenes, sobre todos aquellos que están en condiciones menos favorables respecto de quienes están encaminados en estudios terciarios.
La enseñanza de oficios puede ser una de las alternativas, a la vez que la coordinación con unidades económicas puede permitir la paulatina incorporación de este sector al mundo del trabajo.