Entrevista a la Lic. Alba Imhof, especialista en medio ambiente
Cómo podrían impactar en la ciudad los incendios en la selva amazónica
Una experta santafesina trazó posibles escenarios sobre la incidencia de la catástrofe ambiental que vive Brasil. Con la pérdida de plantas, la absorción del agua será menor y ésta podría “bajar” a nuestra región. También habría alteraciones en los ciclos de lluvia. Y es probable que, en partículas pequeñas, el humo esté en la ciudad.
Xinhua (190827) -- MANICORE, 27 agosto, 2019 (Xinhua) -- Imagen del 26 de agosto de 2019 proveída por Agencia Estado de las secuelas de un incendio, en la región de Manicoré, estado de Amazonas, Brasil. (Xinhua/Gabriela Biló/Agencia Estado) (ae) (jg) (ah) (ce) ***PROHIBIDO SU USO EN BRASIL***
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¿Podrían los dramáticos incendios en la selva del Amazonas impactar en el medioambiente, alterar las alturas hidrológicas de la cuenca del Paraná y los ciclos de lluvia de la ciudad y la región? Ésos fueron los disparadores que motivaron una charla con la Lic. Alba Imhof, profesora de la cátedra de Educación Ambiental (Fhuc/UNL) y experta en temas medioambientales, en una entrevista realizada durante el programa “En el umbral”, que se emite por la señal de CyD Litoral.
A nivel mundial, aún se desconoce cuál será el impacto real en el mediano y largo plazo de los incendios que castigan al lugar que muchos consideran como el “pulmón” del planeta. Sí se sabe que 400 grupos aborígenes de Brasil están padeciendo la situación; unas 40 mil especies vegetales, y 6 mil animales. Ocurre que la selva amazónica tiene funciones ecosistémicas básicas para el resto de continente: esos efectos negativos van a existir, pero no se verán en lo inmediato.
Esa regulación del ecosistema se ve, por ejemplo, en las plantas: “Las raíces (de las plantas) absorben agua y fijan el suelo. Brasil, cada tanto tiene desplazamientos de barro. ¿Por qué se producen? Porque no hay raíces que fijen el suelo, debido a una intensa deforestación. Prevemos que en algunos años va a aumentar la desertificación de esos suelos amazónicos, y empezarán los corrimientos de tierra e incluso más inundaciones. Toda el agua que esa selva retenía y absorbía como una ‘esponja’, quizás bajará”, explicó Imhof.
—Acá en Santa Fe, miramos de cerca las lluvias de Brasil, por la cuenca del Paraná. ¿Qué impacto pueden tener estos incendios en el ciclo de lluvias, o en eventuales crecidas de ríos?
—De ese impacto no nos podremos dar cuenta en lo inmediato. Pero estamos en un mundo que es global, y lo que pasa en el Amazonas va a repercutir en todo nuestro ecosistema. La selva tiene mucha relación con el ciclo de aguas dentro de América. Todo lo que ocurra allí repercute en la salud de la población (de ese país), pero también en nosotros.
Por ejemplo, puede aumentar más la temperatura, o haber desbalances en los niveles de oxígeno. Pensemos que la región de la selva amazónica ocupa casi la mitad de toda la extensión de Brasil: unos 7 millones de kilómetros cuadrados. Todo desequilibrio que ocurra a la larga o a la corta termina repercutiendo en todos nosotros.
Y con respecto al humo de los incendios —y la eventual llegada de éste a la ciudad—, Imhof consideró: “Probablemente ya estemos con parte de ese humo, aunque no hay estudios científicos que refrenden esto —aclaró—. La ceniza gruesa está sobre el Amazonas; el viento llevará las partículas más grandes hacia las ciudades cercanas (San Pablo, por ejemplo). Y las partículas más finitas irán más lejos. Entonces, posiblemente en nuestra zona tengamos o tendremos esas cenizas más finas, que pueden llegar a molestar a las personas que tienen problemas respiratorios.
Invierno seco y la deforestación
Sobre las causas de los incendios en la selva amazónica, la licenciada explicó que hay una conjunción de factores: “Primero, en el Hemisferio Sur tenemos estacionalidad: verano húmedo e invierno seco. Normalmente hay incendios en esta época. El invierno deja mucho material propenso a combustión (hojas o ramas secas). Pasa en nuestro país y en Brasil, lo mismo”.
Pero también —y aquí se explayó, “influyen las prácticas productivas de hacienda, donde muchos productores buscan ‘ganarle terreno’ a la selva. Éstos primero desmontan, retiran lo que pueden pero queda mucho vegetal seco. Y luego recurren a prender fuego a esa zona deforestada, y así contar con el terreno limpio para el ganado o para sembrar soja. Las políticas de Jair Bolsonaro (presidente del vecino país) han hecho que los controles sobre la selva sean más laxos, y con esto, que muchos se sientan en el derecho de deforestar más allá de lo permitido”.
La biodiversidad y un problema grave
Con los incendios, miles de árboles de cientos de años de vida se perdieron, y una selva madura como la Amazonía está ardiendo. Pero además, toda la fauna que ha sido desplazada —porque huyó del fuego—, cuando vuelva se encontrará sin alimentos, sin agua y sin un territorio adecuado para su reproducción.
“Hablamos de una enorme biodiversidad; los científicos están advirtiendo que se están perdiendo especies que ni siquiera conocemos, que no fueron analizadas ni están en los libros”. La especialista advirtió que el fuego puso en riesgo la cadena alimentaria: “Hay animales que comían determinadas plantas y que con el incendio éstas ya no están más; otros animales que se alimentaban de esos animales que comían aquellas plantas que ya no están, también desaparecerán”.
En este último punto dio una definición certera: “Es como una cadena rota; y se va produciendo toda una modificación del entorno de la biodiversidad que demorará muchísimo tiempo en recomponerse, nunca en restaurarse: nunca, después de esto, volveremos a tener la misma selva”.
Gentileza Alba Imhof Amazonas cumple una enorme cantidad de funciones ecosistémicas clave. Baja la temperatura, libera oxígeno y disminuye las emisiones de dióxido de carbono, y este incendio ahora las está aumentando. El impacto ambiental es muy grande , dijo Imhof.
“Amazonas cumple una enorme cantidad de funciones ecosistémicas clave. Baja la temperatura, libera oxígeno y disminuye las emisiones de dióxido de carbono, y este incendio ahora las está aumentando. El impacto ambiental es muy grande”, dijo Imhof. Foto: Gentileza Alba Imhof
El trasfondo político
Bolsonaro ha declarado públicamente ser anti ambientalista. Y el medioambiente “ha sido la cuestión más floja durante muchos años en Brasil”, añadió Imhof. “Todos los países quieren producir, y ya no hay buenas tierras para eso. Entonces, los que producen tratan de avanzar sobre terrenos nuevos. Y al presidente actual de Brasil, lo único que le interesa es producir cueste lo que cueste, sobre todo soja y carne para exportar. Pero además, Bolsonaro tiene una política muy contraria a la defensa y preservación de la vida de los pueblos originarios”, concluyó la licenciada.
El Litoral La foto fue tomada días atrás, durante la puesta del sol en la Costanera Oeste (cerca del Faro). Si bien no se puede aseverar científicamente que ese efecto grisáceo sea por la ceniza de los incendios, el sol se ve así cuando hay polvo en la atmósfera.
La foto fue tomada días atrás, durante la puesta del sol en la Costanera Oeste (cerca del Faro). Si bien no se puede aseverar científicamente que ese efecto grisáceo sea por la ceniza de los incendios, el sol se ve así cuando hay polvo en la atmósfera. Foto: El Litoral