La llamativa aparición de peces muertos en los Diques I y II del Puerto de Santa Fe -también aparecieron a la altura del Yacht Club-, despertó la curiosidad de quienes frecuentan la zona para caminar o realizar compras en ese atractivo paseo. Lo que se ve hoy son “manchones” grises de peces flotando en el agua.
El año pasado, fue noticia una gran mortandad de especies ictícolas en la localidad de San Javier. Las autoridades recomendaban a la gente no ingresar al agua, y no consumir carne de ejemplares muertos o moribundos, ya que los pescados se descomponen rápidamente y podrían representar un grave riesgo para la salud, contaba la crónica de El Litoral de aquel entonces.
Más atrás en el tiempo, en diciembre de 2020, ocurrió algo similar en el río Salado, a la altura de la vecina Santo Tomé. “Solicitamos la presencia de gente del Inali y del Conicet, para que vengan a tomar muestras por el tema, porque nos encontramos con un panorama desolador. Sorprende la magnitud (de la mortandad de peces)”, decía un funcionario municipal. Este caso fue grave (ver más abajo).
Las hipótesis
Con respecto a la aparición de peces muertos en los diques, “hay que decir estamos en un contexto de bajante del río Paraná desde hace varios meses, desde principios de año. Toda la planicie está con menor conectividad hidrológica”, puso en contexto en diálogo con El Litoral Luis Espínola, Dr. en Ciencias Ambientales e investigador del Conicet Santa Fe.
Peces muertos. Así se ve un sector del Dique 1. Crédito: Manuel Fabatía
El bajo nivel hidrométrico viene impactando tanto la laguna Setúbal como el Canal de Derivación y el Riacho Santa Fe. Este jueves, los registros de Prefectura Naval Argentina daban que el río Paraná en la ciudad de Santa Fe medía 1,82 metros. Creció apenas dos centímetros con relación al miércoles.
Entonces, junto con la bajante como factor clave, “hay que tener en cuenta las heladas de las últimas semanas que fueron muy prolongadas. La mortandad de peces se podría llegar a atribuir a esas temperaturas tan bajas. Pero es una posibilidad, no una certeza”, aclaró el experto.
Frío
En invierno pueden ocurrir estas pequeñas muertes masiva de especies ictícolas. “Para saber por qué ocurren las mortandades de peces, no hay que dejar de considerar que éstas tienen que ser estudiadas en el momento y dentro de un análisis eco hidrológico. Esto quiere decir que deben tomarse muestras ambientales, hidrológicas y ecológicas”, apuntó Espínola.
Y añadió que hay múltiples variables actuando en conjunto: “Generalmente una mortandad se da por un conjunto de factores, no por uno solo. Pero en este caso, se le podría llegar a atribuir esta mortandad al frío extremo y prolongado en el tiempo”.
-¿Se descarta cualquier tipo de combustible contaminante como otra eventual causa de esta mortandad? Consultó El Litoral al especialista.
-No lo afirmaría. La aseveración sí podría darse sólo si hace el estudio pertinente al que aludí con anterioridad. Me baso en las últimas condiciones climáticas: en invierno, estas mortandades son bastante comunes.
Nutrientes
-¿Y la falta de nutrientes para los ejemplares en el contexto de bajante?
-No sé si falta de nutrientes, pero sí quizás un exceso de nutrientes que consumen oxígeno podría ser otro factor de incidencia. El exceso de nutrientes orgánicos producen un alto consumo de oxígeno, y eso también puede producir mortandades.
También, los contaminantes orgánicos (el combustible, por ejemplo, es orgánico) que también consumen el oxígeno, podrían también incidir en este fenómeno. Pero para todo esto, como dije, antes habría que hacer un estudio eco hidrológico.
Algunos curiosos que frecuentan el paseo se asoman para ver los peces muertos. Crédito: Manuel Fabatía
Al Estado provincial no le llamó la atención esta mortandad porque, como referí al principio, son frecuentes en invierno, con temperaturas tan bajas. A diferencia de la mortandad que ocurrió en 2020-2021, que fue muy grande.
“En ese entonces -prosiguió el experto-, la Provincia tomó cartas en el asunto, se hicieron investigaciones y se detectó que había contaminantes orgánicos provenientes de pesticidas y otras sustancias. Esto coincidió con lluvias muy intensas y con la época de siembra. Hubo un ‘lavado’ de los productos que usa el campo y entraron al río Salado” concluyó.
N. del R.: Sobre ese último episodio, que fue grave -incluso intervino la Procuración General de la Corte Suprema de Justicia de Santa Fe-, los estudios de laboratorio de ecotoxicología fueron realizados por de la Facultad de Bioquímica y Ciencias Biológicas (FBCB-UNL). También trabajó el Inali.Aquí puede consultarse la crónica.