El Litoral
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Está previsto que llegue el avión verificador de la Anac, que hará aterrizajes, despegues y vuelos rasantes.
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A partir del jueves comienza una etapa importante para lograr la habilitación del aeropuerto de Sauce Viejo, que está cerrado por reparaciones desde medianos de junio. El avión verificador de la Administración Nacional de Aviación Civil (Anac) llegará a la estación aérea para realizar aterrizajes, despegues y vuelos rasantes, entre otras pruebas.
Es un control fundamental para lograr la habilitación, que se viene demorando más de lo esperado. El avión verificador va a trabajar el jueves, el viernes y el sábado en el aeropuerto.
El personal de la Anac ya hizo inspecciones sobre el nuevo pavimento de la pista. “Lo aprobaron pero con observaciones. El problema es que todavía no recibí el informe que precisa las observaciones y lo necesitamos para poder corregir y mejorar esos puntos”, contó David Giavedoni, director del Aeropuerto de Sauce Viejo, en diálogo con El Litoral.
La estación aérea está cerrada desde el 19 de junio por la obra de repavimentación de la pista principal. Ahora, el objetivo es lograr la habilitación para los vuelos diurnos, pero el sistema de balizas ya está en Sauce Viejo y no estiman que lleve un tiempo prolongado instalarlo (lo que va a permitir recibir vuelos nocturnos).
Las obras que se están ejecutando en Sauce Viejo —que tienen un presupuesto de más de $ 200 millones — también incluyen la ampliación de la sala de preembarque, sala de arribos y el bar. Además se generarán nuevas superficies como aleros para carga y descarga de equipajes tanto en despacho como en arribos, sala de mantenimientos, comedor y cocina para empleados, y una nueva posta sanitaria con enfermería.
“Los trabajos también incluyen reordenar sectores de oficinas, cocina y vestuarios del bar y se colocará una nueva cinta transportadora de equipaje para las compañías aeronáuticas. También se harán trabajos de refacción en sanitarios y se reacondicionarán los pisos del sector de hall principal”, informaron desde el gobierno de la provincia.
Cuando se cerró el aeropuerto a mediados de junio, el plazo previsto de obras en la pista era de tres meses, pero se prorrogó por las complicaciones para conseguir algunos insumos —que son importados— y por las constantes lluvias del invierno y la primera etapa de la primavera, que atrasaron los trabajos.
En un primer momento, la provincia estimó que a fines de septiembre o principios de octubre podría habilitarlo, pero la fecha luego se fue postergando y ahora se intenta conseguir la habilitación en los próximos días.