Lunes 27.5.2019
/Última actualización 11:54
“El río debería estar un metro más alto para estar en los parámetros normales. De igual manera, en el canal de acceso al puerto para embarcaciones de gran porte no se dificulta la navegación y tampoco hay complicaciones en los canales de derivación hasta el Puente Colgante y hasta el Salado”, informó Jorge Fleitas, prefecto principal de la Prefectura Naval seccional Santa Fe, en diálogo con El Litoral.
Además, el prefecto indicó que el tránsito fluvial de los barcos de carga que navegan rumbo al río Paraná tampoco está afectado por el momento.
“En los únicos lugares que hay que tener cuidado es en la zona de riachos entre islas, porque son sectores que sufren variaciones constantes y pueden aparecer algunos bancos de arena. Lo ideal es que naveguen por lugares que conocen porque aventurarse a lugares desconocidos pueden correr el riesgo de quedarse varados”, advirtió en relación a los conductores naúticos que salen al río de manera particular.
Algunas de las recomendaciones a tener en cuenta que brindaron desde la Prefectura local son:
— Salir con una buena reserva de combustible.
— Preferentemente no navegar de noche.
— Avisar a algún conocido hacia qué lugar van cuando vuelven de navegar, tratar de no estar incomunicado por cualquier inconveniente.
— Respetar la capacidad máxima de carga de la embarcación, tanto en peso como en personas.
— No salir a navegar bajo alerta meteorológica.
— Utilizar chaleco salvavidas en todo tipo de embarcación.
— En caso de emergencia comunicarse al número 106 ó por medio de la radiotelefonía canal 16.
Manuel Fabatia Complicado. El bajo nivel del río afecta a las rampas por las que se botan las embarcaciones en algunos clubes náuticos.Complicado. El bajo nivel del río afecta a las rampas por las que se botan las embarcaciones en algunos clubes náuticos.Foto: Manuel Fabatia
En los clubes náuticos de la ciudad, el bajo nivel del río obliga a tomar algunas medidas precautorias. Desde el Yacht Club Santa Fe informaron a El Litoral que tuvieron que modificar el lugar de amarra de algunas embarcaciones que son de gran calado, para que no se varen y dañen el casco. Mientras que en otras entidades náuticas tienen complicaciones con la rampa por la que se botan las distintas clases de veleros y lanchas, ya que la poca altura hizo que el agua quede lejos de los últimos tramos de la rampa.
Desde los clubes coincidieron en que siempre es preferible el río bajo a que esté en un nivel alto de alerta, debido a que provoca inundaciones en las instalaciones y en muchas ocasiones afecta a las amarras.