El Litoral
Se lo confirmó a El Litoral Pablo Seghezzo, director de Vialidad Provincial. La segunda etapa se licitaría en dos meses.
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La obra de la autovía de la Ruta 1 ya está en su tramo final. La fuerte transformación que implica se puede observar sobre todo cuando se circula desde la ciudad de Rincón hacia Santa Fe, ya que este sector tiene pintada la señalética, las sendas peatonales y está colocada la mayoría de los semáforos. Desde Vialidad Provincial estiman que esta etapa se terminará en junio.
“Nuestro objetivo era finalizar los trabajos a mediados de mayo, pero las intensas lluvias de abril generaron nuevas demoras. Ahora, la obra avanza con buen ritmo”, destacó el ingeniero Pablo Seghezzo, director provincial de Vialidad, en una entrevista con El Litoral.
El funcionario también contó que los equipos técnicos de Vialidad trabajan en la elaboración de los pliegos del proyecto ejecutivo de la segunda etapa que prevé pavimentar las colectoras y entubar los desagües que faltan, entre otras obras. El objetivo es licitar este tramo en dos meses.
¿Qué falta de la primera etapa? Las cuadrillas sobre todo tienen que realizar trabajos de demarcación y señalización, pero todavía quedan algunos tramos en los que falta terminar la carpeta asfáltica —en la mano que va de Santa Fe hacia Rincón— y se están colocando los cordones en varios tramos. También hay que sincronizar los semáforos para que el tránsito fluya.
Antecedentes
Para los vecinos, la obra de la Ruta 1 parece eterna. Ya había un proyecto en la segunda gobernación de Jorge Obeid (2003 - 2007) que se bajó porque faltaban desagües. Durante el gobierno de Hermes Binner quedó “semiparalizada”—incluso se “recortó” por motivos presupuestarios un proyecto que incluía las colectoras— y se retomó en la gestión de Antonio Bonfatti, aunque hubo que volver a licitar la obra por un conflicto con el contratista.
En mayo de 2014, la empresa Vial Agro comenzó con la primera etapa de los trabajos, que van a terminar costando unos 300 millones de pesos, aproximadamente. La autovía se realizó en el tramo que va desde el kilómetro 0 de la ruta hasta el ingreso a Rincón (son 6,4 kilómetros).
Los trabajos comprenden la ampliación de calzada, el tendido eléctrico, la iluminación central y la construcción de los desagües. El plan de obra incluyó tres líneas de trabajo. La primera vinculada al tendido subterráneo de la línea eléctrica de 33 kW —que es lo que estaba previsto en la licitación anterior que se cayó—, la segunda es el alcantarillado lateral y transversal a la ruta y la tercera corresponde al cuarto carril.
Los vecinos están intentando adaptarse a los cambios de circulación que supone la obra. Uno de las dificultades es que ya no se puede doblar desde la ruta en cada una de las intersecciones con las calles de arena.
En Rincón, por ejemplo, un grupo de vecinos reclamó porque no se puede acceder a calle Capitán Viñas, uno de los principales ingresos a ese sector de la ciudad. Vialidad aceptó dejar abierto ese ingreso en forma provisoria hasta que se termine de asfaltar la colectora, en la segunda etapa.
Es que las salidas de la ruta se hacen cada 400 metros para mejorar la seguridad vial y el flujo en la autovía. “La verdad es que sería muy complicado que haya intersecciones en todas las esquinas desde el punto de vista de la circulación”, concluyó Seghezzo.