Paseo de la Laguna: la Municipalidad de Santa Fe quiere dar de baja la obra
“Vamos a dar de baja el contrato y acomodaremos la tierra para que se pueda usar la playa y el paseo”, dijo el intendente, Juan Pablo Poletti. La obra hídrica es al fondo de la Costanera Este y había comenzado el año pasado. Quedó en el “tendal” de obras paralizadas por el nuevo gobierno nacional.
Paseo de la Laguna: la Municipalidad de Santa Fe quiere dar de baja la obra
La Municipalidad de Santa Fe pretende dar de baja el contrato que tiene con la constructora encargada de la obra del Paseo de la Laguna “Néstor Kirchner”, al fondo de la Costanera Este de la ciudad, y reabrir el espacio público como paseo y playa. Esta es una de las 13 obras públicas que se estaban ejecutando en la ciudad de Santa Fe con fondos nacionales y quedaron paralizadas. Y está en el “paquete” de reclamo que le hizo el intendente de la ciudad, Juan Pablo Poletti, al ministro del Interior de la Nación, Guillermo Francos, en una reunión llevada a cabo a fines del mes pasado en Rosario.
Luis Cetraro.
El Paseo de la Laguna no es sólo un paseo. Es también una obra de defensa hídrica ante crecidas de la laguna Setúbal, que es parte del sistema del río Paraná. La idea era continuar la Costanera Este hasta el fondo del paseo, donde comienza el canal de desagote que la separa de barrio El Pozo. Así, lo que defiende esta obra hídrica es todo el Parque Tecnológico y Científico y la Universidad Nacional del Litoral. Recién había comenzado y, en palabras de Poletti, es casi un hecho que no continuará.
Manuel Fabatía.
“La obra tiene 11,98 por ciento de avance”, comenzó diciendo el intendente, en diálogo con El Litoral. “Vamos a tratar de que se dé de baja el contrato y coordinaremos con la empresa para poder acomodar la tierra y la arena para que pueda volver a usarse como paseo y playa”, anticipó el mandatario ante la consulta periodística sobre el futuro de la obra, que está paralizada y llena de yuyos.
Fernando Nicola.
Habilitar el paseo
Ante la falta de recursos para continuar la obra, lo que pretende la Municipalidad es “que no esté inhabilitada y enrejada”, dijo Poletti. “Hoy en día no tenemos ni el paseo ni la playa que teníamos antes, porque no se pueden usar”, justificó. Por tal motivo y “ante la negativa de la Nación de continuar la obra, la idea es realizar el movimiento de tierra para que se vuelva a usar”, reforzó.
Manuel Fabatía.
“Hay que ver si Nación nos firma la baja del contrato para que podamos desentender a la empresa y poder hacer el movimiento de suelo necesario que nos permita volver a usar eso como playa”, dijo Poletti.
La obra del Paseo de la Laguna es un proyecto que inició la anterior gestión municipal de Emilio Jatón, en junio del año pasado, con financiación del Estado Nacional. Lo que se hizo fue el movimiento de suelo para nivelarlo y se había iniciado la construcción de los 700 metros de desagotes pluviales del futuro bulevar que iría sobre el suelo, que hace las veces de defensa costera. Dichos desagotes volcarían los excedentes pluviales en ambos extremos del paseo hacia la laguna Setúbal.
Fernando Nicola.
Hasta el cambio de gobierno -en todos los niveles del Estado- y el posterior desbarajuste económico que sufre el país desde entonces, la obra venía ejecutándose dentro de los plazos previstos y los funcionarios esperaban terminar de construir un primer sector para el inicio de la temporada estival que pasó.
El Paseo de la Laguna era ejecutado por la empresa constructora que había ganado la licitación pública, Coemyc SA, con un presupuesto oficial autorizado por el gobierno nacional de unos $833 millones, a cifras del año pasado, y un plazo de ejecución de 240 días. La firma había recibido un anticipo económico para iniciarla y ya había presentado los certificados para recibir más fondos y poder continuarla. Pero todo se detuvo cuando el nuevo presidente, Javier Milei, anunció que no iba a financiar más obras públicas en el país, en el marco de un mega recorte presupuestario y ajuste que lleva adelante, en pos de alcanzar el déficit cero.
Manuel Fabatía.
Preocupación hídrica
El problema ahora no es sólo la paralización de la obra y el anuncio del intendente Poletti de intentar dar de baja el contrato y habilitar nuevamente el paseo como quedó, sólo nivelando el suelo y cortando los yuyos. El problema más grave es que se trata de una obra de defensa contra inundaciones.
"Previamente a esta obra, los desagües habían estado mal diseñados, por lo que se generaron cárcavas”, advirtió en su momento la ingeniera hídrica Silvina Sierra, quien por entonces estaba al frente de la secretaria de Infraestructura y Gestión Hídrica del municipio. “Por eso este proyecto está diseñado priorizando el espacio de playa que va a duplicar a la existente y las descargas (pluviales) serán en los extremos para que no erosionen taludes", dijo el año pasado en declaraciones a la prensa, durante una recorrida de obra, cuando estaba en marcha.
Manuel Fabatía.
Lo que se pensó en el proyecto fue la reconstrucción de los taludes originales y una vez terminados, la colocación de las mantas protectoras, similares a las que están sobre Costanera Este. Para asegurar la defensa costera se iban a construir 127 metros lineales de talud revestido con una manta de bloques de hormigón armado y 306 metros lineales de talud revestidos con colchonetas tipo Reno rellenas con piedras.
Nueva costanera
Para tomar estas decisiones en el proyecto, los funcionarios de turno habían consultado a los especialistas del Instituto Nacional del Agua (INA), quienes debieron realizar estudios topográficos y geomorfológicos en la zona, los que contemplaban el riesgo hídrico.
Manuel Fabatía.
Si la obra no se paralizaba estaba previsto que todo lo que tiene que ver con la primera etapa, para mitigar el riesgo hídrico, se terminase en marzo pasado. En la segunda etapa se construiría una calzada única de 7 metros de ancho con doble sentido de circulación y se harían bocas de tormenta y de registro. También se previó la construcción de un estacionamiento de 13 dársenas para vehículos en paralelo, 103 dársenas de estacionamiento de vehículos en 45º sobre superficie absorbente, cinco espacios para motos y siete bicicleteros.
Todo el paseo iba a contar con iluminación Led, con 34 columnas de iluminación de calle con un brazo de iluminación hacia la bicisenda y vereda; y 24 columnas bajas para los senderos peatonales. Para que el lugar conservase un ambiente natural, en un cantero central se iban a plantar 78 de árboles nativos. En este espacio se ubicarían bancos de hormigón y bebederos.
Archivo.
Todo quedó escrito en un papel y en un dibujo de maqueta digital. Lo mismo pasó con el sueño de construir luego un puente peatonal sobre los antiguos pilares del FFCC que cruzan la Setúbal, para conectar así la Costanera Oeste desde el Faro con la Costanera Este, en el inicio de este Paseo de la Laguna, como se pensó cuando se anunció la obra.