Tras la presentación del Presupuesto Municipal 2025 por parte del intendente Juan Pablo Poletti ante el Cuerpo Deliberativo, no se demoraron las opiniones de los concejales, tanto del oficialismo como de la oposición y los “independientes”.
Los argumentos del oficialismo y la oposición en el Concejo sobre la “ordenanza madre” chocaron en sus lecturas. Qué sigue ahora.
Tras la presentación del Presupuesto Municipal 2025 por parte del intendente Juan Pablo Poletti ante el Cuerpo Deliberativo, no se demoraron las opiniones de los concejales, tanto del oficialismo como de la oposición y los “independientes”.
Algunas fueron sanguíneas, otras más mesuradas; es que aún resta tomarse el tiempo para leer la letra fina del mensaje que remitió la Municipalidad al Concejo de Santa Fe.
En resumidas cuentas: lo que se sabe del presupuesto hasta ahora es que prevé egresos y recursos por $225,1 mil millones, con un leve superávit fiscal de $7 millones. Es aproximadamente un 123% más si se lo compara con el cálculo de gastos y recursos del actual.
El municipio estima que el 41% de los recursos serán propios, mientras que el 29% serán nacionales y el 30% restante de la Provincia. El 33% del Presupuesto 2025 se destinará a los principales ejes de la gestión municipal: $41 mil millones para mantener la ciudad limpia, $29 mil millones para que esté iluminada y segura, y $5 mil millones para mejorar el estado de las calles.
Con relación a la Tasa General de Inmuebles (TGI), aseguraron que no habrá cambios de alícuotas, pero que esta tasa se actualizará por la inflación y por el valor del metro cuadrado de construcción. Habrá que ver cómo esto repercute en la Zonas Inmobiliarias (ZI) de la ciudad. Sobre éstos números globales, se emitieron las opiniones.
El concejal Carlos Suárez (Interbloque “Unidos”), consideró que el presupuesto es “realista, equilibrado y acorde a los tiempos que vivimos. Refleja la época actual”. Aquí aludió elípticamente a la escasez de fondos que llegarán a la ciudad desde la Nación.
“Se trata de un presupuesto ajustado a la realidad compleja en todos los niveles del Estado, marcada en gran medida por las políticas nacionales. En este sentido, el presupuesto refleja austeridad y equilibrio”, añadió luego.
Subrayó que se trata de un cálculo de gastos y recursos adaptado “a las necesidades que más reclaman los vecinos”, como orden, limpieza, iluminación, bacheo, erradicación de microbasurales y mejora en los espacios públicos.
“En un contexto con recursos limitados para grandes obras municipales, es esencial cumplir con los servicios y el mantenimiento general de la ciudad”, agregó Suárez.
“Aunque el municipio no pueda emprender grandes obras, el próximo año se pondrá en marcha un ambicioso Plan de Obras Públicas financiado por la Provincia”, dijo después, y aludió al Acuerdo Capital, con las obras sobre la Av. Peñaloza, la calle Larrea, los canteros centrales de avenidas como J.J. Paso, Aristóbulo del Valle y Siete Jefes.
En línea similar, Leandro González, presidente del interbloque oficialista, consideró que hay tres ejes de gestión clave en la “ordenanza madre”: el orden, la seguridad y la limpieza de la ciudad. “Al mensaje lo vamos a estar dialogando con los distintos bloques legislativos para que en diciembre tengamos la herramienta que el intendente necesita para poder gestionar”, anticipó.
Para María Beatriz “Titi” Barletta, quizás la principal vocera del sector de Poletti, el intendente y el gobernador (Maximiliano) Pullaro, “ponen fuertemente la mirada en lo que los vecinos nos piden: iluminación, seguridad, baches y la recolección de residuos”.
El libertario Ignacio Laurenti se sumó a las huestes oficialistas. Dijo que es “un presupuesto muy equilibrado, vemos que se prioriza la iluminación y la limpieza por sobre el arreglo de la calles”. No obstante, aclaró que se hará “un análisis más exhaustivo y evacuaremos las dudas y aportaremos las cuestiones que nos parezcan importantes”.
Una de las primeras en emitir opinión luego de conocer los números globales del Presupuesto 2025 fue Jorgelina Mudallel, del Bloque PJ. “El plan económico propuesto carece de proyectos de gran envergadura y presenta una estructura austera que destina más de la mitad a gastos corrientes”, fustigó.
“El 8%, que son unos 18 mil millones de pesos, está pensado para obras municipales. Pero lo que se anuncia como grandes proyectos son, en realidad, funciones básicas que debe cumplir cualquier municipio. Es un presupuesto un poco pobre en materia de obras”, volvió a cargar.
Aunque el Ejecutivo menciona el deseo de tener una ciudad limpia, ordenada, iluminada y segura, “estas aspiraciones deben ir acompañadas de una gestión efectiva y un trabajo conjunto con los gobiernos nacional y provincial. Son expresiones de deseo que todos compartimos, pero también es necesario que se traduzcan en gestión”, añadió.
Mudallel también hizo hincapié en la necesidad de un “control exhaustivo” para evitar la subejecución presupuestaria. “Todos los años escuchamos las mismas ideas de los intendentes. Lo importante ahora es que se gestione y se resuelvan los problemas de los santafesinos”, agregó.
Por su parte, en declaraciones públicas, la concejala Violeta Quiroz (Mesas de Trabajo - FR) consideró que “se deberá hacer una comparación con el presupuesto actual. Porque nos dicen desde el municipio que la prioridad será una ciudad más limpia, ordenada y segura, con las calles arregladas... Pero esperemos que si esto es así, se cumpla con la palabra empeñada”.
Además, “el intendente (Poletti) dijo que el principal actor en el marco del presupuesto es el vecino. El vecino tiene centralidad, claro. Pero pienso que las empresas recolectoras de residuos (servicio que está tercerizado, al igual que el transporte de colectivos y ahora, el alumbrado público) tienen que cumplir a rajatabla con el servicio, sobre todo en los barrios”, cerró la edila opositora.
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