A partir de una iniciativa de Guillermo Jeréz aprobada por unanimidad este jueves en el Concejo, se impulsará en la ciudad de Santa Fe la investigación científica de cannabinoides medicinales para garantizar el cuidado de la salud de pacientes que transitan enfermedades crónicas o severas. Además, se creó un registro voluntario de usuarios y cultivadores terapéuticos, en orden a la legislación nacional.
Tenés que leerConcejo: aprobaron una regulación para el acceso seguro al cannabis terapéuticoEn diálogo con El Litoral, Laura Acosta, integrante de Mamás Cannabis Medicinal (MACAME), manifestó que desde el grupo están “súper agradecidas por este proyecto, que ha sido impulsado por los compañeros de APUCAM y por Guillermo Jerez, de la Agrupación Barrio 88, si bien hubo modificaciones pero que llevaron al planteo y a que el marco regular esté y que se instale en nuestra ciudad”. “Y estamos felices por este avances y porque una vez más nuestros representantes se han puesto la camiseta de esta planta, que ha venido a mejorar la calidad de vida de muchos y sigue siendo la protagonistas de esta historia”, añadió.
Según recordó Acosta, “Santa Fe es pionera en el uso de cannabis terapéutico y esto nos pone otra vez a nivel nacional en un lugar muy importante” y esta normativa “nos va a posibilitar tener una base de información, que tiene que ser a través de una regulación, para llevarles a los vecinos desde el municipio, el Concejo y las asesorías canábicas el asesoramiento, el respaldo que tienen que tener a la hora de los usos terapéuticos”
“Esta sanción -prosiguió-, también sugiere que a todos aquellos cultivadores y usuarios de la planta de canabis para distintos tratamientos en patologías también puedan permitirse acreditaciones que van a hacer que la gente pueda estar más tranquila; en tanto, aquellas personas que estén inscriptas en el Registro Nacional de Usuarios de Cannabis también están avalados y el nexo con esta reglamentación lo va a hacer el municipio”.
“Esperamos que se reglamente desde el Ejecutivo para tener un registro de los pacientes para que tengan acceso a las personas con conocimiento que además también involucra a toda la investigación: CONICET, UNL y las farmacéuticas, que deberían tener acceso a la información”, dijo. “A partir de allí, empezar a avanzar con todo lo que tiene que ver con ensayos de aceites y tratamientos y, por qué no, a futuro, crear ese banco de aceite que se proponía en este proyecto presentado por la agrupación de Guillermo Jeréz”, concluyó.