El miércoles no fue un día más para las familias instaladas en los módulos de madera que armó la Municipalidad a la vera de la Ruta 168. Fue, si se quiere, una prueba de fuego. Las 15 familias instaladas allí, que fueron relocalizadas porque sus viviendas de la Vuelta del Paraguayo ya sufrieron en ingreso del agua, atravesaron su primer temporal.
Los módulos que se ven desde la Ruta 168 son transitorios y alojan a familias evacuadas de La Vuelta del Paraguayo.
Según el Centro de Informaciones Meteorológicas de la FICH de la UNL, sobre la capital provincial cayeron 98,25 mm durante toda la jornada. La lluvia generó algunas complicaciones en el lugar, pero que fueron atendidas en el momento por personal municipal por expresa indicación del recientemente asumido intendente, Juan pablo Poletti, y seguían esta mañana.
“En algunos módulos ingresó agua por los techos, porque las chapas tienen como clavaduras y por esos agujeritos ingresaba. Lo mismo por las ventanas que solamente tienen un nylon”, contó Luciana, una de las mujeres que habita en los módulos.
Una de las principales preocupaciones que tienen los vecinos por estas horas, porque además rige un pronóstico del tiempo que no es muy alentador, es que se nota que “la madera de los módulos se está hinchando” y de seguir lloviendo no saben cuánto van a aguantar. Por otro lado, se humedecieron mucho y eso está viéndose en el interior de los mismos.
Frente a las filtraciones de agua adentro de los módulos, las familias recibieron nylons ayer mismo durante el temporal para colocarlos por encima de los techos a los fines de evitar “goteras”.
Presencia municipal de varias áreas
En la recorrida realizada por El Litoral esta mañana, el sector donde se ubicaron los módulos se encontraba concurrido. Puntualmente había personal de Hábitat, de Acción Social, de la GSI y médicos y enfermeros. Todos trabajadores del Gobierno Municipal.
Cabe señalar que las 15 familias de La Vuelta del Paraguayo que fueron relocalizadas temporalmente a la vera de la 168 están recibiendo un bolsón con provisiones que tienen alimentos secos -como yerba, azúcar y lentejas- y pañales. Los reciben desde Acción Social cada 48 horas. Dicho personal está apostado allí durante todo el día, en dos turnos de trabajo.
Por las noches, y también durante todo el día, personal de la Guardia de Seguridad Urbana -GSI- custodia la zona.
Además, desde Hábitat, por su parte, se encargaban de reforzar los módulos con maderas, sobre todo las ventanas. Según pudo saber El Litoral mejorarán a la brevedad las instalaciones eléctricas con la colocación de un disyuntor en cada módulo.
Sobre las acciones vinculadas a la Salud, se vio la presencia de médicos y enfermeros relevando la situación de cada familia a los fines de gestionarles y proporcionarles medicamentos que necesiten. También se observó la entrega de repelentes fabricados en el LIF.
Algunos reclamos
Entre las cuestiones que quedan pendientes en el lugar hasta tanto puedan regresar a sus viviendas en La Vuelta del Paraguayo, los vecinos pidieron módulos para poder ducharse. Es que si bien cuentan con una canilla pública, no se pueden higienizar como corresponde.
“Lo que hacemos es juntar agua en baldes y pasarnos jabón como podemos. No nos queda otra. Así como nos pusieron baños químicos sería bueno contar con estructuras similares para poder bañarnos”; dijo Ramón.
La primera lluvia desde que están instalados allí fue clave para ver el comportamiento de los módulos, sobre todo por la cantidad de agua caída. Puede decirse que la prueba fue superada. La duda está en qué pasará de repetirse temporales así en un escenario donde el Fenómeno del Niño ya se hizo evidente.