Las lluvias de los últimos meses ayudaron a que haya menos quemas de pastizales en Santa Fe
La humedad en el ambiente contribuye a que los focos ígneos no se propaguen. Desde la Agrupación Bomberos Zapadores están alertas por las condiciones que se den en el invierno.
Las lluvias de los últimos meses ayudaron a que haya menos quemas de pastizales en Santa Fe
En los últimos años en los que prevaleció la sequía y la falta de humedad en el ambiente, las columnas de humo en el horizonte eran habituales, sobre todo en los sectores periféricos de la ciudad de Santa Fe, en zonas cercanas a las rutas que bordean la capital provincial.
Ahora la situación cambió con los factores climáticos que ayudaron a que se vean cada vez menos quemas de pastizales. Con el fenómeno de El Niño instalado en la región desde los últimos meses del 2023, durante este año las lluvias fueron importantes para contrarrestar la presencia de biomasa que pueda expandir focos ígneos. También benefició en este sentido que el río Paraná y sus afluentes estén en niveles medios, dejando menos superficie vegetal que pueda incendiarse.
En diálogo con El Litoral, Rubén Massoni, jefe del Área Técnica de la Agrupación Bomberos Zapadores de Santa Fe, comentó a qué se debe esta disminución en esta problemática que dio que hablar durante los tres años de extrema sequía.
“Por suerte para nosotros en esta época en la que comienza el invierno, ha estado lloviendo y nos ha disminuido la cantidad. Tenemos en los últimos meses un promedio de 40 intervenciones en quemas de pastizales. Hasta hoy, en el año fueron 400”, detalló Massoni. En este tipo de trabajos de los bomberos se incluyen las quemas de restos de poda y residuos.
“Si sigue lloviendo va a disminuir muchísimo la cantidad de intervenciones, como ocurrió en el verano que fue lluvioso y nos ayudó en el trabajo”, indicó Rubén Massoni, jefe del Área Técnica de la Agrupación Bomberos Zapadores de Santa Fe. Foto: Guillermo Di Salvatore
En su mayoría, las salidas del cuartel ante llamados de vecinos tienen que ver sobre todo por focos ígneos de poca magnitud, que se dan en terrenos baldíos o zonas rurales, pero de pequeñas superficies. “La humedad del ambiente no permite que se propaguen fácilmente”, señaló.
Al consultarlo sobre lo que sucede a la vera de la Ruta 168, Ruta 1 y la autopista Santa Fe-Rosario, zonas en las que históricamente se generan este tipo de incendios, el entrevistado mencionó que “hasta el momento es casi nulo, tenemos pocas intervenciones en las áreas cercanas a las vías de comunicación. En la autopista tuvimos dos o tres salidas, en las rutas también”, y reiteró que el principal factor es la humedad que hay en el ambiente, lo que reduce estos riesgos. “En épocas de sequía la vegetación se reseca y es mucho más fácil que se propaguen”, sostuvo.
Si bien hasta ahora las quemas de pastizales no preocupan, la llegada de las bajas temperaturas y las heladas hacen que se ponga mayor atención. “No sabemos cómo se van a comportar las quemas. Si sigue lloviendo va a disminuir muchísimo la cantidad de intervenciones, como ocurrió en el verano que fue lluvioso y nos ayudó en el trabajo”, indicó el jefe del Área Técnica, y agregó que el cuartel en la actualidad tiene sus unidades y personal en condiciones para trabajar en incendios de tipo forestal.
El buen registro de precipitaciones de los últimos meses, sumado al nivel del río en condiciones normales, reducen las áreas donde antes era más propicio la expansión de las quemas de pastizales. Foto: Guillermo Di Salvatore
Las recomendaciones a la población siguen vigentes para que eviten quemar residuos o desechos de poda, que son una de las acciones más comunes y peligrosas al no hacerlo de forma controlada. “Tenemos que seguir haciendo hincapié en la prevención para que la gente tenga en cuenta. No quemar basura ni restos de poda en zonas de pastizales secos y lugares donde se puede propagar fácilmente, sobre todo por el peligro que se puede ocasionar en viviendas cercanas”, recomendó Massoni.
La Agrupación Bomberos Zapadores de Santa Fe incluye como área de intervención, además de la propia ciudad capital, a Santo Tomé, San José del Rincón y va hasta el Túnel Subfluvial. En lo que va del año, las quemas de pastizales, residuos y ramas encabezan el podio de intervenciones con 404 focos ígneos sofocados. Luego le siguen las salidas por incendios estructurales (112); rodados (88); accidentes de tránsito (48).
En todo el 2022 se registraron 1.053 quemas de pastizales; y en el 2023, este tipo de intervenciones tuvo 1.089.