Un "oasis" deportivo que le da un espacio de contención a los chicos más vulnerables de Santa Fe
El Apache Fútbol Club de barrio Santa Marta comenzó a construir bloques de hormigón en plena pandemia. El potrero que tenían se convirtió en un polideportivo y un salón de usos múltiples que dan cobijo a más de 400 chicos. En total, unos 6 mil niños y adolescentes participan de los torneos de la Liga.
Un "oasis" deportivo que le da un espacio de contención a los chicos más vulnerables de Santa Fe
Los clubes que participan en la Liga Infantil de los Barrios de Santa Fe en su mayoría nacieron a partir de un potrero de fútbol 11, en terrenos abandonados que fueron recuperados por los vecinos para darle un espacio deportivo a los chicos de los alrededores.
En barrio Santa Marta, ubicado en el noroeste de la ciudad, está el Apache Fútbol Club. En plena pandemia, los dirigentes de la institución se organizaron y comenzaron un emprendimiento de bloques de hormigón con la idea de construir un polideportivo para el barrio.
Con la bloquera en marcha y la necesidad de hacer crecer la infraestructura del club, a través de la gestión de la Liga Infantil de los Barrios consiguieron el financiamiento de la Secretaría de Integración Socio Urbana de Nación (Sisu) y pusieron manos a la obra para concretar el polideportivo. En tiempo récord levantaron un gimnasio cubierto, que cuenta con cancha de básquet y fútbol 5 -equipado con luminaria led-, un salón de usos múltiples y vestuarios, espacios que fueron inaugurados en abril de este año.
"La bloquera comenzó con la idea de poder construir nuestro propio espacio, los adolescentes se acercaron y así empezaron su primer trabajo", recordó Vanesa Tapón, referente de Apache FC. Crédito: Flavio Raina
Vanesa Tapón, referente de Apache Fútbol Club, dialogó con El Litoral e hizo un repaso de la experiencia y el trabajo que llevan adelante en este barrio vulnerable. "La bloquera comenzó con la idea de poder construir nuestro propio espacio, los adolescentes se acercaron y así empezaron su primer trabajo", señaló Tapón.
Los bloques que generan unos 10 pibes del barrio también son ofrecidos al resto de los clubes que integran la Liga Infantil, se los venden a precio de producción y varias instituciones iniciaron obras para darle valor y comodidades a sus espacios.
Situaciones extremas
Barrio Santa Marta no está ajeno a las situaciones de vulnerabilidad, es por eso que desde el club hay un grupo de mujeres que se encargan de dar los martes, miércoles y jueves más de 600 raciones de comida, y los lunes y viernes sirven una merienda nutritiva a los chicos que se acercan a practicar deportes.
En el día a día, quienes trabajan en este espacio hacen frente a situaciones complicadas, aparejadas al contexto de pobreza y vulnerabilidad en el que vive la mayoría de los chicos y adolescentes que hacen del club su segunda casa. "Todos los clubes atraviesan situaciones transversales. Por ejemplo, a nosotros se nos desmayó un pibe jugando a la pelota un domingo temprano y nos dijo que hacía tres días que no comía; otros sufren la falta de contención de sus padres; también situaciones de abuso que nos atraviesan", señaló Tapón.
En el polideportivo, además de la práctica de fútbol y básquet, se realizan talleres de peluquería, inglés, clases de defensa personal, ayuda escolar, contención psicológica y encuentros de religión. También recibirán en los próximos días el servicio de asistentes sociales para hacer un análisis de la situación, poder brindarle herramientas a las familias y al mismo tiempo el club reforzarse en las condiciones que sean necesarias.
"Buscamos que los chicos puedan tener lindas experiencias, entendemos que el club es una buena opción para eso. Solo no se salva nadie y los únicos condimentos que se necesitan es ponerle garra y corazón a lo que se hace", remarcó la referente del club.
La Liga
La Liga Infantil de los Barrios nació en 2013 compuesta por clubes de barrios populares de Santa Fe, que se encuentran en los márgenes de la ciudad. Actualmente participan unos 30 clubes de barrios periféricos del Gran Santa Fe, además de los situados en la capital provincial, se suman desde Recreo, Santo Tomé, Sauce Viejo y en La Costa.
En el certamen, que se juega los domingos, participan unas 6.000 personas, desde niños y niñas hasta adolescentes, en equipos mixtos y femeninos. "La liga surgió por la necesidad de que existan espacios deportivos y sociales en los clubes de barrios, ya que si uno mira los clubes tradicionales están todos concentrados en el centro y en los barrios populares no había", comentó comentó Mariano Montagna, referente de la Liga Infantil de los Barrios y explicó que "se organizó a estos espacios deportivos con un marco donde puedan hacer deportes a un costo muy bajo, para que todos puedan acceder y jugar en la liga".
El polideportivo cuenta con un gimnasio cubierto con cancha de básquet y fútbol 5. Crédito: Flavio Raina
Además del proyecto que se concretó en barrio Santa Marta con el polideportivo, se gestionaron otras obras con la Sisu, como el salón de usos múltiples en el Club Barca FC de barrio Yapeyú y en Alto Verde, el Club Arroyito Seco, está en ejecución una pileta semiolímpica techada y climatizada, que se prevé inaugurar antes de fin de año.
Ayuda social
Más allá del fútbol y lo enriquecedor que es el deporte para los chicos desde temprana edad, quienes organizan la liga no desconocen las dificultades que afrontan a diario las familias, en relación a las carencias económicas y sociales. "Tenemos otros proyectos y líneas de acción, por un lado en Las Flores funciona una panadería que produce la panificación para 15 copas de leche de diferentes clubes", indicó.
En línea con el trabajo social determinante para atender muchas situaciones complejas que se encuentran en cada fecha de la liga, Montagna mencionó que "desde hace mucho tiempo que hay problemas estructurales, de trabajo digno en muchos casos y se suma la crisis social y económica que complejiza la realidad de cada familia y luego se traslada a la vida del club y la liga. También hay niveles de violencia que afectan a este tipo de liga y en los que debemos seguir trabajando".
Con los bloques de hormigón, construidos por los mismos vecinos de Santa Marta, pudieron levantar las paredes del salón de usos múltiples y los vestuarios. Crédito: Flavio Raina
Para sintetizar la misión de la liga, el referente analizó: "El pensamiento de la liga es que los clubes de barrio son fundamentales para generar prácticas virtuosas en la sociedad. Los clubes en los barrios populares nacen con altos niveles de precariedad y por eso se necesita más organización y apoyo del Estado para revertir esa situación y que las instituciones puedan contener a los jóvenes y puedan construir un proyecto de vida en el club".
Aporte municipal
Días atrás, la Municipalidad de Santa Fe otorgó la primera cuota de un aporte total no reintegrable de $4 millones a los referentes de la Liga Infantil de los Barrios. Este aporte está establecido por Ordenanza del Concejo, en el cual el municipio debe transferir una colaboración a la agrupación, para solventar gastos de traslado de los equipos de hockey y fútbol, a la hora de disputar sus torneos.
Mariano Granato, secretario General del municipio, explicó que "la Liga Infantil de los Barrios hace un aporte muy importante a la realidad social que está viviendo no sólo nuestra ciudad, sino el país". En este sentido destacó que el municipio pueda "fortalecer el trabajo conjunto que hacemos con esta institución", para que se generen "políticas públicas, como el programa de fortalecimiento de instituciones deportivas".