Videos registrados este miércoles al mediodía con la cámara de un teléfono celular desde la Costanera santafesina, junto al club Regatas, circula por las redes sociales. Las imágenes muestran a un ambientalista que se arrojó a las aguas del río Santa Fe para intentar rescatar a los peces que se encontraban atrapados en una malla de pesca. La misma atravesaba el río casi de costa a costa, en la desembocadura de la laguna Setúbal, bajo los puentes Nicasio Oroño y el Colgante. Esta acción ocurrió a la vista de todos los que circulaban por el lugar y generó un momento de tensión entre los ambientalistas presentes y los pescadores que tienen una "ranchada" en la orilla del acceso a Alto Verde.
Además del ambientalista que se arrojó al río, se observa en las imágenes la presencia del Guardacostas de la Prefectura Naval Argentina de Santa Fe, que actuó ante lo que estaba ocurriendo. Junto a la embarcación de la Prefectura también se puede divisar a las lanchas de los pescadores que se encontraban "malleando" el río. Dichas mallas son una red con una línea que mediante la utilización de boyas se mantiene a flote y provoca que los peces que nadan por la zona queden atrapados en la misma para la pesca. En las imágenes del video se puede observar gran cantidad de peces, algunos de escaso tamaño.
Río "malleado"
El caso de la malla de pesca que quitaron del río este miércoles los ambientalistas no es un hecho aislado. Por el contrario, en los últimos días fueron varios los pescadores comerciales que arrojaron este tipo de elementos de pesca al menos en todo el curso de la laguna Setúbal y del río Santa Fe, como también aguas abajo, sobre el Coronda. Cabe mencionar que está prohibido atravesar los ríos de costa a costa, como también se debe controlar el tamaño de los orificios de las mallas, para evitar la depredación de especies pequeñas en etapa reproductiva.
"Esta acción que realicé no fue sólo por una cuestión ambiental, sino de seguridad náutica, porque esa malla a pelo de agua era un peligro para cualquier persona: nadadores de aguas abiertas, navegates de SUP, remeros, veleristas y lancheros. Todos", dijo Javier Maillo, el hombre que se arrojó al río a rescatar los peces. Y antes de hacerlo le avisó la Prefectura.
"Además de ser una malla que estaba extendida prácticamente a todo el ancho de la desembocadura de la laguna Setúbal, tenía atrapada gran cantidad de peces muy jóvenes, por fuera de lo reglamentado por la pesca comercial", denunció Maillo ante la consulta de El Litoral. "Si no se ejerce un control sobre las aguas nosotros seguiremos interviniendo", anticipó el ambientalista, quien en oportunidades anteriores también realizó otras acciones, como el rescate de las tortugas de la laguna Juan de Garay, en Santo Tomé y la canalización de una laguna que se formó frente al Espigón II, para que los peces vuelvan al río y no mueran.
"Lo que se está dando es una depredación salvaje, porque utilizaron una malla con orificios muy pequeños", insistió el ambientalista, "pero además ayer (miércoles) se podía ver en todo el río gran cantidad de mallas", advirtió luego. Entonces, "si no se cuida el recurso, va a escasear".
El río Paraná es imponente, es uno de los más importantes del mundo. Su capacidad de reproducción ictícola es casi inagotable. Pero al mismo tiempo es un hecho que la pesca ilegal genera un impacto en la vida de este río. Y los eventos naturales, como la actual sequía, también. Ya que la mortandad de peces que quedan atrapados en lagunas inconexas a los cursos principales es mayor de lo que se pesca.
Conflicto
El ambientalista Maillo se lamentó por la situación de tensión que se generó este miércoles cuando el grupo de pescadores que se acercó a la orilla en la que él se encontraba y lo increpó, al grito de "no te metas".
-¿Teme por algún tipo de represalias de parte de los pescadores, ante su exposición para quitar los peces de las mallas de pesca?
-Ayer se dio una situación bastante preocupante. Me dijeron que me iban a romper la cabeza y otro tipo de cosas. Miedo no tengo. Por ello realizo este tipo de intervenciones. Pero lo hago por la inacción de quienes deben ocuparse. No es lo que debería ocurrir. Soy un ciudadano cansado de no encontrar respuestas y tomo una decisión ante la inacción de quien corresponde.
Controles
La Prefectura oficia como colaboradora a requerimiento del Ministerio de Ambiente y Cambio Climático provincial que, según la regulación del recurso ambiental vigente, es el organismo responsable de controlar la pesca y el cumplimiento de lo que la ley establece.
En ese marco, la Prefectura llevó a cabo durante el año 2021 un total de 20 operativos de control de mallas de pesca, los cuales devinieron en el secuestro de 35 redes, con un total de 3.130 metros. Mientras que en el transcurso de este año realizaron dos operativos en los que se secuestraron tres mallas, con un largo total de 260 metros.
El actual período de bajante histórica del río Paraná lleva más de dos años. En julio del año pasado el gobierno nacional declaró la emergencia hídrica nacional -mediante el Decreto 482/21-, mientras que la provincia dispuso la veda por la Ley N° 12.703, la cual continúa vigente.
Según lo establece dicha ley, la pesca comercial se encuentra prohibida los días lunes y viernes, sumándose a los sábados, domingos y feriados. Por lo que sólo se puede practicar los martes, miércoles y jueves.
Asimismo, la pesca deportiva está habilitada todos los días con devolución obligatoria puesto que bajo tal modalidad, la afectación de la fauna ictícola es mínima. La medida continuará vigente hasta tanto se modifiquen las actuales condiciones hidrológicas y se disponga una medida que la sustituya.