Dos obras emblemáticas que llegan para mejorar los servicios del área metropolitana
La ejecución del Gasoducto Santa Fe y la nueva planta potabilizadora de Assa son un hecho. Ambos trabajos se iniciaron en la segunda parte del 2022. En el caso de la ampliación del predio de barrio Candioti, el avance es del 10% y tiene un plazo de dos años. El Gasoducto prevé completar el desafío de cruzar la laguna Setúbal durante el primer mes del 2023 .
Dos obras emblemáticas que llegan para mejorar los servicios del área metropolitana
Dos obras de gran importancia para los servicios públicos de Santa Fe y su área metropolitana comenzaron a gestarse este 2022 y tendrán su finalización durante el 2023. Por un lado se lleva adelante la ampliación de la planta potabilizadora Marcial Candioti de la ciudad de Santa Fe para mejorar el suministro de agua potable. La otra obra emblema es la del Gasoducto Santa Fe, que durante los últimos meses de este año empezó a ejecutarse y apunta a proveer de gas natural al norte de la capital santafesina como a siete localidades aledañas.
En el caso de la planta potabilizadora de Aguas Santafesinas (Assa), la obra se ejecuta con una inversión del gobierno nacional superior a los $ 5.000 millones y se trata de trabajos encarados por el Gobierno de Santa Fe, a través de Aguas Santafesinas, y que cuentan con financiamiento del Ente Nacional de Obras Hídricas de la Nación.
Las obras tienen un plazo de ejecución contractual de dos años y están a cargo de la Unión Transitoria de Empresas, conformada por Obring S.A.-Supercemento S.A.I.C. - Basaa Constructora S.A. "Es un hito histórico para el servicio de agua potable ya que posibilitará un incremento de producción del 75 por ciento, con un horizonte de servicio al año 2050, acompañando el crecimiento urbano y poblacional", destacaron desde Assa.
La intervención incluye todas las etapas del proceso, desde la captación de agua de río con la ejecución de una nueva toma, el tendido de un nuevo acueducto de transporte de agua cruda, la construcción de dos módulos de tratamiento de alta tasa, nuevos edificios de almacenamiento y dosificación de insumos, equipamiento operativo y sistemas eléctricos y una nueva estación de bombeo a la red. Paralelamente se construirá un emblemático edificio para alojar el laboratorio regional de control de calidad del servicio de 1.600 metros cuadrados cubiertos.
El movimiento de suelo se está completando. La tarea demandó un relleno de más de 6.000 metros cúbicos de suelo para la nueva planta potabilizadora. Créditos: Pablo Aguirre
Tareas actuales
El avance ronda el 10% global –incluidos trabajos y acopios de materiales-. Actualmente está concluyendo el movimiento de suelo que fue necesario para las estructuras a construir que demandó un relleno de más de 6.000 metros cúbicos de suelo seleccionado y compactación con equipos pesados, la ejecución de 130 pilotes de 80 centímetros de diámetro y 12 metros de profundidad que servirán de soporte de los módulos de producción de alta tasa, se inició el tendido del nuevo acueducto de agua cruda de 1,2 metros de diámetro ejecutado en un tramo de más de 200 metros de los 850 previstos, cada uno de los conductos pesa 3,5 toneladas.
Los pasos siguientes son finalizar la ejecución de los pilotes de las fundaciones y luego proseguir con la losa de base y estructuras de los módulos de tratamiento que demandarán la utilización de más de 3.000 metros cúbicos de hormigón, equivalentes a la estructura de hormigón armado de 13 edificios de 3 pisos y planta baja.
También se iniciará el tendido de las cañerías del nuevo desagüe de la planta que tendrá un recorrido de casi 400 metros de extensión, que ya están acopiados en el puerto local al igual que los caños camisas necesarios para los pilotes del muelle de la futura toma de captación.
El Gasoducto Gran Santa Fe tiene como primer gran desafío el cruce de 1.850 metros de la laguna Setúbal para llevar así gas natural a las localidades del área metropolitana de la capital provincial: Recreo, Esperanza, Monte Vera, Ángel Gallardo, Arroyo Aguiar, San José del Rincón y Arroyo Leyes.
La ejecución de los trabajos inició a finales de octubre con la instalación de los obradores en las cabeceras desde dónde se trabaja para cruzar los casi 2 kilómetros de caños por debajo del lecho lagunar, a unos 25 metros de profundidad. Debido a la crecida del río Paraná y la variación de más de un metro del nivel, los tiempos para realizar la perforación se dilataron.
Así todo, la obra no se detuvo y las tareas se apuntaron a soldar más de 4.000 metros. En total, el gasoducto tiene unos 47 kilómetros de largo. Mientras se aguarda que las condiciones del río permitan la perforación, se continúan trabajos en simultáneo.
Cuando llegue la máquina encargada de la Perforación Horizontal Dirigida (PHD) se ubicará en Chaco Chico, desde donde realiza una perforación inicial mediante la inserción de un dispositivo de perforación con un "trépano" en el final (una herramienta giratoria que se emplea en excavaciones). Los trépanos son huecos para permitir el paso del fluido de perforación, que lubrica y refrigera el dispositivo y ayuda a expulsar las formaciones rocosas hacia la superficie.
Este cruce se efectúa mediante sistemas de seguimiento, teledirigidos, formando una suerte de túnel entre uno y otro extremo, que se debe ubicar a una profundidad determinada por los estudios de suelo, varios metros por debajo del lecho de la laguna.
Desde la otra costa, donde ya se preparó la columna de caños, esta cañería es insertada en la perforación realizada por la mecha piloto. Al finalizar, el caño ya está listo para ser soldado al resto del gasoducto. Cada compuesto utilizado en el proceso es de origen orgánico, biodegradable y sometido a procesos de control durante todo el procedimiento de perforación.