Faltan apenas unas horas para la Nochebuena y Juan Pablo Poletti no para de trabajar. Es el máximo responsable del hospital central de la ciudad "José M Cullen". En la víspera, el médico que ocupa la dirección de este gigante de la salud pública, atendió una ventanilla de Admisión de Guardia para suplir la labor de un trabajador que estaba de paro. En paralelo, recibía el freezer que envió el Ministerio de Salud para mantener en frío las vacunas contra el Covid que llegarán a la ciudad en los próximos días para aplicarles a los trabajadores del hospital. Y al mismo tiempo resuelve todos los problemas que se suceden en este gran hospital que parece una ciudad, donde hay que tomar decisiones todo el tiempo, y donde hoy están al tope las camas covid, con un 95 por ciento de ocupación.
Luego de un año que nos marcó a todos para siempre, entre una y otra situación que va resolviendo minuto a minuto, Poletti se toma un respiro para conversar con El Litoral, y recuerda entonces la carta abierta que le escribió en marzo al personal del hospital, cuando comenzó la pandemia, en la que les dijo a sus compañeros "te necesito".
-¿Qué mensaje tiene en esta Navidad para sus compañeros del hospital?
-Así como en marzo escribí una carta a los trabajadores del hospital que titulé "Te necesito", creo que es el momento más indicado para cambiar el título y ponerle "Gracias". El "te necesito" ya quedó un poco superado ante la gran respuesta que hubo. Creo que lo han demostrado en la ciudad de Santa Fe, donde han estado a la altura de las circunstancias atendiendo el Covid, tanto en el sector público como en el privado, los funcionarios, empresarios, en los hospitales públicos, y esto ha demostrado que cuando se les pidió porque se los necesitaba allí estuvieron. Por eso, le cambiaría el titulo y ahora solo diría "Gracias". Creo que no hay mucho más por decir. Hay que decir un gracias enorme a cada uno de los empleados del Hospital Cullen, pero lo podría hacer extensivo a cualquier agente de salud de la provincia.
- ¿Y cuál es el mensaje para el resto de la población?
-A la gente en general le digo que si nos dieron algunas libertades para hacer reuniones familiares debemos respetar el número de personas, el distanciamiento, no compartir el vaso, respetar lo que nos dicen que no hagamos y es clandestino. Porque realmente el Covid no pasó. No hay que tenerle miedo pero sí hay que tenerle respeto y seguir respetando las normas, porque sino vamos a seguir teniendo un segundo pico adelantado y eso va a impedir que el equipo de salud descanse aunque sea 5 o 10 días de vacaciones, que las necesitamos.
-¿Puede resumir el año en una fotografía?
-Creo que no es una imagen mía, sino de toda la población: el barbijo. Hoy no podemos reconocer quien esta triste, quien sonríe, quien se alegra. De casualidad podemos ver si alguien llora. Creo que el barbijo, la máscara, me impide reconocer a la gente que yo veo todos los días acá en el hospital. Creo que esa es la imagen que debemos recuperar en el 2021: el rosto, la sonrisa, poder saludarnos, poder abrazarnos, es -por lo menos- lo que más se extraña.
"...la vorágine nos lleva a que tal vez nos olvidemos de aquellas imágenes de marzo a abril, en las que veíamos en Europa, a pacientes con respiradores en los pasillos de los hospitales, mientras que acá, no sucedió y realmente todo el que necesitó un respirador lo tuvo en su terapia intensiva, como debe ser".
-¿Qué rescata de este año que termina?
-A nivel interno, en el hospital, rescato la solidaridad. Creo que el personal ha sido sumamente solidario con el compañero que se tuvo que aislar, con el que se enfermó. Muchas veces el personal se sobrecargó de horas para poder venir a cubrir al compañero que estaba preocupado por posible enfermedad de Covid. La solidaridad, y el esfuerzo creo que son dos palabras que definen este momento.
