Analizan "reajustes" en los controles nocturnos y multas más altas en casos de ruidos molestos
Hubo una última reunión entre concejales y funcionarios: uso del espacio público, sonido e higiene de los locales nocturnos, los temas discutidos. Desde el municipio evalúan reestructuraciones del área de Control de cara a la futura ordenanza para regular la noche, con equipos para monitoreos remotos de ruido y más agentes.
Analizan "reajustes" en los controles nocturnos y multas más altas en casos de ruidos molestos
En la tarde de este jueves, se reunieron alrededor de una misma mesa concejales de los distintos bloques políticos del Concejo y funcionarios municipales. Fue el último encuentro para discutir y pulir aspectos sobre la futura ordenanza para ordenar y regular las actividades nocturnas en la ciudad de Santa Fe.
El Litoral ya viene contando en sendas notas periodísticas cómo se está trabajando "puertas adentro" del Concejo en lo que sería el despacho final del proyecto de ordenanza sobre nocturnidad, y qué cambios podrían reverse en temas como insonorización acústica, niveles mínimos para determinar si un ruido es molesto, matinés para menores de 18 años, etcétera.
Y con este encuentro entre ediles y funcionarios, era necesario indagar sobre qué puntos el municipio está tomando nota en lo que respecta a sus competencias sobre la noche santafesina. De la reunión participaron el secretario de Gobierno, Federico Crisalle; el de Control, Fernando Peverengo; Horacio Coutaz (Director de la Justicia Administrativa de Faltas) y Matías Schmüth, secretario de Producción y Desarrollo Económico municipal.
Los controles a la salida de locales bailables, otro de los tópicos clave.
Fue el propio Schmüth quien adelantó a El Litoral que la intención del municipio es "incorporar más recurso humano" para los controles municipales nocturnos. "Se está pensando en una reestructuración de la Secretaría de Control (siempre en sintonía con la regulación de la nocturnidad) para poder luego aplicar y ejecutar correctamente la ordenanza", declaró a este diario.
Esta reorganización del esquema del área de Control municipal que está en evaluación implicaría redefinir "cómo se realizarán las inspecciones, que haya un control más integral, que los agentes municipales tengan mayor capacitación... Todo para que se pueda generar una supervisión más adecuada para la nueva normativa", aseveró.
Además se analiza cómo se medirán los decibeles y cómo se obtendrá información (si es que habrá finalmente un monitoreo permanente). "No hay un área técnica abocada a esto (la medición de sonidos nocturnos) que a su vez pueda trabajar coordinadamente (con los agentes de calle). El tema de los equipamientos para alertas de sonido también se está evaluando desde la Municipalidad", adelantó Schmüth.
Finalmente, otra de las cuestiones que se está considerando es hacer más gravosa la multa en casos de ruidos molestos: "Hoy el mínimo de la multa (por esta infracción, generar ruidos molestos al vecindario) es de apenas 8 mil pesos. Nos parece que resulta un monto escaso en términos sancionatorios", consideró el secretario.
Generalidades
En la reunión entre concejales y funcionarios se habló sobre los ejes macro que orientarán la nueva ordenanza que regulará la noche santafesina para los próximos 10 ó 15 años: acustización de los espacios, el sonido, seguridad y aforo y la higiene de los locales nocturnos de esparcimiento.
La reunión entre ediles de los distintos bloques y funcionarios municipales se realizó en la Sala Zapata Gollán del Concejo.
"Esos son los ejes generales que tienen que regir en el mensaje final, y después habrá que ir 'ecualizando' las distintas cuestiones más puntuales", dijo Matías Schmüth.
-Dentro de esos grandes ejes, ¿cuáles son los temas que habrá que afinar o revisar del mensaje original? ¿La insonorización acústica será obligatoria para locales con posibilidad de música y baile, por ejemplo?, consultó El Litoral.
-En la reunión no se plantearon temas puntuales. Se habló más de generalidades y no tanto de cómo resolver el complejo articulado de la ordenanza. Pero tanto la insonorización, los horarios, el uso del espacio público son cuestiones a consensuar. Si bien la tarea la tiene ahora el Concejo, la intención es hacerlo de manera conjunta para lograr una herramienta que sirva a toda la ciudadanía.