-También hubo incertidumbre, angustia y se necesitó contención...
-Sí, tuvimos varios momentos así, se vivieron situaciones de mucha tristeza, como cuando pasó el cortejo para despedir al jefe del Cobem (Ramón Gamarra, falleció por covid) por la puerta del hospital. Se vivieron momentos duros cuando a médicos de nuestra Terapia Intensiva se les murió algún familiar por Covid y tenían que seguir viniendo a hacer la guardia, a atender a otros pacientes.
-En ese contexto, no sólo se tuvo que atender el Covid...
Por supuesto. Se vivieron distintas situaciones diarias en el marco de la emergencia por Covid; esos casos no dejaron de existir y nos pusieron en jaque: politraumas de chicos muy jóvenes, cirugías cardíacas, embarazadas Covid, que un padre tenga que conocer su hijo por una videollamada por teléfono. Hay un montón de anécdotas que uno realmente podría contar de lo que se vivió este año. En el día a día, que es tan rápido, la vorágine nos lleva a que tal vez nos olvidemos de aquellas imágenes de marzo a abril, en las que veíamos en Europa, a pacientes con respiradores en los pasillos de los hospitales, o en una camilla, mientras que acá, en Santa Fe, por suerte y por todos los equipos de salud, no sucedió y realmente todo el que necesitó un respirador lo tuvo en su terapia intensiva, como debe ser.
-Superada la pandemia llegará el momento de hacer un balance, para poder poner blanco sobre negro respecto de lo que se hizo bien y lo que se podría haber hecho mejor, pero a simple vista hasta aquí los resultados parecen ser positivos...
-Sí, después podemos discutir si estamos terceros, o cuartos, o no se qué? Pero hasta aquí lo que se vio es que el que se enfermó tuvo respuesta en los equipos de salud. Luego en política yo nunca me voy a involucrar, porque yo de las grietas no participo, pero sí quiero defender y destacar la labor que cumplieron los equipos de salud en el interior del hospital.
Carta abierta (escrita en marzo)
Hoy te hablo a VOS querido “EQUIPO DE SALUD”. Hoy está por empezar el partido más importante de nuestra vida como sociedad y es ahí, donde necesito que a este PARTIDO, VOS!!!!! lo juegues de titular, más que nunca te necesito en la cancha, en la trinchera poniendo el cuerpo, como siempre lo hiciste.
Hoy necesito que dejes tus miedos de lado, que confíes en que te vamos a cuidar que vamos a estar todos codo a codo peleando en esta batalla, NADIE se puede quedar afuera, los necesitamos a TODOS. HOY más que nunca hay que ponerse ese traje de héroe que nos identifica y hacer honor al mismo; no nos podemos quedar en el banco de suplente, no podemos acusar lesión, no nos saquemos “roja” para no poder jugar este partido, sino por el contrario pongámonos la cinta de capitán, pidamos la pelota y hagamos frente a este momento. Y no sólo te necesito ahí, sino que además lo hagamos con una sonrisa, que cuando el cansancio nos quiera ganar, apretemos los dientes debajo de ese barbijo y pensemos en cada uno de nuestros seres queridos y sigamos luchando por ellos, con el orgullo de saber que estamos ahí jugando este partido por cada uno de los santafesinos que nos necesitan.
Por todo esto es que te digo: “TE NECESITO”, quiero pelear codo a codo con vos esta batalla, quiero que sepas que estoy orgulloso de pertenecer a este “equipo de salud” y a pesar de no poder abrazarnos, al concluir nos daremos cada uno la sonrisa más grande de satisfacción por el deber cumplido, con la tranquilidad de poder volver a casa y que no sólo nuestra familia sino la sociedad entera estará orgullosa de cada uno de nosotros porque podremos ir al super, verdulería, almacén y decir que uno jugó ese partido y allí estaremos con el cansancio que nos pueda quedar en el cuerpo pero con el HONOR Y LA GRANDEZA EN EL ALMA.